Uzumaki Hanako ~ El destello rojo en una flor.

Capitulo 5 "¡Mision importante! ¡Superpartida al país de las olas!".

El día estaba soleado, entre todos los arboles se encontraban escondidos cuatro Gennin.

—Me encuentro en el punto C.— Hablo Sakura por aquel radio que tenían en los oídos.

—Sakura, estoy en el punto B.— se escucho decir al Uchiha.

—¡Dattebayo! Estoy en el punto A.— grito Naruto demorándose.

—Te tardaste Naruto.— comento Kakashi por el radio.

Esperaron unos segundos a que la última señal se escuchara en el radio pero nada sonó.

—Hanako, se supone que tienes que decir tu punto.— hablo cansado Kakashi.

—Perdón, se me olvido mi punto.— hablo por fin la pelirroja.

Todos suspiraron por la respuesta de Hanako. Aveces era hasta mas idiota que Naruto.

—El objetivo se ha movido, ¡Vayan tras el!— ordeno el albino por el aparato que todos tenían.

Se movieron por lo arboles sigilosamente, persiguiendo al objetivo sin ser vistos. Cada uno se escondió cerca para no levantar sospechas y que saliera corriendo nuevamente.

—¿Cual es la posición del objetivo?— pregunta Kakashi.

—Quinientos metros, estoy listo.— aviso Naruto.

—Muy bien.— se escucho a Kakashi, calmando como siempre.— ¡Ahora!

Los cuatro Gennin saltaron encima del gato, siendo atrapado por Naruto quien lo levanto desde su estomago.

El gato empezaba a lucha con Naruto rasguñando al rubio y pegándole patadas.

—¡Naruto lo estas maltratando Dattebane!— le grito Hanako tratando de quitarle el gato al rubio, pero el animal solo termino peleando con los dos Uzumaki.

—Verifica su listón en la oreja izquierda.— le hablo Kakashi a Sasuke.

Y era afirmativo, el gato de pelaje castaño tenia un pequeño listón en su oreja izquierda.

Sakura solo sonreía al ver como Hanako y Naruto trataban de quitarse el gato de encima, quien le estaba dando una buena cantidad de rasguños.

—El gato tora ha sido capturado con éxito, buen trabajo equipo.— les felicito Kakashi por medio del radio.

—¡¿No podemos tener otra mejor misión!?— grito Naruto haciendo que a todos le doliera el oído por el radio.— ¡Odio lo gatos!

[...]

El gato había sido entregado a su dueña, una gorda señora bien maquillada quien era la esposa del señor feudal, de la tierra del fuego. Agradecía a los Gennin por atrapar a su querido tora quien siempre se escapaba, el pobre animal era abrazado con fuerza por la dueña.

—Pobre, lo hemos condenado.— susurro Hanako al ver como la mujer apretujaba al probé animal con muchos de sus abrazos.

El equipo siete se encontraba en la oficina del hokage, ya listos para su próxima misión o mas bien dicho tarea. Naruto y Hanako eran los únicos que estaban con rasguños de aquel gato tora.

—Ahora para su siguiente misión.— hablo el tercer hokage quien revisaba una buena cantidad de papeles.— Hay diversas tareas disponibles. Cuidar al bebe de tres años del consejero en jefe, ayudar a su esposa con las Compras, sembrar patatas en el...

La pelirroja estaba con un tic en el ojo, escuchando las estúpidas tareas que el hokage les nombrara. Kakashi se dio cuenta de eso y suspiro al ver como los dos Uzumaki ni estaban conforme con eso.