Capítulo 41

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Estar encerrada consumía mi cordura, la mente m recordaba los hechos del día anterior y la desdichada decisión que tome; debía salir de allí y respirar nuevo aire, con nada en la mente, pero con muchas preguntas, tome la decisión de buscar un pediatra que pudiera orientarme con mi embarazo y que lograra explicar la razón de porque mi vientre se ve pequeño. Lo que me llevo a buscar en internet el mejor y por extraño que sea, solo él tenía tan buenas opiniones, así que ahora me encuentro sentada en esta sala de espera llena de mujeres en mí mismo estado "Parece que es cierto, unos de los mejores y más acertados; según palabras escritas por madres"...

—Marily —levanto la cara al escucharlo.

Sonríe felizmente, mientras sostiene la tabla en sus manos; confundida miro a los presentes y con una mano me llama; lentamente me levanto y miro esa bata blanca dónde lleva escrito su nombre: Dr. Demian Johnson. Pediatra mira su tabla y frunce su ceño. La bata no alcanza a cubrir ese chaleco negro a juego con sus pantalones "¿Así es como se visten todos los doctores?"

—Buenos días, Demian —la enfermera nos mira curiosa

—Buenos días Marily, pasa —se hace un lado y camino pasando a su lado —Me intriga saber que hayas encontrado mi consultorio —me paro a un lado de la puerta.

"Para ser un buen pediatra, su consultorio es pequeño; pensé que los hospitales daban a sus mejores doctores buenas oficinas".

—Es coincidencia, no sabía que eras tú; habiendo tantos en el mundo —asiente y se sienta tras el escritorio —Puedo volver en otro momento, tienes muchas pacientes esperando —aprieto los dientes nerviosa.

"Había pensado en cancelar la cita, diría que mi cita con el obstetra se alargó y así no saldría con él, sin embargo, el destino como siempre tiene otros planes para mí".

—No son mis pacientes, solo trabajo aquí por las mañanas —me señala la silla "Todas mis esperanzas se han esfumado" —Toma asiento —lee el formulario que llene y sin querer hacer ruido me muevo despacio —No hay mucho que leer, así que iniciaremos de nuevo; te haré una ecografía y desde ahí partiremos ¿Estás de acuerdo? —asiento.

Se levanta y corre la puerta grande de madera "Pensé que era una pared" su consultorio se ve más grande y espacioso, la alta camilla tiene a su lado varios aparatos, junto con una pantalla grande frente a la camilla "Juzgué mal" dejo el bolso en la silla de a lado y lo sigo, con su ayuda me subo a la camina y me acuesto. 

Demian se pone gel antimaterial, se coloca los guantes y me mira divertido.

—Por favor levanta tu blusa —un escalofrío recorre mi cuerpo y nerviosa hasta los huesos hago lo que me pide. Al poner el líquido en mi piel, me quejo de su frialdad —Debí decirte que estaba frío, me disculpo —miro su sonrisa divertida

—No pareces sentirlo mucho, incluso podría decirse que lo estás disfrutando —su sonrisa se ensancha al escucharme

—Tal vez un poco, eso me hace ver poco profesional ¿Cierto? —esas dos lunas me miran fijamente —Puedes ver por la pantalla frente a ti —no me lo pienso dos veces y desvío la mirada de él.

Miro el aparato moverlo sobre mi vientre, al mismo tiempo que de la pantalla emiten sonidos extraños "En otro mundo, ambos estaríamos viviendo este bello momento; podrías sostener mi mano que tiembla de nervios y calmar mi corazón agitado por el sentimiento que dejaste, en ese mundo habríamos sido felices por toda la vida"...

—Tienes diecisiete semanas, en términos sencillos, cuatro meses; en este mes la piel de tu bebé se engrosará y... ¿Lo ves? Es tu bebé, Marily —"Es mi bebé" —Mide dieciocho centímetros, deduzco que tiene un buen peso; todo está en orden Marily, no hay nada de qué preocuparse —retira el aparato y con cuidado limpia los restos del gel.

"Una gran familia fue lo que siempre soñé, fui hija única y mis días a veces solían ser solitarios; no tuve nunca alguien que me siguiera en mis locuras o con quien conversar antes de dormir, ahora le espera el mismo destino a mi bebé".

