Capítulo 8 - Tu presencia

1.9K 102 15
                                    

Quinn

Me costó mucho armarme de valor para decírselo delante de todos, pero recordé las palabras de Sr. Shue cuando me dijo que todos ellos eran mi familia y así como él nos pidió ayuda para la propuesta de la Srta. Pillsbury, yo estaba tomando prestada la ayuda de ellos con su mera presencia. Aunque, al ver que Rachel se había quedado paralizada mirándome, decidí actuar rápido antes de que se arrepintiera. Tengo que ser cuidadosa, para que no me vaya a decir que no. La tomé de la mano y le hablé mirándola a los ojos.

«Rachel, hagamos esto. Cuando salgas de la presentación de tu gran obra de Braodway y yo esté esperándote a la salida, mirando como vienes hacia mí. Te llevaré a algún lago de la ciudad de New York y te daré una caja con un anillo y en ese entonces me dirás si quieres o no casarte conmigo. Ahora lo que te estoy preguntando es si quieres permanecer a mi lado hasta ese entonces, si me dejas amarte hasta ese momento.»

Todos aplaudieron y me avergoncé. Agaché mi rostro al sentir miradas sobre mí, pero las palabras de Rachel me sacaron de órbita.

«No, no quiero que hagas eso.»

El silencio se hizo presente y la miré tragando saliva. ¿No? ¿No quiere casarse conmigo? Quizás fui muy anticipada, fui demasiado rápido.

«Quiero que me des un anillo antes de que me llegue la carta de Nyada, porque si no me aceptan, al menos miraré mi mano y al ver tu anillo, sacaré una sonrisa.»

Mis ojos se llenaron de lágrimas al escucharla. ¡Oh, mi Dios querido! ¡¡Me está diciendo que sí!!

«Rachel, dime que estás bromeando. ¿Realmente te casarás con Quinn Fabray?»

Escuchamos que decían desde la puerta y nos giramos para ver a Finn ahí parado. La furia me llenó. ¿Qué tenía que meterse él? ¿Y qué hace aquí?

«Así es Finn, quiero casarme con ella. A ti no te interesa lo que decida o no.»

Vi a Finn dar un paso y me interpuse delante de Rachel, dejándole claro que no se acercara a ella. Este es mi momento, no pienso dejar que lo arruine.

«¡¡¡Vete Finn!!!»

Él me miró con furia y nuestras miradas se encontraron. Por dentro sentí un fuego, que me subió desde la boca del estómago hasta la garganta. Parecía fuego de dragón a punto de salir. Lo quedé mirando y dibujo esa media sonrisa arrogante que me dan ganas de...

«¿Qué pasa, Quinn? ¿Te arruino el momento? Quizás deberías ir a cuidar a tu hija en vez de estar haciendo propuestas. ¡Ah, claro! Su madre ya está con ella.»

Ahí exploté, no lo soporté más. Corrí hasta él y comencé a golpearlo, él simplemente se reía y me apartaba. Hasta que me enojé y le di una patada en sus partes íntimas y se dobló de dolor. Los chicos me apartaron agarrándome de los brazos y Puck se acercó a él y lo echó, pero antes de irse me miró enojado.

«Tu madre hizo bien en echarte de tu casa, eres peor persona de lo que pensaba.»

Volví a enojarme, quise soltarme para agarrarlo y matarlo a golpes. ¡Maldito imbécil!

Todos me decían que me calmara, Santana estaba igual que yo y la paraban Sam y Mike para que no fuera atrás de Finn. Rachel se paró delante de mí y me agarró del rostro para que la mirara. Al ver que yo de igual manera quería salir corriendo, se lanzó sobre mí y me besó. Esos labios tienen un poder sobre mí... inimaginable. Poco a poco, me tranquilicé y cuando me soltaron, la abracé y devolví ese beso. Ya que recordé que me había dicho que si a mi propuesta. Los demás comenzaron a suspirar, pero estábamos lo suficientemente metidas en nuestro mundo como para escucharlos.

Faberry LovestoryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora