Amor de amores (?)

Capítulo 57

Narra Riccardo

Estoy en casa de Natsuki. Sé que es allanamiento de morada puro y duro, incluso me he colado por la ventana. Pero me he cuidado de que no me haya visto ningún vecino, si no, podría acarrearme algún que otro problema.

Por otro lado, venir aquí en momentos de crisis o de dificultad emocional me ayuda a aclarar mis ideas, a apaciguar el mar revuelto que se agita con fuerza en mi mente.

Sí, es así. Esta casa guarda la esencia de Natsuki. No importa lo que esos seres nos hayan dicho, lo que aseguran que es Natsuki. He llegado a la conclusión de que no me importa si es un error, un fantasma, una piedra, un dinosaurio o un caracol, porque creo que el lazo que nos une, aparte de ser de un rojo vivo refulgente, es irrompible. Sí, así es. Creo que ha sido el destino.

Je, je... Qué melancólico... El destino... Si es que a veces creo que soy un romántico... Pero es así, estoy seguro que de haber nacido en otra época y bajo otras circunstancias, nos habríamos conocido de un modo u otro. Es un lazo atemporal, no importan el tiempo o el espacio. Por eso sé que nunca podré dejar de quererla, y es también por eso que voy a jugar pasado mañana con todo lo que tengo.

Miro el reloj que cuelga de la pared. Las tres de la madrugada. Será mejor que vuelva a casa. El sueño será el pegamento que consolide mis sentimientos, y la cama, la forma de aplicarlo.

Narra Víctor

Me duele tanto no poder jugar en el partido. Sobre los hombros de Arion, Riccardo y los demás recae una carga bien pesada, y los míos podría compartir y, entonces, aligerarla un poco. Pero no, estas lesiones o, mejor dicho, estas agresiones me han dejado como un juguete de tela roto, con el relleno saliéndosele sin control por los cortes.

Es un momento decisivo, y yo aquí, solo pudiendo animarlos.

Ah... En fin... Qué hará Megan en estos momentos... Dormir, seguramente, pero a saber...

Narra Megan

La puta cama hoy está más puto dura que nunca. Joder, no importa cuántas vueltas dé buscando el lado frío, parece que me estou asando en el mismo Infierno. Por parecer, ¡hasta parece que el propio Diablo ha venido a quemarme viva, coño!

¡AAAAAAAH! Y hay algo peor, algo jodidísimamente peor. LOS PUTOS MOSQUITOS DE LOS COJONES.

¡Odio el verano por los putos mosquitos, hostias! ¡Siempre igual! ¡No importa si colocas en la ventana mosquiteras, si esparces repelente por el aire, si usas la pulsera con el líquido ese repelente, si enchufas el matamosquitos...! ¡TODO DA IGUAL!

¡YO LO HE DICHO SIEMPRE! ¡REVENTARÁ EL MUNDO AL FINAL DE LOS TIEMPOS Y LOS PUTOS MOSQUITOS SEGUIRÁN AHÍ PINTANDO EL COÑO DE LA MONA!

¡DIOOOOOOOOS!

Doy con fuerza un puñetazo contra la pared en lo que me pareció la sombra de uno de los insectos del demonio, pero resultó no serlo.

De repente, el portazo que da mi madre al entrar y encender la luz me pone de pie del susto en el medio de la habitación de un salto.

Mamá: ¡Pero tú qué te crees que haces a estas horas de la noche pegando semejantes golpes a la pared! ¡Ya me tienes cansada, toda la noche igual! ¡Pasa a dormir de una vez y que sea la última que te escucho hoy! ¡¿Me oyes?!

Cierra la puerta y se va. Joder...

Parece que haya espantado hasta a los mosquitos, que ya no se escuchan zumbar.

Katy... Hm... Seguro que está etrenando. Conociéndola...

Natsuki, juro por Dios que te vamos a rescatar. Esos bocazas se van a tragar sus palabras. No descansaré hasta que no les salgan mis goles por el culo, fíjate bien.

Bueno, en fin. Creo que va siendo hora de dormir.

A ver si hoy no ronco mucho...

Narra Skie

Ah... Me encanta darme un baño relajante por la noche...

Mañana tengo que preparar todo para el partido de pasado. Qué nervios... Pero sé que los chicos lo harán bien, no lo pongo en duda.

Juego con las olitas que provocan mis pies al asomar los dedos por fuera del agua. La espuma que cubría todo al principio, poco a poco se va dilyendo...

Desde la ventana bajo la que se encuentra la bañera se puede ver la luna. Hoy brilla como pocas veces lo hace. Qué bonita.

No puedo evitar pensar en Arion cuando observo la luna. Desconozco la razón, pero es así.

Hemos pasado por tantas cosas... Creo que esto que nos está sucediendo acabará bien, como siempre, a pesar de todo, porque el Raimon es así. Siempre logra lo que se propone. Y aunque esta nos parezca la más peligrosa hazaña que realizamos y de la que somos partícipes en mucho tiempo, puedo asegurar que no será la última.

El Raimon siempre ha sido as: imán para odiseas, pero héroe que las supera.

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Narra el narrador

Ámbar: Está bien. Vosotros seréis los 11 seleccionados, contándome a mí, que se encargarán de jugar el partido contra los niños humanos en lo que les es mañana. Ya os he propircionado información detallada sobre el fútbol, así que espero que juguéis en serio, pues, aunque parezcan inofensivos, juegan como leones.

Iolita: Ámbar... Hay algo, sin embargo, que todavía no nos has dicho...

Citrino: Cierto, tío. ¿Por qué jugamos esto? ¿Son órdenes de arriba?

Ágata: Vamos, Ámbar, contéstales.

Ámbar: Creo que se trata de un asunto personal.

Citrino: ¿Crees?

Ámbar: Bueno, no puedo asegurarlo, pero sospecho que se trata de eso. No es nada en lo que involucraros suponga algún tipo de infracción. Estad tranquilos, si eso es lo que os preocupa.

Iolita: Pues sí, efectivamente.

Ámbar: Tan solo os pido vuestra colaboración porque necesito un equipo de once jugadores para este partido.

Ónix: Pero..., Ámbar, aun así..., no te garantizamos... Al menos yo... Un juego..., perdón, un nivel... Elevado..., esto es..., de élite, digo...

Ámbar: Eso no tiene importancia. Viestro cometido es seguir las reglas al pie de la letra. No pretendo regalarles la victoria, después de todo. Algo tendremos que luchar. Por lo tanto, si véis desviaciones que, dentro de lo permitido, os parezcan eficaces en el rival, os concedo el permiso para copiársela. Como ya he dicho, no os preocupéis por posibles futuras amonestaciones, toda la responsabilidad en caso de fracaso o negligencia recaerá sobre mí.

Emeralda: Pues na', vamo' al lío.