Capítulo 21

47K 2.8K 434
                                    

-No. Le diré a Zayn que me lleve. Gracias.

Él hizo un gesto muy raro con las cejas que no supe muy bien cómo interpretar. No sabía cómo despedirme, así que, simplemente me fui.

Al salir de aquella zona del bar fui en busca de Zayn. Le localicé junto al grupo de jovenes, bebiendo una cerveza.

-Zayn- toqué su hombro para llamar su atención-, llévame a casa, por favor- al girarse pude ver que tenía los ojos ligeramente irritados, por culpa del alcohol y del humo que había por allí... Si es que no había otros motivos.

-Claro... déjame que avise a Niall. Nos tiene que llevar él.

Asentí y los dos nos pusimos a buscarle. Lo encontramos de pie, apoyado en otro chico.

-Niall, tienes que llevarnos- le comunicó Zayn. El rubio levantó la mirada y casi me dio pena verle en tal estado. Tenía los ojos totalmente rojos e hinchados, ambas pupilas dilatas y apestaba a alcohol.

-Tío- el chico en el que Niall estaba apoyado se dirigió a Zayn-, no creo que esté en condiciones de coger el coche- mierda.

-¡Que no Zayn! No te preocupes. Yo os llevo. ¡No le hagáis caso!- si no entendía el acento de Niall de por sí, Niall borracho era como tratar de entender a un ruso hablando chino.

-Lo siento, Trish, pero vamos a tener que esperar porque Niall es mi único medio de transporte- se disculpó.

-Zayn, no puedo esperar a que Niall esté sobrio, no sé si lo entiendes. Me tengo que ir ahora- hice énfasis en la última palabra. Él se encogió de hombros.

-No puedo hacer nada.

Ashley se iba a mosquear. Sabía cuánto se enfada si no era puntual en llegar a casa. Zayn estaba hablando y riéndose con un chico de rastas, muy despreocupado.

-¡Zayn! ¿No me escuchas o qué? ¡Ashley me mata!

-Dame el móvil.

Extendió la mano esperando el pequeño aparato. No entendía para qué pero se lo di. Escribió algo y después me lo dio otra vez. Le había mandado un mensaje a Ashley.

"Voy a llegar tarde. No me esperes despierta"

El móvil vibró y entró un mensaje de Ashley.

"OK"

Miré de vuelta a Zayn.

-No puedo hacer más- me miró un poco apenado-. Vamos, relájate un rato y tómate algo. Me ofreció un vaso con algo transparente. Pensando que era agua, como el vaso de Louis, me lo bebí de un trago. Qué ingenua era. No era agua, era vodka.

El alcohol quemó todo a su paso por mi garganta. Sacudí la cabeza de lo fuerte que estaba. Niall me aplaudió. No supe por qué si lo único que quería hacer era salir de allí, pero después de ese vaso vinieron más.

Unas cuantas horas después no sabía ya lo que hacía. Me encontré hablando con dos chicos, que no conocía de nada, pero me estaba partiendo de risa con las historias que contaban. Miré el reloj. Las tres y media. Mierda. Me levanté, dejando a los chicos hablando entre sí. Vi a una chica con la que había estado hablando antes y me acerqué a ella.

-¿Sabes dónde está Zayn?- me daba vergüenza hablar. Era capaz de hablar sin arrastrar mucho las palabras pero se notaba a la legua que estaba borracha.

-Se desmayó y se lo han llevado hace un rato a casa- me contó despreocupada.

¿Qué? No podía ser.

-¿Y Niall?

-Se lo llevaron con él. También estaba fatal- me aclaró y se marchó.

Ah, vale... ¿Y yo ahora qué hacía? Ebria y perdida. De repente noté como el aura de la sala cambió. Me sentía sola y desprotegida pero pronto entendí el por qué de ese cambio. Los ojos azules de Louis entraron en mi campo de visión. Frunció el ceño al verme.

FastDonde viven las historias. Descúbrelo ahora