Catch me, I'm falling » KaiSoo

Abril 19 - Día 92

Él se va y no puedo hacer nada, el amor se va
Como un tonto, sin comprender me quedo parado aquí

¿Qué hay de ti? ¿Estás realmente bien?

(BIGBANG - IF YOU)

***

Todo lo que podía pensar en las horas después de aquella llamada era que debería de haber estado ahí, ese pensamiento giraba como un disco en mi mente. No estaba despierto cuando mi celular comenzó a sonar; aturdido, comencé a buscarlo con mi cerebro exhausto para finalmente responder con una voz rasposa.

Los minutos después fueron un torbellino de pánico y malestar que hizo un hoyo en mi estómago mientras trataba de buscar la ropa adecuada para salir de casa. Terminé poniéndome lo que estaba más cerca de mi cama olvidando mi beanie en una carrera por llegar a la puerta.

Sehun me dijo que me mandaría mensajes para mantenerme informado, me quedé en silencio escuchando solo la radio durante el viaje en tren, me quedé mirando la pantalla blanca de mi celular mientras que mi mantra daba vueltas en mi cabeza.

«Debías de haber estado ahí, él te necesitaba y no estabas ahí».

Eran cerca de las siete y media cuando llegué al hospital, Sehun me estaba esperando en las puertas con un cigarrillo en su boca, con sus nervios dibujándole pliegues en su frente. Cuando me vio, tiró el cigarrillo en el suelo aplastándolo con su zapato y dejé que me envolviera en un abrazo.

Sehun no era alguien a quien yo hubiera catalogado como cariñoso, pero parecía que apreciaba poder esconder su rostro en el hombro de alguien, el mérito de dejarse abrazar por alguien aunque sea por un rato.

Él me dio una de esas sonrisas que intentaban parecer genuinas, pero terminaban llenas de tristeza.

—Por ahora, él estará bien.

Asentí, dándole una pequeña sonrisa. Había algo consolador en Sehun, un vínculo parecido a como era Kyungsoo y verlo me hacía sentir un poco mejor.

—¿Por qué no me mandaste ningún mensaje?

Él alzó sus manos con sus dedos temblorosos.

—No puedo dejar de temblar, además quiero decir... tú sabes.

Parte de mí lo sabía. Pero necesitaba que él mismo me lo dijera, necesitaba escuchar sus palabras y mirarlo a los ojos, no era algo de lo que podías decir en un mensaje de texto. Juntos teníamos que aferrarnos a los últimos momentos de Kyungsoo y eso estaba bien.

—¿Dónde está Luhan? —le pregunté mientras caminábamos, Sehun me llevó hacia la pequeña cafetería del hospital.

—Está en China. Fue a casa a visitar a su mamá el lunes y no he tenido el corazón para llamarlo.

Asentí ordenando un café.

—Entiendo —Me acerqué a la ventanilla para tomar el café—. Dime, ¿qué pasó exactamente?

Sehun se encogió de hombros y sus ojos se dirigieron al suelo.

—No lo sé. Básicamente tuvo un ataque, se cayó y está un poco mal.

—¿Aún no sabes qué tan malo fue? —le pregunté, resistiendo la urgencia de acurrucarme en mí mismo.

Él negó con su cabeza.

—Los doctores aún no saben qué tan dañadas están sus funciones cognitivas (memoria, pensamiento, habla, movimiento). La caída lo lastimó un poco, pero están más preocupados por el ataque que tuvo.