Catch me, I'm falling » KaiSoo

Marzo 1 - Día 45

No tengo nada que perder
Tomaste tu tiempo en elegir
Entonces nos dijimos el uno al otro
Sin rastro de temor que...

Nuestro amor sería para siempre
Y si morimos, morimos juntos
Mentir, jamás lo haré
Porque nuestro amor sería para siempre

(Muse - Neutron Star Collision (Love is forever))

***

Cuando desperté a las 5:30 a. m., Kyungsoo estaba empapado en sudor y le di un beso en la frente húmeda, llevándolo al baño. Nos metimos en la bañera y abrí la llave del agua caliente. Estaba todo en silencio, apenas se alcanzaba a escuchar el sonido del agua al caer.

xx

Luego de la ducha, fuimos a la habitación por algo de ropa. Kyungsoo escogió unos pantalones anchos y una cómoda sudadera de color blanco que yo tenía. Opté por vestir una camisa y pantalones sueltos. Estaba todo silencioso en el apartamento, podía sentirse el aire frío de la mañana. Baekhyun se levantaría hasta dentro de media hora, ya que había dejado a alguien trabajando en la panadería hasta las 7:30 a. m. y Chanyeol tenía clase a las 8:00 a. m.

Ninguno de los dos hablábamos, un gran silencio descendía entre nosotros a medida que entramos a la cocina. Abrí la alacena para tomar dos tazas y bolsas de té, las coloqué en la mesa mientras Kyungsoo encendía la estufa para poner a calentar el agua en la tetera.

Él era encantador en la mañana, con su cabello despeinado y sus ojos adormilados, con sus labios formando una media sonrisa en forma de corazón con expresión de satisfacción.

Me senté sobre la mesa apoyando mis manos en ella mientras lo miraba buscar algo entre los cajones de la alacena. Extendí mi mano cuando él se acercó lo suficiente y sujeté su muñeca envolviéndola con mis dedos, jalándolo hacia mí.

Él se acercó fácilmente acomodándose entre mis piernas, pegó su rostro en mi pecho y colocó sus brazos alrededor de mi cintura. Lo abracé, apoyando mi barbilla en su cabeza, disfrutando ese momento íntimo de tenerlo en mis brazos.

Hay una magia en ser despertado cuando no hay ningún ruido, moverse lentamente a través del silencio, poder andar por todo el apartamento sin ser molestado. Había magia en un montón de cosas, en los amaneceres, en la nieve, en las casas hechas con sábanas. Incluso en Kyungsoo, me había tomado un tiempo en darme cuenta, pero tal vez había magia en él también.

Fue extraño cómo pasó el tiempo mientras estábamos allí, y apenas un momento después, la tetera comenzó a silbar y pude ver humo salir de ella. Le di un beso en su cabeza a Kyungsoo y él se separó de mí.

—Ya está hirviendo —murmuró mientras yo apoyaba la cabeza contra la alacena, viendo cómo tomaba la tetera y llenaba las tazas con el agua caliente. Solo se escuchaba el burbujeante sonido de esta al caer dentro de las tazas.

Dejé de apoyarme contra la mesa y me coloqué detrás de él, deslizando mis manos en sus caderas para dar un beso entre su hombro y su cuello.

—Te amo —dije respirando contra su piel.

Dio un «hmm» en respuesta y colocó sus manos sobre las mías, me gustaba cómo se sentía su cuerpo entre mis dedos.

—No te muevas —susurró, para luego apoyar su cabeza contra mi hombro y yo hice lo mismo pero hacia adelante. Nuestros cuerpos estaban presionados juntos en el resplandor de la mañana.

Me aferre a él, sentí cómo el miedo que vivía entre mis huesos parecía desaparecer mientras Kyungsoo acariciaba mis manos, haciendo círculos en mi piel. Sentía el frío suelo en mis pies y el cuerpo cálido y suave de Kyungsoo entre mis brazos. Pensé que tal vez si pudiéramos capturar momentos y guardarlos en frascos, realmente me gustaría guardar este momento y tenerlo en un lugar especial.