el alma de akura

171 17 0
                                    

Baje la mirada a donde estaba mi madre, ella aun seguía en el suelo, sosteniendo mi cuerpo humano ya muerto, aun se veía triste, en sus ojos solo se veían lágrimas, y eso me ponía mas triste a mi. Tomoe y la diosa nanami bajaron de la montaña y se dirigieron a donde estaba mi madre y el dios mikage.

- mejor llevemos este cuerpo al castillo de izanami, o aquí se quemara. Dijo Tomoe mientras cargaba mi cuerpo en sus brazos y lo miraba con tristeza, ¿que estará pensando?.

Segui a todos hasta el castillo de la diosa izanami, mi madre estaba triste y el dios mikage la miraba con lastima, de repente note que mikage lanzo una mirada hacia mi, y no hablo de mi cuerpo, hablo de mi alma, al parecer se dio cuenta que yo siempre estuve viendo lo que hacían, mikage hizo un gesto hacia mi diciéndome que me acercara a el, y eso hice flote hacia sus brazos e hizo que se notara mi presencia.

- mikage, ¿que tienes hay?. Pregunto Tomoe.

- este, es el alma del rey akura, es lo que queda de el.

- ¡¿que?!, y ahora que haremos, este cuerpo humano ya es inservible para el, y no podemos sacar su cuerpo inmortal de la montaña. Exclamo tomoe preocupado por lo que podria ser de mi.

- no tenemos opción, pienso que deberíamos dejar libre esta alma demoniaca y que parta permanentemente al inframundo. Opino la diosa izanami.

- ¡¿crees que voy a dejar que el alma de akura este bagando sin cuerpo toda la eternidad!?, eso no lo permitiré. Exclamo Tomoe regañando la opinión de la diosa izanami.

Era increíble como la mayoría pensaba en mi, en como seria mi vida ahora, y yo solo me preguntaba ¿que paso con migo?, en ese momento mi madre se levanto del suelo secándose las lágrimas, se acercó a mikage muy entusiasmada.

- esperen, yo tengo la solución, dejen que esta alma viva en mi, creando a un nuevo niño, así le darán otra vida a este demonio y me permitirán ser mamá de nuevo. Dijo mi madre abriendo ampliamente sus manos y acogiendo en ellos esta pobre alma que estaba sorprendida de la respuesta de mi madre, en verdad ella me amaba.

Era muy extraño pensar en esas cosas, pensar que ahora tendría una nueva vida, pensar que viviría como un humano con alma demoniaca, pensar que mi vida cambio con el transcurso del tiempo.

La verdad no podía creer que pase de ser un demonio asesino, que mataba y destruía por diversión, a un mortal, con una vida de un humano, me comenzaron a llegar imágenes a la mente, imágenes de ese demonio inmortal de apariencia aterradora que amaba ver la sangre derramada de sus oponentes en el suelo, pero ahora iba a cambiar todo eso, me volví una persona casi amable, menos violenta y mas cariñosa con los humanos que antes aborrecía, y todo esto fue gracias a la diosa humana, y al chico kiritho, que me entrego su cuerpo para liberarme de la oscuridad.

Demonio SangrientoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora