Drabbles KakaSaku (bjo-ks)

Brócoli para cenar

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-¡Porfa!

-No.

-¡Podfa!.

-No.

-Venga mama. Por favor.

-Pod favod

-He dicho que no.

-Eres una aburrida.

-Ti. ¡Una abudida!

Sakura frunce el ceño ante dos enanos que le lanzan miradas de odio.

-Me da igual. Podéis mirarme como queráis.

-Papa nos dejaría ir.

-Ti. Papa nos dedadía id.

-Pues que mal que papa no esté –anuncia mirando por la ventana con preocupación.

-Sólo es un poco de nieve -dice el mayor, de cinco años, tirando de ella fuera de la ventana-. No le va a pasar nada. Deja de preocuparte y déjanos salir a jugar.

Sakura le mira molesta. El maldito mocoso podía leerla como un libro abierto, exactamente igual que su padre.

-Ahora mismo está cayendo muy fuerte. Dentro de un rato, cuando deje de nevar.

-¡Cuando deje de nevar la nieve desaparecerá! –gruñe el chico.

-Abudida –vuelve a gritar la niña.

-Si. Una horrible y odiosa aburrida –responde Sakura tomando en brazos a la pequeña de poco más de dos años y recargándola sobre su cadera-. Pero una aburrida que manda sobre vuestras vidas. Tenéis mil juguetes, jugad a algo dentro de casa –añade empujando la espalda del niño hacía el pasillo.

-Una aburrida que se preocupa en exceso –se le oye bromear antes siquiera de que pise el salón.

-¡Papa! –gritan los dos niños al unísono.

Sakumo corre junto a su padre y se abraza a una de sus piernas. Yumiko estira los bracitos en su dirección.

-Te esperaba ayer –le regaña acercándose para besarle la mejilla.

-El tiempo lo complicó un poco –se excusa tomándola de la cintura para pegarla a su costado libre de niños y besarla en la boca.

-No con la máscara –le regaña.

Kakashi deja escapar una risilla. Toma a Yumiko de los brazos de Sakura y la deja en el suelo, donde la niña se agarra a la pierna libre de su padre en un fuerte abrazo.

-Te hemos echado de menos –reconoce Sakura bajándole la máscara para volver a besarle.

-Ellos sobre todo –ríe Kakashi poniendo una mano en cada cabeza a sus pies-. ¿Salimos a jugar con la nieve? –pregunta divertido y consiguiendo que ambos niños abran los ojos excitados.

-¡Siiiii! / ¡Tiiiii! –gritan entusiasmados a la vez.

-Genial. Llevo media hora peleando con ellos por esto y vas tú y los animas a salir.

Kakashi se encoge de hombros sonriendo.

-Agradece a esa sonrisa tuya –dice levantando el puño.

-¿Entonces? –pregunta Sakumo mirándola con un puchero.

-Pero coged el abrigo y los guantes. Y poneros las botas de goma, y las orejeras. Y no olvidéis el gorro.

Los niños salen corriendo a su habitación mientras ella sigue gritando instrucciones.