sober | marauders

xiv. i don't want your help

El Black mayor corre por los pasillos, buscando una distinguida cabellera pelirroja.

Su hermano acaba de decirle que le han comprometido con Hera Ragnor.

Pero la historia no era así. Hera había sido comprometida con él, antes de que el estuviera en Gryffindor y fuera considerado traidor a la sangre. Él era quien se debía de casar con ella, antes de ser desterrado de su familia. 

No era correcto, no cabía en su mente como lo habían comprometido sin su consentimiento. Solo que aquella prometida, es la chica de sus sueños.

Ese día en la biblioteca, cuando le pregunto qué es lo que una chica le gusta de un chico. No era para tener consejos para conquistar a Marlene, sino para ella.

Solo que todo ha sido un error. Marlene pensó que el regalo, unas cartas y unos tulipanes amarillos, favoritas de la Hufflepuff, eran para ella.

El rumor de que el salía con la rubia, se corrió por todo Hogwarts como diciendo quidditch en un segundo.

Sus posibilidades con la pelirroja se habían reducido a un sesenta por ciento. O mas bine, a cero por ciento.

Luego sucedió el día en que los vio, a él y a Marlene, pegados a una pared pareciendo ser otra cosa. La verdad es que el estaba aclarando las cosas con ella, de que él no quiere nada con ella.

Al parecer el mundo está contra el cada momento cuando la pelirroja aparece en su radar.

Y hoy, después de casi una semana sin saber de ella, se escapa como un suspiro de sus ojos.

Esto no podía estar pasando.

— Hera — le habla sujetándola del brazo

— No quiero tu ayuda — reclama ella, golpeándole la mano para que la deje — No necesito tu consejo, me casaré con Regulus, querían o no. Es un compromiso con mi madre, y no haré nada para hacerla triste. Si su felicidad requiere con casarme con tu hermano, lo haré. Ahora déjame en paz —

Y así como la encontró, se marchó.

Dejando a un Sirius triste y desolado.