Daughter Of The War. [Steve Rogers]

26. Siempre era Steve.

En Central Park, Nueva York, la gente paseaba entre el pasto de un verde claro, entre árboles y pequeños lagos.

En el pasto un grupo de amigos reían y hacían bromas entre ellos. Uno de ellos se encontraba con su celular, sacando fotos, y enviando mensajes de a ratos.

Entró a una de sus redes sociales con una sonrisa en su boca, pero se sorprendió de las primeras imágenes que aparecían, y rápidamente cambió su expresión a una de confusión.

Se hablaba de supuestos mensajes que habían estado apareciendo alrededor del mundo, como algún presagio de lo que iba a ocurrir.

Pasó algunas fotos, viendo un par de todo lo que ocurría y apagó el celular alarmado.

Al instante de dejarlo sobre el suelo, una de sus amigas gritó, levantándose del pasto con rapidez, observando con terror el pequeño lago delante de ellos, del cual, todos comenzaban a correr desesperadamente.

Se estaba volviendo rojo con lentitud, dejando en el aire un aroma extrañamente metálico, todos sabían que era sangre.

Su respiración se agitó sin darse cuenta y se levantó junto a los demás mientras los guardias de seguridad empezaban a evacuar la zona.

Comenzó a correr con los demás detrás, no sabía que más debía hacer, parecía que después de todo, el presagio era correcto.

Ya lejos del lugar, se despidió de sus amigos lo más rápido que pudo y corrió a su hogar.

Cerró la puerta de su departamento y encendió la televisión, pero nadie pasaba absolutamente nada de lo que estaba ocurriendo.

El mundo estaba cambiando, pero era el mismo mundo quien quería ocultarlo.

———————————

Al instante que sus pies sintieron el suelo bajo las suelas de sus zapatos, todo se aclaró y acomodó ante sus ojos. Y la pelea empezó.

Steve saltó sobre el primero hombre que vio y lo golpeó con fuerza en el rostro, T'Challa atacaba con sus garras a otros dos soldados.

Uno se acercaba a Lea, pero ella se transportó detrás de él, logrando darle una patada sobre la espalda provocando que cayera.

Rápidamente continuó hasta golpear con su puño contra la mandíbula de otro, y luego Steve se encargó de dejarlo inconsciente.

Los soldados que cuidaban a sus amigos habían terminado todos en el suelo y Lea sonrió levemente.

Steve caminó a través de las compuertas, y Lea lo siguió de cerca mientras T'Challa intentaba abrir las celdas a través de las computadoras.

El lugar permanecía a oscuras a excepción de una luz anaranjada que se encendía cada varios segundos dejando ver pequeñas siluetas en el lugar.

Steve caminó directo a una de las celdas, como si supiera quien estaba ahí, pero en cambio, Lea caminó con torpeza hasta la primera celda.

Distinguió la figura de Pietro, con enormes cadenas alrededor de su cuerpo, evitando que pudiera salir corriendo.

—¿Lea?— preguntó emocionado. Se escuchó las cadenas resonar entre ellas.

—vamos a sacarlos de acá.— comentó.

—Wanda— su voz se cortó y tosió un poco —¿cómo está ella?— movió la cabeza hacia la izquierda, haciéndole saber que su hermana estaba al lado.

Lea caminó un par de pasos para ver el rostro pálido de Wanda con lagrimas secas sobre sus mejillas. Sus ojos brillaron entre la oscuridad y sonrió.