Catch me, I'm falling » KaiSoo

Febrero 7 - Día 22

  Estoy fuera de la realidad, sin amor
te recogeré cuando te estés cayendo
y sin todas estas cosas que he hecho,
creo que ahora te querré mejor.

Estoy escondido, estoy fuera de mí,
lo haré todo por ti cuando llegue el momento,
y sin todas estas cosas que he hecho,
creo que ahora te querré mejor.

(Ed Sheeran - Lego House)

***

La silla de tela dura con un parche de cinta en su parte superior había comenzado a sentirse familiar. Lentamente, dejó de ser la silla que estaba al lado de la cama de Kyungsoo para convertirse en mi silla. Kyungsoo estaba sentado con su laptop en sus rodillas y con las sábanas envueltas alrededor de él. Me dio un mágico y amistoso saludo cuando entré, un «Hola» lleno de vida.

—¿Tienes algún plan para hoy? —le pregunté mientras me sentaba, coloqué mi bolsa en mis piernas y lo miré.

Él se encogió de hombros.

—Nada en particular.

—Podemos ir afuera de nuevo —sugerí, preguntándome si él había estado esperando con ansias mi visita tanto como yo lo hacía. La semana había pasado lenta, me encontraba contando los días que faltaban para verlo de nuevo. No se suponía que esto pasaría, pero lentamente Kyungsoo ocupaba gran parte en mi conciencia. Quería conocerlo por dentro y por fuera. 

Y también quería repararlo, era lo que más quería en este mundo.

Él se encogió de hombros nuevamente, dejando su laptop a un lado y cubriéndose entre las sábanas, colocándose de lado, con sus ojos negros fijados en mí. Colocó sus manos entre la sábana, cubriendo su cabeza con ella como si fuera una capa.

—No quiero ir a ningún lado hoy. —Él se veía tan vulnerable acurrucado ahí, con su nariz apenas visible entre las sábanas. No me atrevería a presionarlo a que hiciera algo si no quería.

Yo tampoco estaba teniendo un buen día, uno de mis pacientes, una chica joven con rabdomiosarcoma, un tipo de cáncer muscular, se estaba poniendo peor y no estaba seguro de que sobreviva a este mes. Además no me estaba sintiendo tan bien, mi garganta estaba hinchada como si me fuera a dar algún tipo de resfriado y también me dolían mis músculos y articulaciones. Esconderse debajo las sábanas no parecía mala idea.

—¿Alguna vez has hecho una casa con sábanas? —le pregunté lentamente mientras deslizaba mis manos en los bolsillos de mi sudadera, buscando algo de calor.

Él asintió, había un tipo de nostalgia en sus ojos.

—Minseok y yo solíamos hacerlo en la sala cuando éramos chicos.

—¿Quieres hacer una ahora?

Analizó mi proposición por un momento antes de asentir, quitándose las sábanas de encima, parándose frente a mí mientras me miraba con algún tipo de sonrisa.

—Está bien.

Me levanté, quitando mi bolsa de mi hombro y dejándola en la silla. Luego, agarré una sábana.

—Creo que si lo sujetamos con el pie de la cama podemos hacer un tipo de tienda, ¿verdad?

Kyungsoo asintió serio.

—Mientras haces eso, buscaré las almohadas.

Estiré la sábana azul sobre la cama. Toda la habitación parecía tener un olor diferente al resto del hospital. No podía saber qué era, era un aura intangible que venía por parte de Kyungsoo.