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capitulo cuarenta y cuatro.

Capítulo 44: La Curiosidad que Devora

Los días para Soldier se volvieron una tormenta de emociones y contradicciones. La relación con Torcher, que alguna vez fue cálida y reconfortante, ahora se sentía como caminar sobre vidrio roto. Torcher había comenzado a mostrar un lado más frío, más distante en palabras, pero extrañamente más posesivo en actos. Soldier, sin entender del todo lo que ocurría, bajaba la vista cada vez que Torcher hablaba con él, como si temiera encontrar algo en sus ojos que lo desarmara por completo.

La tensión se hacía más evidente con cada día que pasaba. Incluso los pequeños gestos que solían reconfortar a Soldier, como las caricias de Torcher o sus palabras de apoyo, ahora se sentían vacíos o, peor aún, como una fachada. Pero Soldier, aferrándose a su optimismo, intentaba convencerse de que todo esto era temporal.

Fue en medio de ese caos emocional cuando ocurrió algo que llamó su atención y lo apartó momentáneamente de sus pensamientos. Estaban ambos caminando cerca del área de los laboratorios. Torcher lo llevaba del brazo como de costumbre, asegurándose de que Soldier no se alejara. De repente, lo vieron: Mr. P, el hombre del sombrero café y el mostacho prominente, caminaba apresuradamente hacia el área restringida donde trabajaban los científicos.

Mr. P parecía desesperado. Sujetaba un maletín negro con fuerza, y sus pasos eran tan apresurados que casi tropezaba al girar en una esquina. Soldier, que recordaba haberlo visto junto a Badgey el primer día que llegó, no pudo evitar sentirse intrigado.

- ¿Qué está pasando? - murmuró Soldier, mirando a Torcher con curiosidad.

- No es asunto tuyo, Soldier. Déjalo pasar - respondió Torcher con su tono severo, intentando guiarlo en la dirección opuesta.

Pero la curiosidad de Soldier fue más fuerte. Se soltó suavemente del agarre de Torcher y dio un paso hacia donde había desaparecido Mr. P.

- Solo quiero saber qué está pasando - dijo, intentando sonar casual, aunque su corazón latía con fuerza.

Torcher lo miró fijamente, su mandíbula apretada como si estuviera conteniendo una explosión. Finalmente, suspiró y lo dejó ir, pero no sin antes advertirle:

- Si haces algo que no debas, te arrepentirás.

Soldier tragó saliva, pero decidió seguir adelante. Caminó en silencio, intentando no llamar la atención mientras se acercaba al área restringida. Desde la distancia, podía escuchar voces agitadas provenientes de una sala iluminada. Se asomó con cuidado por una rendija en la puerta y vio a Mr. P discutiendo con Badgey y otros científicos.

- ¡Esto no puede seguir así! - exclamaba Mr. P, golpeando la mesa con una mano. - Necesitamos resultados ya, o todo esto será en vano.

- Estamos haciendo lo que podemos - respondió Badgey, claramente nervioso. - Estos experimentos no son algo que pueda acelerarse.

- No me importa cómo lo hagan, pero háganlo. No voy a permitir que este proyecto falle.

Soldier no entendía de qué hablaban, pero las palabras "experimentos" y "proyecto" le provocaron un escalofrío. Intentó acercarse un poco más para escuchar mejor, pero accidentalmente golpeó una caja cercana, haciendo que el ruido llamara la atención de los presentes.

- ¿Quién está ahí? - gritó Badgey, mirando hacia la puerta.

Soldier se congeló, conteniendo la respiración mientras su mente trabajaba frenéticamente para buscar una excusa. Antes de que pudiera reaccionar, sintió una mano firme sujetarlo del brazo y tirar de él hacia atrás. Era Torcher.

- Te dije que no te involucraras - susurró Torcher con un tono que mezclaba enojo y preocupación.

Sin decir más, lo llevó de vuelta al pasillo principal, alejándolo de la sala de los científicos. Cuando llegaron a un lugar más apartado, Torcher lo soltó y se giró hacia él, con los ojos brillando de frustración.

- ¿Qué estabas haciendo? - le preguntó, su voz baja pero cargada de tensión.

- Yo... solo tenía curiosidad... - respondió Soldier, sintiéndose pequeño bajo la mirada de Torcher.

- La curiosidad puede matarte, Soldier. Hay cosas que es mejor no saber.

Soldier quiso replicar, pero algo en la expresión de Torcher lo detuvo. Por primera vez, sintió un verdadero temor hacia él. No miedo a que le hiciera daño, sino a lo que pudiera estar ocultando.

Esa noche, mientras intentaba dormir, las palabras de Mr. P y Badgey resonaban en su cabeza. "Experimentos." "Resultados." ¿Qué estaba ocurriendo en ese lugar? Y, más importante aún, ¿por qué Torcher parecía tan empeñado en mantenerlo al margen?

Soldier cerró los ojos, intentando despejar su mente, pero la incertidumbre lo mantenía despierto. Aunque quería confiar en Torcher, una parte de él comenzaba a cuestionar si estaba haciendo lo correcto al ignorar las señales que le gritaban que algo estaba terriblemente mal.

( 🐶🔥)