Maratón 1/?.
Capítulo dedicado a: _Pizzaismyvalentine
Narra ________:
Me desperté gracias a un impresionante dolor de espalda, miré a mi al rededor y me pude percatar de la realidad, me había quedado dormida en la habitación de Bryan. Lo miré detenidamente, el seguía igual que ayer.
Me pregunté si Alonso y su familia habrían estado preocupados por mi, aunque no lo creo, me fregué los ojos y me estiré la silla dispuesta a levantarme e ir en busca de comida.
-Buenos días, ¿puedo ayudarla en algo?.- preguntó la anciana detrás del mostrador.
-Dos cupcakes de chocolate y un café, por favor.
Esperé unos minutos y después tome mi orden y pagué, caminé directo a los comedores y obviamente, comencé a comer. Estaba muerta de hambre; luego de unos quince minutos había terminado de comer y tomar mi café, bote el plástico a la basura y salí de la cafetería.
Mi próximo destino: El baño. Apenas entre a este me miré al espejo.
Vaya, que linda me veo.
Miento, tengo un aspecto horrible, moje mi pelo en algunos sectores y lo peine con los dedos, lave mi cara repetidas veces, tome papel higiénico y seque mi rostro.
Viéndome más ''decente''. decidí salir a darle la última vuelta a la habitación de Bryan, entre y al parecer estaba el padre de Mouque.
-Hola.- salude.
''Menos más que decidí ir al baño'' Dije a mis adentros.
-Buenos días.- sonrió.- ¿Tú eres..?
-_______ _______, la mejor amiga de Bryan.
-¡Ah!, ¡Tú eres _______! Eres tal y como Bryan te describió.
-Eh.. ¿Si..?
No sabía que responder a esto, seguramente, mi expresión en estos momentos era la de una idiota.
-Creó que deberías ir a tu casa a descansar de este ambiente, Bryan se mejorará, tenlo por hecho.
-Esta bien, avíseme si pasa cualquier cosa, por favor.
-Así será, adiós _______.- extendió su mano y la estreché.
Salí del hospital y tome un taxi, luego de unos minutos estaba al frente de la casa de Villalpando.
Pagué el taxi y me baje, claro, no sin antes agradecerle al hombre.
Toque el timbre, pero nadie abrió, iba a volver a tocarlo pero finalmente alguien abrió la puerta, Ivanna, la cual atendió con una gran sonrisa que desapareció completamente al verme.
-Hola, Ivanna.
-Hola tú.
Ignorándola, entre a la casa, toda la familia estaba sentada en el comedor y habían botanas y bebidas sobre la mesa, obviamente, no bebidas alcohólicas.
-Buenas tardes.
-¡Hola _______!.-saludaron todos al unísono.
-¿Podrías irte? Estamos en una reunión familiar.- gruñó Ivanna.
-Ivanna...-la regañó Alonso.
-No, esta bien.-negué con la cabeza y subí las escaleras.
Fui a la habitación por ropa y un par de toallas, luego camine hacía el baño, me aseguré de que no hubiera nadie para después abrir la puerta. Después de media hora salí de la bañera limpia y con la ropa sucia en la mano para dejarla en mi habitación.
No sabía que hacer, estaba tirada de espaldas en la cama, si tan solo estuvieran los chicos aquí...
Y justo ahí fue cuando se me ''prendió el foco''.. ¡Existen las llamadas!
Tome mi celular y marque el número Alfredo.
*Llamada telefónica*
-¡Hola enana!.-saludó Alfredo.
-¡Hey! ¿Cómo estás?
-Bien, cuidando al mocoso. ¿Y tú?
-¡Oye, no le digas así al bebé!.-reí.- Yo estoy bien, creó...
-¿Crees?
-Ivanna llegó hoy, y estoy segura de que todo va a empeorar.-suspiré.- No encajo con ella acá.
-¿Por qué no vas a tu casa?
-Estaba pensando en eso...Pero no quiero que Columba se resienta o algo parecido.
