Maldita suerte.

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Maldita suerte.

Estába como una estúpida golpeando la mesa con la punta del lápiz viendo él reloj mientras de fondo escuchaba la voz de los alumnos y él profesor frente a nosotros.
Hoy por fin es jueves, hoy iré con Santiago a la tutoría.

Me es imposible no pensar y reprimirme, yo no debí haber accedido a esa propuesta,Sin embargó no puedo engañarme se que muy en el fondo acepte por que mí lado masoquista buscar estar cerca de él.

Llegué a la conclusión de que Él destino me odia.
Me sentía la persona más masoquista que había en él mundo.
No me puedo creer que apesar de todo quiera estar cerca de Santiago.
Tantas ideas cruzaban mi cabeza que no me dejaba de doler.

—¿Nathy estás bien?.—Corny me miro preucupada mientas fruncia él ceño.

—Si claro que estoy bien.—En verdad quería contarle a esta chica todo lo que me pasaba, Quería decirle que mi vida parecía programa de televisión, me transmitía confianza pero ¿Acaso le diría ''me enamore de mi profesor de calculo en mí antigua escuela"?
Eso no suena bien.

— No te creo, se que ocultas algo, creo que no sabes guardar y esconder las cosas.

—¿Cómo lo sabes?— una sonrisa apareció en su rostro.

— Sólo lo se, y ya.

La contemple unos segundos,No parecía ser una persona mentirosa y algo me transmitía confianza en ella.
Intente convencerme de que no todas las personas eran iguales,No todas te traicionarian.

**

Solté un suspiro  cuando le termine de contar toda la historia entre Santiago y yo, le hable de Ashley ,de Dan mi mejor amigo, y de Aria mi mejor amiga.

— En verdad te gusta ese profesor,quizá por eso te mira tanto en la clase.—Dijo pensándolo unos segundos.

—¿Enserio?¿Cómo me mira?.—Solte con una voz ansiosa, más de lo que hubiese admitido.

—Pues nolose sólo te mira. — De pronto se quedo callada y miro a través de mi hombro.
Me gire y vi que había un chico.

—¿Es tu novio?.— Pregunté alzando la cejas repetidamente.

—No.—dijo cortante bajando la mirada.

—¿Te gusta?

—Estoy enamorada de él.Su nombre es Jorsh, parece que no lo nota, incluso siento que me utilizá .

—No parece ser ese tipo de chico.—Hize un mueca. —Nolose, no es el prototipo.

— Nathalia ¿no lo entiendes?—dijo triste.— Él es una persona maravillosa sólo que aveces es muy tonto,no se da cuenta de cuanto lo quiero.No importa si es guapo,o feo, o si es un cierto prototipo, lo que sea, él chico que sea él , así lo quiero.

Y en ese momento me dí cuenta de algo,Corny era más allá de esa chica fuerte que mostraba, que no sólo yo tenía ese tipo de problemas,quería ayudarla, quería decirle a  Josh que no se merecia,lastimar a alguien como Corny. Pero me dí cuenta también, que no podía juzgar a aquél chico, por que no lo conocía.
Estába segura que ella era una exelente persona y que podía tener alguien mejor a su lado,él problema era que, ni yo ni nadíe,sólo ella podía decir quién era ese alguien bueno.

**

Ya era la hora, me dirigí a la biblioteca con él corazón en la garganta, me sentía nerviosa y preucupada,no sabía exactamente como afrontar las cosas,Mire por la pequeña ventana de la biblioteca y me sentí aliviada por que él aun no llegaba.

Deje mi mochila en una mesa y me dispuse a tomar un libro de los que había en él estante de enfrente, caminé y estire mi brazo para,alcanzarlo pero estaba muy alto,y mi estatura no ayudaba.

—¡Mierda!— grite de dolor cuando resbale del estante llevandome un fuerte golpe en mi pierna y trasero.

Me levante como pude con él dolor expandiendose en toda mí pierna me subí la falda para revisar él golpe.

Estaba rojo y valla que ardia, la falda no ayudo mucho,me volvi a levantar la falda un poco para sobar la parte que me dolia.

— Nathalia—Me gire rápidamente al escuchar su voz,
Santiago me miraba la falda mientras mi cara se ponia de mil colores.
Al notar que lo miraba apartó sus ojos rápidamente, sabía que había visto como me subía la falda.Me senti tan estupida y la vergüenza hacía que mi estómago se revolviera.Maldije por lo bajo.

— Me golpée en él estante.—Explique rápidamente

—Sientate. —Me ordeno evadiendo mi comentario, ahora más que nunca me sentía completamente tonta.
¿Acaso no pudo preguntar si estába bien?
Maldita mi suerte.

No cruzes mi límite ©Where stories live. Discover now