No cruzes mi límite ©

Huyendo del pasado.

Huyendo del pasado.

Nathalia.

Entre a mi casa y de inmediato me maldije a mi misma por verme tan patética ante mis padres,Ya imaginaba mi aspecto.
Ojos hinchados y las rodillas sucias. Un recordatorio de todo lo mierda que me sentía.
No había otra palabra.
Me sentía mierda.

—¿Que paso por que...

—Nada mamá,Quiero estar sola.—Me encamine a mi habitación , cuando estaba apunto de encerrarme mi padre apareció al filo de la puerta.

—Esto ya es el colmo,Faltas a clases,Llegas tarde, Estás cambiando Nathalia. No vas a hacer lo que quieras, no tienes mayoría de edad y vas a seguir nuestras órdenes y punto,  ahora vas a bajar y comer.—Hablo mi padre bastante calmado para lo que me estaba diciendo.

Tenía razón  había mentido a todos, A mis amigos, a mi familia y sobre todo a mi misma.
¿Que se supone que debía hacer?
Comenze a sentirme al borde de las lágrimas hasta que volvió a retumbar la voz de mi padre.

—Estamos preucupados...cremos que es mejor que tomes una terapia.

—¡¿Es que acaso no pueden dejarme sola!?.—Estalle gritando con una ira que hacía que me temblaran las cienes.—¡Quiero estar sola! ¡Vete de mi cuarto!

Mi padre salió azotando la puerta y de inmediato puse el pistillo para asegur la puerta, estaba arta de todos.
Quería desaparecer.
Prendí la pequeña radio y le subi todo el volumen, me heche a la cama intentando que la música me destruyera los  pensamientos,Que borraran la voz de Santiago diciéndome que no quería estar conmigo.

La imagen se reproducía una y otra vez, Haciendome soltar sollozos incontrolables.

—¡Deja de llorar maldita sea!—Me grite a mi misma frustada.El sentimiento que estaba en mí ahora mismo era más que un dolor.
Sentía un vacío inmenso en el pecho,Quería gritar,arrancarme la cabeza.
Dejar de llorar,dejar de ser tan patética.
Comenze a quitarme la ropa, a cada prenda que soltaba un recuerdo llegaba como flashes.
No podia dejar de llorar, sabía que era coraje hacia mi misma.

¿Cuánto tiempo me habrá visto la cara?
¿Por qué me había hecho esto a mí ?
Las preguntas no dejaban de rondar mi cabeza,Necesitaba explicaciones.
Sin embargo solo había una.
No me quería,todo este tiempo solo me había usado,burlado de mí.

**

—Nathalia...

Me removi incomoda, abrí los ojos y vi a mi madre, salte de la cama corriendo al espejo con una sonrrisa.

—No...

—Nathalia debes de comer algo, Tu padre no está enojado, baja.

Ignore las palabras de mi madre.
No había sido una pesadilla,Mis ojos tenían ojeras y se veían rojos,estaba en ropa interior y el vacío se instaló en mi pecho.

—Voy enseguida.—Dije,sentí mi voz muy lejana como si no fuera mía mi madre salió del cuarto y me quede sentada al borde de la cama unos minutos intentando creer que todo era un sueño,que seguro despertaria en cualquier momento, sudando frio y apunto de llorar pero que no sería cierto,que tendría mensajes de Santiago en mi celular.

Me puse la pijama,me había quedado más de tres horas dormida en ropa interior, tenia las mejillas sonrrosadas por el constante tallo que le di.
Mire el reloj en mi habitación y vi que eran las nueve de la noche,No quería comer,no quería que nadie me viera así.
Mañana no quería ver a Santiago y quería arrancarme este maldito dolor del alma.