No cruzes mi límite ©

Perdiendolo todo.

Perdiendolo todo.

Santiago

Salgo del Instituto con la intención de ir a casa de Nathalia,me dirijo al estacionamiento pensando como puedo solucionar esto.
Quizá renunciar al instituto aunque sería muy obvio en este momento.

Cuando estoy apunto de llegar a mi carro veo que alguien está sentada sobre el cofre.      
La gran cabellera obscura me dice quien es,bufo molesto.
Lo que me faltaba.

—¿Qué quieres?.—Digo abriendo la puerta con desinterés,la sonrisa de Ashley se amplía.

—Antes eras cortés,¿Haces eso siempre? Te acuestas con mujeres y luego ¿Te comportas cómo un imbecil?.—Dice acomodándose en el cofre.

—Punto número uno.Tu no eres una mujer, eres una niña,Punto dos. Quitate de mí carro, ¿Qué quieres y a qué veniste?.—Le especte con voz gélida.

Ella se aparta con enojo del carro y me mira con ojos fulminantes.

—Mira Niña no estoy de humor para lidiar contigo así que mejor largate.—Dije con voz que sólo suelo usar con hombres,Jamás le había hablado así a una mujer pero el hecho de ver a Ashley aquí, hacía que me dolieran las cienes.

—¿Has tenido problemas?.—Dijo con sorna, de inmediato entendí a lo que se refería y entendí el porque estaba aquí . Como acto de impulso la tome fuertemente de las muñecas.

—Tu fuiste...— Sentí que hechaba fuego por los ojos y ella hizo una mueca de dolor, la solté y ella sonrió.

—No se de que hablas.—Hablo con fingida inocencia que me causó repulsión.

—¡Habla maldita sea! ¿Qué quieres? ¿Dinero?.—Grite  exasperado cuando note que no borraba la estupida sonrrisa de su cara.Tenía ganas de golpearla, tenía tanta rabia,Era claro ella era la única que quería joderme la vida a Nathalia y a mí .

—No, no quiero tu dinero.—Dijo hechandose el pelo hacia atrás. —Pero el silencio tiene un precio Thiago.—Dijo sonriendo.

—No me vas a chantajear.—Le advertí apretando los puños.

—No lo veas así—Dijo con una fingida voz de culpa.—Tu dejas a Nathalia y fin del asunto,te estoy quitando un peso de encima.

La mire sorprendido por su Descaro,no podia creer el cinismo que tenía.

—¿Eres tonta acaso?,No pienso dejar a Nathalia y mucho menos volver a mirarte, si es lo que pretendes con todo este numerito que acabas de montar...— Musite con desprecio.

—Ya te lo dije es una ayuda,Se que realmente no quieres estarde novio,Te conozco y puedo jurar que sólo quieres acostarte con     ella,pero podemos pasarla mejor,Estoy dispuesta a olvidar todo y hacer como que nada ocurrió.—Hablo como si yo  le estuviera pidiendo perdón,sentía que estaba llegando a mi limité,quería cerrarle la boca de una jodida vez.

—Callate.—la corte cuando no terminaba su parloteo.—No soy ningún mocoso,como los que tratas a diario, no me intimidas.   Así que más te vale que te alejes de mi y de Nathalia de una vez por todas, no pienso regresar nunca contigo,Simplemente no te quiero y espero que eso te quede en la cabeza.—Dije haciendo un ademán con el dedo golpeando mi frente.

Me sentía fuera de sí,nunca antes me habría comportado como un patán, Pero me era inevitable, por culpa de ella estaban a punto de descrubirnos.

Si perdia a Nathalia, lo perdía todo.

— Más bien tu no intentes amenazarme,¡Vas a hacer lo que te estoy diciendo si no quieres que en este mismo instante me meta a esta jodida escuelita de mierda y les diga a todos que te estas  follando a una de tus alumnas! —Dijo mirandome con una sonrrisa maquivelica,una asquerosa sonrisa que hizo que mis músculos se tensaran,Sentía que estaba apretando tanto los dientes que la mandíbula se me rompería.