Cómo hacer que los planes se vayan al traste

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Comentadme un poquito, que hoy he subido dos capítulos ;)

(Nombre) parpadeó y miró con una ceja enarcada al marine. Espera... Pero antes de que otro pensamiento acudiese a su mente, Smoker la tomó del antebrazo y se alejó del hombre del rubí, dejando a la chica desorientada. En cuando quiso darse cuenta, se estaban acercando a las escaleras dando pequeños pasos al compás de las notas del vals. Sacudió su cabeza para poder centrarse.

El plan seguía en marcha.

Tan solo tenían que lograr subir por las escaleras sin ser vistos ni por los camareros, ni por los guardias, ni por el hombre que tenía ese magnífico rubí en la empuñadura de su espada. De no haber estado tan aturdida, no habría dejado escapar aquella oportunidad y ahora tendría esa joya entre sus manos guardado en uno de los pliegues de su vestido. Pero había sido un momento de caos en su cabeza, por eso...

—¡Ay!—chilló al notar como le pellizcaban la piel de los lumbares.

(Nombre) alzó la mirada turbada para encontrarse con la del marine, quien tenía el ceño fruncido y la vena de su frente ya estaba hinchada.

—Te he llamado como tres veces, ¿qué diablos estabas pensando?—gruñó el vice-almirante.

—Nada. Nada. ¿Qué querías?

—Tenemos vía libre—apuntó señalando las escaleras.

Antes de asentir (Nombre) echó un rápido vistazo a la pista de baile asegurándose que ninguno de estos les estaban mirando, de todas formas no era raro que las parejas desapareciesen en las fiestas para volver tiempo después. Con pasos rápidos subieron por las escaleras y se encontraron con una puerta abatible, la cual pasaron.

Se encontraron un largo pasillo que conducía hacia el oeste, intercambiaron una mirada para continuar andando con prisa y con los ojos puestos en cada puerta que aparecía por si alguna persona no deseada salía de estas. (Nombre) apretó la mandíbula, tal vez no debería haberse puesto aquellos zapatos con un alto tacón, eran matadores. Pero no se quejó al respecto, decidió caminar con mayor velocidad, cuanto antes llegase antes se los quitaría y rescataría a sus amigos.

El tintineo de unas llaves les hizo detenerse, ambos miraron hacia atrás para buscar a algún guardia, pero tan solo se encontraron con un largo pasillo vacío. Unos pasos a unos metros de ellos se acercaban, delante de ellos había un cruce. (Nombre) alargó la mano al pomo de la puerta que más cerca tuvo, pero la perilla no giraba, no podían meterse dentro. Por el rabillo del ojo avistó como el marine tomaba con su mano el mango de su arma y avanzaba un par de pasos. (Nombre) se mordió los carrillos internos con frustración. Ella no tenía problemas en patearle el culo a un guarda, pero no pensaba ponerse en bandeja para que la arrestasen.

Clavó su mirada con desesperación en la espalda ancha del marine, y resopló andando hacia él, intentando en aquellos segundos elaborar algún tipo de estrategia para que el guarda o sirviente no les pillase in fraganti.

Apretó su paso al ver como el marine se ponía en guardia alzando su jutte.

«Ni se te ocurra» pensó (Nombre) aumentado el ritmo de sus zancadas y en un par de pasos se puso a la altura de Smoker.

Desesperada alargó su brazo para tomar de la solapa de la chaqueta del marine, dio un tirón inesperado haciendo que él perdiese ligeramente el equilibrio y se girase hacia ella, con su otro brazo tomó la otra solapa de la chaqueta. Y como si su cuerpo se moviese por inercia retrocedió todo lo que pudo hasta que su espalda chocó contra la pared, notó como el fresco filo de la espada se pegaba a su piel y la guarda se clavaba en su carne. Con el ceño fruncido dio un tirón más hacia abajo, pudo ver la mirada desconcertada del Cazador Blanco.

Runaway [One Piece]Where stories live. Discover now