devuelta en yomo

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Kiritho/akura narra.
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Ya estaba mas saludable, después de tomar la energía de la diosa, ya me sentía con mas vida, ya era hora de subir la montaña de fuego.

Yatori había llegado a mi cuarto muy contento, llevaba en sus manos un espejo, ¿por que llevaba un espejo?, resulta que el travieso de yatori estuvo en el templo de izumo y rapto al dios ookuninushi, por que con el poder de ese dios podríamos sacar mi cuerpo de ese lugar, pero se que yatori me esta ocultando algo mas, algo que no me quiere decir, ¿que estará tramando?.

- bien amo kiritho, ¿cual es el plan?. Me pregunto yatori.

- iremos a izumo, entraremos a yomo y subiremos la montaña, luego de subir la montaña, tu yatori, usaras a ookuninushi que esta en el espejo para que libere mi cuerpo, entendido?. Explique el plan imaginando que al final todo saldrá bien.

- ¡si kiritho-dono!. Dijeron kikuichi  y yatori al tiempo.

Llegamos a izumo a los pocos minutos, kikuichi me cargo antes de saltar por el portal, como siempre estuve inconsciente por unos minutos y luego me levante del suelo con el autoestima arriba, solo pensando que pronto cumpliré mi meta.

Comenzamos a caminar, en dirección hacia la montaña, ya sabiendo donde quedaba solo era llegar hasta allá, kikuichi comenzo a sentirse mal, el ambiente toxico le estaba haciendo daño, yo le había dado parte del cabello de la diosa para que pudiera resistir el yomo, yo lo iba a dejar en izumo, pero el se negó y quiso venir con migo.

- no kiritho-dono, yo iré con usted, estaré a su lado cuando cumpla su meta. Fue lo que me dijo kikuichi antes de entrar a yomi.

Kikuichi comenzó a ponerse peor, termino tirado en el suelo estaba apunto de desmayarse, así que paramos para que kikuichi descansara.

- amo kiritho, así nos tomara una eternidad llegar a la montaña, mejor dejemos a este simple espíritu aquí y sigamos nosotros. Me dijo yatori sin importarle la salud de mi mas fiel shikigami.

- no yatori, no dejaremos a kikuichi atrás, todos llegaremos a la montaña el momento que sea. Le dije mientras lo regañaba por las tonterías que acababa de decir. 

- kiritho-dono, lamento ser un obstáculo para usted. Me dijo kikuichi con la respiración agitada.

No podía dejar a kikuichi atrás, así que le pedí a yatori que lo llevara en su espalda para no retrasar nos, se le notaba en la cara que no le gusto que le ordenara hacer eso, pero aun así lo hizo. Caminamos por otro rato, yo ya estaba exhausto, así que me senté en una roca para descansar, de repente comencé a sentir como si alguien me estuviera viendo, tal vez era mi imaginación, pero luego alce mi mirada hacia lo alto de un risco y allí había un zorro blanco, era extraño ¿por que habría un zorro en un lugar como este?.

- que sorpresa, un zorro, ¿que hace un animalito hací por estos lados?. Dijo kikuichi mientras alzaba al zorro en sus brazos.

- kikuichi, baja a ese zorro. Le dije.

De pronto vi que el zorro me estaba viendo fijamente, yo quise atraerlo para que viniera hacia mi, se fue acercando lentamente y salto sobre mi, yo lo tome entre mis brazos y lo abrace, al parecer me quería atacar.

- yo... Yo no odio a los zorros, solamente yo, me siento mal desde que Tomoe me dejo, estuve solo por mucho tiempo y cuando conocí a mi hermano, creo que fue lo mejor que me paso en la vida. Dije mientras sostenía al animal en mis brazos, fue lo mas sincero que he dicho en mi vida, pero era verdad, yo no odiaba a ese zorro demonio.

Demonio SangrientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora