Hospital «Shawn Mendes»

Capítulo 13

Shawn.

Caminé desapercibido hasta la sección de operaciones que tenía el hospital y entré por unas grandes puertas de cristales, no había casi nadie por aquí, ya que el área está restringida solo para personal de hospital, por lo que camino mirando hacia todos lados sin que pueda ser descubierto. 

Unos doctores vienen conversando en mi dirección y me entra el pánico. Me escondo detrás de una pared oscura y mantengo la respiración.

—Necesito ir a ver a la paciente en la habitación trece, pero primero necesito que vayas a donde Karen para que me mande la ficha médica de la chica— habló uno y paré la oreja.

—¿Y ella dónde está?— preguntó el otro.

—Acompáñame— dijo la voz del que dio la orden con algo de fastidio y salieron de la sección. Miré nuevamente por el extenso pasillo y me fui dando cuenta de los números de las habitaciones hasta dar con la número trece. Con el pecho a mil, tomé el pomo de la puerta y la giré, haciendo que esta se abriera. Verifiqué que la sala estuviera despejada y entré. No había absolutamente nadie, solo muebles y un bolso de ropa. Bufé y me di media vuelta para salir, pero la puerta se abre por si sola encontrándome cara a cara con la expresión de confusión de una enfermera. Detrás de ella, traía una camilla con Marie recostada en ella, me acerqué hasta la chica y le acaricié la mejilla, tenía varios moretones.

—¿Qué estás haciendo aquí? ¡Seguridad!— gritó la enfermera y de inmediato dos hombres guardias entraron a la habitación y ambos me tomaron de los brazos.

—¿Qué? ¡No, suéltenme! ¡Marie!— grité mientras pataleaba.

—¡Cállate, no la puedes despertar!— me retó la señora mientras acariciaba la mejilla de Marie y llevaba su camilla hasta adentro de la habitación para luego cerrar la puerta.

—¿Qué está pasando aquí? —sentí una voz a mis espaldas y los dos guardias me giraron. Clarisse me miraba impresionada, pero luego sus ojos reflejaron decepción y agaché la cabeza. —Suéltenlo, yo me encargo de él— demandó y los dos hombres se miraron y luego me soltaron. Clarisse me tomó del brazo con delicadeza y caminamos fuera de la sección de operaciones. 

Caminamos en silencio hasta mi habitación y al entrar, Theo y sus familiares estaban jugando video  juegos, mi amigo me sonrió, pero luego cambió su expresión al ver que Clarisse venía con una seria, y eso es raro ya que Clarisse es la enfermera más simpática y alegre de por aquí.

Hizo que me recostara en mi camilla y luego me puso una revista de comic en las piernas.

—¿No me vas a decir nada?— pregunté con cierta timidez, su silencio me estaba matando. 

—Shawn, ya sabes lo que siempre te he dicho. Y tú nunca me haces caso.

—Lo sé, y lo siento, pero mis impulsos me llevan a hacer cosas que no debería— balbuceo con cierta vergüenza.

—Marie tuvo un accidente ayer por la noche, unos guardias de turno la encontraron en la escalera tirada gritando, al parecer se había caído, no fue nada grave, solo que se rompió un poco la cadera, no podrá forzarla por otra semana— me explicó mientras yo escuchaba con suma atención. ¿Que habrá estado haciendo en la escalera a esa hora? Por lo que sé, no quedamos en juntarnos.

—Pero, ¿estará consciente para hoy en la noche?— preguntó Theo desde la otra camilla. Clarisse negó con la cabeza.

—Marie tendrá que quedarse en la habitación de la sección de operaciones por dos noches. Tienen que hacerle algunas preguntas que como fue que se cayó y qué estaba haciendo a esa hora fuera de su habitación— nos explicó y luego me miró a mi. —¿Tú no tienes nada que ver con esto, o sí?