Del internado a vivir con 5 chicos.

60 ¿Eso p-para que e-es?

2 semanas después.

LIAM POV.

Hoy es mi día. Hoy mismo saldré de la cárcel.

Flashback.

Estaba en mi celda — como siempre — Y he intentado no meterme en problemas ni en líos. Aunque nadie sabe que tenía un teléfono, lo sigo teniendo. En fin... Me faltaban aún ocho meses en esta cárcel pero el otro día se hizo otro juicio de nuevo y me dejan libre ya. ¿Genial no?

Fin flashback.

- ¿Con qué hoy sales de aquí, eh? - preguntó Paul, el guardia de mi sección.

- Si - respondí sin mirarle.

- Quizás vuelva a verte por aquí - ironizó.

- Quizás tú ya no estés aquí - le respondí y el trago saliva duramente para después salir de allí a paso apresurado intentado no mostrarse nervioso.

Por dios. Esto no ha sido nada fácil, lo de que me dejen salir. Ha tenido que venir a ayudarme "El joker" (Es el apodo del jefe misterioso) Si, no tiene mucha imaginación. Ha costado mucho papeleo e incluso dinero.

- Liam - llamo mi atención el director de la cárcel - Ya puedes salir aquí. Recuerda tienes que venir aquí una vez al mes para hacerte un control y no puedes viajar a otro continente, ¿de acuerdo? - me miró amenazante.

- Si - apreté mi mirada y él se hizo a un lado para que pudiera salir de allí.

A unos metros estaba "El Joker".

- Ya soy libre - le dije y el sonrió con amargura.

- Vámonos.

CAT POV.

Hoy, por muy ridículo que suene, es un día de hermanos. Solo Nick, Luke y yo. Estamos en el Beverly Center en el Starbucks de siempre. Sentados y sin nada de qué hablar.

- ¿A quién demonios se le ocurrió esto? - preguntó Nick.

- A ti - respondimos Luke y yo al unísono.

- Mala idea... No hay nada que hacer.

- ¿A quién se le ocurrió venir al centro comercial? - dijo Luke de brazos cruzados.

- ¡A ti! - volvi a responder al unísono con Nick.

- La única que tiene buenas ideas aquí soy yo - sonreí con superioridad y ellos me miraron con la ceja alzada.

- No es que tengas buenas ideas, sino que no tienes ideas - me dijo Nick.

- ¡Turn down for what! - gritó Luke.

Ni siquiera tiene sentido ese corte, ¿no? Ugh. Los chicos son tontos, bueno, al menos, mis chicos sí que son tontos.

- Tuturututurutu - un chico unas mesas allá hizo la música rara de esa canción y los chicos le señalaron con su dedo índice con una sonrisa. El levanto las manos como si hubiera ganado su equipo de fútbol preferido.

Vale, ese chico también es tonto. Más que tonto.

- Vale, ya se rieron de mí, ¿ahora qué hacemos? - bufé y ellos rieron.

- Mmm, ¿un helado? - sugirió Luke y negué.

- Nos acabamos de tomar un café y no me quiero tomar un helado.