—Esperaba sorprenderte, pero tu bebé no se deja ver; así que por el momento no podré decirte si es niño o niña —limpio mis lágrimas rápido y me siento en la camilla, me ayuda a bajar y me guía hasta la báscula —¿Sabes cuánto pesabas antes de quedar embarazada? —me mira y solo puedo negar, me quito los zapatos —Pesas sesenta y ocho kilos, procura no saltarte ni una comida y come cuando sientas hambre, evita hacer sobre esfuerzo y no hacer corajes ¿De acuerdo? No quiero tener que mandarte a la cama —me pongo los zapatos y regreso a la silla

—¿Tengo buen peso? Me refiero ¿Es el adecuado para mi bebé? —se sienta y hojea mi formulario —Demian...

—Tu peso es perfecto, no hay necesidad de que bajes de peso —escribe en su ordenador olvidándome —Te recetaré vitaminas prenatales, bebé abundante agua y solo una pequeña recomendación, no consumas tantos artificios ni azúcares ¿Tienes alguna duda? —deja de mirar el ordenador y me ve

—Mi vientre es pequeño a comparación del de mi amiga ¿Por qué mi vientre no crece? —el ruido de la impresora me hace voltear a verla

—El embarazo es distinto para cada mujer, no existe el momento específico en que el vientre deba de crecer; en eso influye mucho la estructura del cuerpo y si es madre primeriza o no —revisa la hoja impresa y prosigue —Hay algunas madres primerizas que tardan en mostrar un vientre abultado, eso no quiere decir que haya algún daño o anomalía, solo es distinto para todas ¿Quieres saber algo más? Si no hay nada más que decir seguimos, este mes tu bebé desarrollara el sentido del tacto y gusto, también comenzara a moverse lo que puede provocarte algunas incomodidades, dependiendo dónde se acomode, los movimientos serán discretos y conforme avance los sentirás con fuerza —abre los cajones del escritorio y saca dos frascos.

Tocan dos veces la puerta y por ella entra la recepcionista que me atiendo, en sus manos lleva un sobre largo, la recepcionista me lo da y extrañada lo tomo "¿Qué es?".

—Gracias, Anna —miro el sobre —Es tu ecografía, ahora podrás verlo siempre que quieras —abro el sobre y noto el sudor en mis manos "Me siento tan nerviosa" saco el ultrasonido impreso y es cierto, puedo ver a mi bebé, se distingue claramente sus extremidades —Toma una después de cada comida, los síntomas de riesgo que debes tomar en cuenta es: sangrado, ya sea escaso o abundante, dolor en el vientre...

"Mi bebé crea en mí una sensación extraña, Theo siempre fue el hombre al que ame con todo mi ser, y pensé que solo él podría crearme distintas sensaciones, sin embargo, mi bebé esta creando algo nuevo dentro de mí, algo que brilla con intensidad ¿Eso normal? Es como... Cómo si flotara".

—¿Alguna duda?... —"¿Así se siente cuando ves a tu hijo por primera vez? ¿Se parecerá a mí o a Theo? ¿Tendrá su carácter o será como yo?" —Marily —volteo al sentir su mano en mi hombro

—Estoy bien —me mira y al ver sus ojos recuerdo las miradas con las que me veían "Lástima".

Guardo la ecografía dentro del sobre y recojo los frascos que están frente a mí "Siempre es así" los guardo dentro de mi bolso y al levantarme choco con su cuerpo.

—Tranquila, respira.

"Y ahí me encontraba, de nuevo tranquilizando mis demonios, esforzándome por mantener a raya los sentimientos que se desbordaban; ver a mi bebé me hacía más consiente que nunca de que nos esperaba una vida sola, me había quedado sin esposo y mi bebé sin un padre, no importaba cuánto me esforzara en avanzar, no podría hacerlo nunca.

—Vayamos a comer, después podemos hablar sobre lo que quieras.

Ahogada por el aire espeso del consultorio salgo quitando a Demian de mi camino "Era una mala idea salir a comer juntos, pero tenía ese sentimiento que suplicaba por no quedarse sola".





VENGANZA © (Segunda parte de AMOR).Where stories live. Discover now