Capítulo 3

391 25 7
                                    

Ay Dios, voy a llegar tarde. Ya sabía yo que esto de dormir en el sofá y sin despertador me iba a pasar factura... En fin, como dice el refrán 'a lo hecho, pecho', ahora no puedo hacer nada. Espero por lo menos llegar antes que el profesor.

Mi primer día en este instituto y ya la estoy liando, a ver si mañana me levanto antes.

Narra Víctor

Hoy coincido en mi ida al instituto con Megan y Katy. Las dos van hablando o, más bien, discutiendo. Pero creo que en el fondo se llevan bien.

Megan: ¡Joder, qué pesada! ¡No! ¡Te digo que no ganó los nacionales de gimnasia rítmica!

Katy: Y yo te digo que sí...

No sé cómo consigue mantener la calma con esa chica. A mí, quizás, ya me habría sacado de quicio.

Al llegar, nos encontramos con Riccardo en la entrada.

Riccardo: Hola Víctor, hola chicas.

Yo: Hola Riccardo, ¿qué tal?

Las otras dos parece que ni se enteran. Han estado todo el rato debatiendo sobre lo mismo.

Megan: ¡ESA GANÓ HACE DOS AÑOS, JODER! ¡TE LO ESTOY DICIENDO YO, HOSTIAS!

Katy: Megan, querida, te digo que ganó el año pasado.

Todo el tiempo así, la una, gritando, y la otra, sin imutarse. Entramos y vamos a nuestras clases.

Narra Riccardo

Me despido de Víctor, y no de las otras porque me ignoran. Entro en mi aula.
Estoy acomodando los libros en la mesa, cuando entra una chica, a todo correr, que no había visto nunca.

Parece algo confusa, desorientada. Busca un sitio donde sentarse, y la única mesa libre, qué casualidad, es la que tengo delante de mí.

La ve, y rápidamente se instala. Tiene el pelo algo despeinado. Habrá venido corriendo desde que salió de su casa. Me hace gracia y no puedo evitar soltar una risilla.

La chica: ¿Qué pasa? ¿Qué tiene tanta gracia?

Se gira para hablarme. Su cara de preocupación hace que acabe por estallar de la risa. No sé si se ha enfadado, pero me mira como si estuviese loco.

Gabi: Riccardo, ¿pero qué haces? Va a entrar el profesor y te va a echar al pasillo.

Gabi se sienta detrás de mí. Es que en mi clase estamos todos individualmente, formando cuatro filas.

Tenía razón, así que una vez me hube calmado, le di un toquecito a la chica en la espalda para que se girase.

La chica: ¿Qué quieres ahora?

Sí, creo que se ha enfadado.

Yo: Lo siento mucho, no pretendía ofenderte, es solo que me hizo gracia tu pelo. Perdón.

¿Me habrá perdondado?

Narra "la chica"

Este chico debe de pensar que soy idiota.

Yo: ¿De verdad crees que te creo?

Me mira con cara de circunstancia. Quizás sí haya sido eso.

Yo: Bueenoo, vaalee.

Se le iluminan los ojos.

El chico: Muchas gracias, por cierto, me llamo Riccardo.

No sé, pero ya me ha caído bien.

Yo: Ah, sí, ¡jaja! Se me ha olvidado presentarme, me lla...

Entra en ese instante el profesor y todos miramos haci delante. Se sienta en su silla y cuando se da cuenta de mi presencia parece recordar el protocolo a seguir. Se levanta.

Profesor: Chicos, se me olvidaba. Hoy ha llegado la nueva alumna. Ven aquí y preséntate a tus compañeros, anda.

Me acerco hasta allí.

Yo: Hola, me llamo Natsuki Miyamoto. Encantada.

Todos se presentan. Cuando le toca a Riccardo, esboza una pequeña sonrisa recíproca.

Profesor: Bien, puedes sentarte.

Vuelvo a mi sitio y empiza a dar la clase. Cuando terminan todas, me dirijo al edificio Fútbol, tengo pensado apuntarme en él. Solo hay un problemilla, no sé por donde se va, jeje. Bah, no importa,le pregunto a este chico.

Yo: Perdona...

Chico: ¿Si?

Tiene el pelo castaño con remolinos, qué curioso. Se ríe.

Yo: Me gustaría saber por donde debo ir al edificio Fútbol.

Chico: ¡Hala! ¿Es que quieres apuntarte al club? Entonces, ven, ¡sígueme!

Vaya, como decía, qué curioso. Pero le hago caso y le sigo. Espero que me lleve a donde le he dicho, no quiero andarme con rodeos.

Sí, me encuentro delante del edificio. Bueno, pues ya solo tengo apuntarme.

Chico: Ah, por cierto, me llamo Arion Sherwind. Un placer.

Yo: Mi nombre es Natsuki. Encantada.

Entramos juntos.

Arion: ¡Hola a todos!

Todos: ¡Hola!

Arion: Entrenador, esta chica dice que se quiere unir al equipo, se llama Natsuki.

Riccardo: ¿¡Natsuki!? ¿Te vas a apuntar?

No sabía que Riccardo jugaba al fútbol. Mejor, así ya conozco a alguien..., un momento, el chico pelirrosa también está en mi clase, esto... ¡Gabi! Eso, no me salía.

Yo: Sí, como jugadora. Soy centrocampista.

El entrenador: Hola Natsuki, yo soy Mark. En primer lugar, ¿te gusta el fútbol?

¿¡Mark Evans!? ¿¡En serio!? Vale, con esto si que no contaba. La pregunta, además, me pilla desprevenida.

Yo: Eh, sí claro. ¿Por?

Mark: Bien, entonces ya estás dentro. Pero vamos a ver qué tal lo haces en el campo.

Yo: De acuerdo.

Nos vamos al campo y allí se supone que le tengo que quitar el balón a... ¿Riccardo?
Bueno, creía que era mejor, no me ha costado mucho.

Arion: ¡Enhorabuena Natsuki!

Mark: Bueno, pues listo. A partir de ahora, ya sabes, ¡a entrenar! - Y esboza una risa que no había visto en otra persona.

Al volver a casa descubro que vivo cerca de Fermina y de Xemara, por lo que vamos juntas un buen trecho del camino.

Terminado. Todo lo que tenía que hacer al llegar a esta ciudad, listo.

______________________________________

¡Hola a toda la gente que lee mi historia!

¿Cómo me está quedando? ¿Os gusta?

Gracias por leer y por votar, y agradecería mucho que comentaseis, tanto cosas buenas como críticas, a ver si puedo hacer de ésta mi mejor obra de Wattpad ;)

Repito, ¡muchas gracias a todos/as!
:D

Amor de amores (?)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora