02 | creep

8K 568 13
                                    

La mujer, de la que a pesar de todo aún desconozco el nombre, eleva la navaja que lleva en su mano algunos centímetros y luego nos señala.

—¿Qué hacen aquí? —inquiere, y aunque por un momento pensé que lo diría con impotencia lo hace bastante calmada, observando a Gabriel.

Es bastante curioso. Hace algunos segundos parecía —a pesar de todo lo que su pasado implica; aquello que aún me confunde— estar dispuesta a caminar hacia mí e incrustar la navaja, que yo mismo le di hace ya bastante tiempo, en mi cuerpo. Sin embargo ahora se halla exageradamente tranquila, observándonos sin una pizca de rabia en su actuar.

—Me han salvado y creo que la mejor forma de agradecerlo es brindándoles protección; un lugar donde dormir y alimento.

Curva sus labios en una sonrisa e, introduciendo la navaja en un cartucho de cuero que cuelga de su pantalón, se gira un instante hacia la iglesia a sus espaldas, para luego asentir y caminar algunos metros hasta subir las escaleras que dan a la puerta de esta, y abrir las mismas sin mucho esfuerzo. Sorprendente.

Rick me observa un instante y luego a todo el grupo, para después, tras asentir casi invisiblemente, comenzar a caminar hacia Gabriel, quien complacido y con una sonrisa plasmada en sus labios apresura su paso hasta adentrarse a la iglesia.

Me tomo mi tiempo; permito que todos se me adelanten, para finalmente, entrar al lugar, que para mis sorpresa se encuentra casi completamente intacto, con sus asientos aun brillando por el barniz, y las paredes blancas sin la más mínima mancha, además de la gran cruz en la pared principal. Todo en aquel lugar se hallaba ajeno a la nueva vida, a excepción de una que otra caja de plástico en la que se podían ver alimentos, y, una de las largas bancas del lugar, en la que reposan un par de mantas.

—Pueden acomodarse —el sacerdote intenta animarnos, lo que consigue sin mucho esfuerzo, aunque francamente, creo, solo porque nos hallamos demasiado cansados como para preguntarnos si realmente debemos confiar en él.

Asique, acomodando la ballesta en mi espalda camino con decisión sobre el brillante piso de madera del edificio, observando cada detalle, hasta toparme, tras un par de minutos, con un par de ojos grisáceos, que me observan con detenimiento. Frunzo los labios y aprieto la ballestas, sin embargo cuando me dispongo a caminar hasta la chica para averiguar todo aquello que me atormenta respecto a ella, alguien me palmea el hombro y, cuando me giro, Rick me hace un gesto y juntos caminamos algunos metros hasta la entrada del lugar, donde tenemos una amplia vista de todo el grupo.

—Le conoces —me dice, e inmediatamente sé que habla de ella. Me encojo de hombros—, ¿es de confianza?

Frunzo un poco el ceño y desvío la mirada, esforzándome por desaparecer las imágenes de la chica en mi mente.

—No sé nada de ella, solo tuvimos un pequeño encuentro en Atlanta el mismo día que llegaste al campamento —Rick me observa con las cejas en alto esperando que continúe, asique lo hago; quizás necesito una segunda opinión al respecto para saber si realmente fuí tan malo como la mirada grisácea de la chica me lo gritaba cuando me vio hace ya varios minutos a las afueras del lugar—. Había ido de caza; perseguía un ciervo en el bosque...., de un momento al otro le perdí de vista y mientras lo buscaba me topé con ella junto a una adolescente; ambas estaban en el suelo echas ovillos observando como un par de caminantes se les acercaban —me rasco el cuello y desvío mi mirada un segundo al grupo, que ya se ubicó en el lugar y dialogan bastante animados—. En ese momento era más o menos como Gabriel hace una hora sobre aquella roca antes de que le salváramos, solo que ella siquiera griraba pidiendo ayuda; solo repetía “Estaremos bien, Dios nos cuidará”; me pareció la idiotez más grande que jamás oí, asique solo maté a los caminantes y le dije lo que creía respecto a sus palabras.

Los ojos de Rick me analizan durante algunos segundos, sin embargo simplemente acaba soltando un suspiro y se rasca las sienes.

—Que Dios no la protegería, por lo que debía aprender a hacerlo ella misma —le aclaré, sin embargo Rick solo se limitó a fruncir el ceño con la mirada fija en la chica, que ahora para nuestra sorpresa camina hacia nosotros.

Y por un momento me entraron las ganas de girar sobre mí mismo e irme, sin embargo al mismo tiempo algo que me pide que me quede y averigüe que ha ocurrido realmente con ella. Sí, eso haré, porque es sorprendente el cambio que demuestra, lo que me hace creer que en verdad solo es una faceta; que en el fondo continúa siendo la misma mujer que me topé en Atlanta.

—Hey —habla con tranquilidad cuando está a una distancia prudente—, ¿eres Rick, verdad? —el mencionado asiente sin desviar su mirada de ella—. Me gustaría hablar contigo, si es que se puede.

Cuando se gira levemente a observarme no me inmuto, pero, aún así, la sorpresa que me llevo al ver una sonrisa formarse en sus labios, no es menor.

—Es respecto a las provisiones —habla observando nuevamente a Rick—, ya sea que deseen quedarse aquí o irse, lo ideal sería ir al pueblo a por más. Además, hay una guardería; leche en fórmula y pañales —añade lo último señalando a Judith, quien es cargada por una calmada Beth.

Aprieto los labios conforme desvío la mirada.

—Ya, ¿y debemos creerte? Porque me cuesta hacerlo viniendo de alguien como tú —le suelto, porque sinceramente no creo en sus palabras; es una idiota que no sabe defenderse y espera que le creamos aquello, claro.

Si algo sé, es que debe esconder algo.

Sus ojos chocan con los míos, sin embargo no me dice nada, y no hay nada en su rostro que me enseñe su sentir respecto a mis palabras.

Frunzo el ceño y desvío la mirada con resignación.

—Podemos ir a echar un vistazo —Rick habla, aunque si bien la observa a ella sé que sus palabras van dirigidas a mí—; no perdemos nada al hacerlo.

La castaña asiente antes de girar y comenzar a alejarse y, por alguna razón siento la necesidad de averiguar todo aquello que deseo saber sobre ella y su pasado, asique lo hago y, con los puños apretados la sigo.

Espero les esté gustando. Gracias por leer<3

Fantasma del ayer » Daryl Dixon y Tú [Terminada]Where stories live. Discover now