44- El caos y la venganza (capitulo final de segunda temporada)

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Narra ___:

-¡...y la madre bien desgraciada que te trajo a este mundo!- finalicé, apartando la vista de la ventana y volviendo a sentarme.

-¿Esas cosas te enseña el mayordomo?-me preguntó Ian.

-Algunas te las copié a ti..-le respondí.

-No es vocabulario para una niña...-sancionó, en modo adulto. Señor Malcolm, usted fue el que insinuó que había que levantarle las faldas a los dinosaurios del parque. Sí, no olvido fácilmente.

-No soy una niña- me defendí, desplegando una amplia sonrisa- soy un dinosaurio.

El doctor caos iba a acotar, pero por primera vez decidió mantener la boca cerrada. Bueno, eso le hubiera sido útil en más de una ocasión. No hablamos más durante el resto del viaje. En menos de cuarenta y cinco minutos, estábamos de vuelta en San Diego.

-___- me dijo Malcolm, una vez bajamos del helicóptero- puedes quedarte en el departamento de Sara con Kelly o volver con John ¿Tienes dinero para un taxi?

¿Dinero para un taxi? ¿Un tiranosaurio está por desembarcar en el muelle y este hombre quiere que me tome un taxi y vaya a dormir los dulces sueños? 

-¿A dónde van ustedes?

-A detener a Ludlow.

-No pienso perderme de eso- troné los dedos, con una sonrisa maníaca de oreja a oreja. Estaba pasada de adrenalina, déjeme.

-No, no, no y no, tu vuelves con tu padre- negó el matemático- mi trabajo de mantenerte con vida durante cuarenta y ocho horas terminó.

-¿Quién mantuvo con vida a quién, doctor caos?- repliqué- además, ¿Cuál es su plan brillante? ¿Avisarles a todos que hay un lagarto enorme traído directamente de la muerte que está por desembarcar? 

-Exactamente eso.

-¿Y crees que van a creerles, o darles la razón así como así, y mandar a papi tiranosaurio devuelta a casita? Me necesitan.

-¿Para qué, exactamente?

-Porque sino no aceptan por la razón- saqué mis garras- los haremos aceptar por la fuerza.

Malcolm me miró, y volvió a Sara, que asintió. El matemático puso los ojos en blanco.

-Debo estar absolutamente loco- paró y taxi y subió a Kelly- pase lo que pase, no salgas del departamento de Sara. Volveré en un rato- la abrazó y cerró la puerta tras ella, volviendo a nosotras- vamos.

-¿A dónde?

-A buscar mi coche. El puerto está a unos minutos de aquí, pero necesitaremos ser más rápidos.

El auto de Malcolm estaba estacionado a unas cuadras. Un coche rojo, descapotable, último modelo. Lo bauticé inmediatamente como " El Caos-Móvil", y salimos rápidamente hacia el puerto.

Una vez allí, un gran tumulto de gente de traje y corbata oía al idiota con L mayúscula de Ludlow dar un discurso, echándose flores por su proyecto concluido. Me hirvió la sangre, no podía soportar ver una situación tan estúpida, tan absurda, tan... humana. Me adelanté a Malcolm y Sara y, antes de que el guardia de seguridad lograra frenarme, me escurrí hasta el tumulto y comencé a gritar.

-¡Eres un idiota! ¡Cómo se te ocurre traer a esa bestia a tierra! ¡Supongo que en tu cerebro de mosquito fosilizado tiene todo el sentido, pero que esta gente te apoye... son todos unos estúpidos! ¡Estúpidos! ¿Saben lo que pasará? ¡Los devorará a todos! ¡No saben cómo es esa cosa, no es un juguete de la cajita el mc donalds! ¡No pueden controlarlo!

Jurassic Park (dinosaurios & tú) (EN EDICIÓN)Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz