Capítulo 26

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- no te digo esto para que me tengas lástima, todo este tiempo he tratado de evitar que me mires como lo haces ahora, con lástima, con pesar de ver a una pobre enferma tirada en una camilla. No pretendas creer que por que te dije todo esto las cosas se arreglaron- lo mire de reojo y limpie la lágrima que se me había escapado.
- yo no te miro con lástima, sólo que me siento mal al saber que yo soy el culpable de que estés aquí. Tu dices que no es grave tu enfermedad pero para mi si lo es. No creas que no es nada fácil ver como en cualquier momento la persona que más quieres se te desvanece al frente y tu sin saber que hacer o que puede ocurrir. Al principio me burlaba de ti por que no tenía ni la menor idea de que sufrias por una enfermedad que te controla la vida. Y cuando... Lo de la beca... Fui un idiota total, yo lo lamento. Lamento que todo esto tuvo que pasar para darme cuenta de que realmente te quiero y no quiero que te separes de mi- limpio sus lágrimas con brusquedad mientras yo trataba de controlar mis sollozos.
- tu me haces mucho daño, siempre me preocupo por ti. Todo este tiempo me he preocupado por ti. Inclusive cuando perdí la beca les dije a mis padres que todo había sido culpa mía para no hacerte quedar mal. Cuando fue tu momento de rebeldía, que sólo querías irte con Maddy hacer quien sabe que cosas. Desde qué te conocí todo ha sido muy difícil, las cosas se complican y es peor- solté un sollozo- y cuando por fin creo estar enamorada de alguien, cuando por fin creo que encontré el amor en alguien, esa persona no lo corresponde. No te imaginas el dolor que se siente el saber que la persona a la cual puedes darle tu vida, es la persona que te decepciona y te trata mal en tal solo unos segundos. Yo te amo Justin pero no merezco sufrir más contigo...
- joven tiene que salir, la paciente tiene que descansar- Justin sin quitarme la mirada de encima y con sus lágrimas aún bajando por sus mejillas asintió saliendo de sus pensamientos. Salió de la habitación un poco desesperado. Suspire frustrada e ignore a la enfermera, desde siempre he odiado los hospitales.

Narra Justin

Salí de la habitación de mi princesa y pude ver que estaba Isabel y Nate, los ignore por completo y me dirigí a una silla apartado de los demás. Necesitaba pensar, todo este tiempo ella estuvo sufriendo y yo no la ayude, es cierto ella se preocupó por mi y yo fui un asco de persona, le agradecí de la peor forma.
Su madre es un asco de persona, como es posible que odie a su propia hija por tener una enfermedad que ella no tiene la culpa de tenerla, ella debe de apoyarla en todo momento, eso es lo que cualquier buena madre debe de hacer. Lo único que se es que así ella no quiera yo voy a ser el que me preocupe por ella.
- como estas?- se sentó junto a mi Isabel. Tenia los ojos rojos y llorosos.
- ella...- suspire- todo fue mi culpa, ella no debe de estar ahí- Isabel me tomo entre sus brazos dándome consuelo. Era lo que más necesitaba ahora- lo lamento Isabel, lamento que Sam este ahí por mi- llore en su hombro. Como puede ser que este tan débil?, la persona que más quiero esta sufriendo y todo es por mi, soy un estúpido de primera.
- ella saldrá de esto, es fuerte- susurro.
- sólo quiero que todo salga bien, su sueño de ser bailarina se puede arruinar por esto- Isabel me miro con lástima y una vez más me abrazó. Mi princesa quiere brillar en el escenario como siempre lo hace. La molesto por que digo que tiene dos pies izquierdos, pero la verdad... Es la mejor bailarina que he visto.
- familiares de la señorita Cassidy- interrumpí el abrazo que tenía con Isabel y me pare junto al doctor para prestarle atención- bueno, la paciente va mejorando respecto a como llego, su enfermedad no tiene alto grado de gravedad, así que no tendrá problema alguno con la movilidad de sus piernas, estará unos días más aquí por que necesitamos que este en reposo. -Sam ha estado olvidando alimentarse como es debido así que tendremos que controlar eso- suspire frustrado, su alimentación, siempre me preocupo por eso de ella, pero esta semana estuvimos separados por el tema de los conciertos y ahora más que nunca me arrepiento de eso- puede tener una visita mientras yo le hago unas cuantas preguntas- entre todos nos miramos e Isabel quiso que fuera yo. No me opuse ante la idea, así que entre a la habitación después del médico. Sam soltó un gruñido al verme y yo trate de sonreírle.
- bueno Srta. Cassidy te inyectas insulina tu sola?- ella asintio y el médico garabateo en la hoja- cuantas veces al día?- Ella suspiro y me miro.
- tres veces al día, antes de cada comida. Hoy en la noche olvide hacerlo- ella me miro una vez más y yo trague en seco un poco asustado. No tenía ni la menor idea de que se inyectaba.
- en que parte del cuerpo lo haces?- siento que no quiero seguir escuchando como mi princesa sufre por algo, me toco el cabello un poco desesperado y ella lo nota.
- en las caderas, tengo la suficiente grasa como para que la insulina se pueda absorber fácilmente- el doctor asiente.
- prefieres hacerlo tu o que lo haga la enfermera?- suelta un gruñido molesta y yo sonrió.
- lo hago yo, casi me dejan un cráter cuando me la aplicaron- solté una risita que al doctor no le gustó para nada- y quiero mi piercing devuelta- reclamo como una niña chiquita.
- sabes que no lo tendrás hasta que estés de alta- ella voltea la mirada indignada y el doctor sin más sale de la habitación.
Se me queda viendo por un largo tiempo al igual que yo. No decimos nada solamente nos miramos y analizamos lo que nuestros ojos dicen. Ella frunce el ceño como sí fuera a llorar y yo me acerco a ella en un movimiento rápido. Tomo su mano y ella lucha por soltarla de mi agarre.
- no te vayas a lástimar- susurre viendo la aguja en su mano.
- no te preocupes más no lo puedo estar- una lágrima callo por su mejilla y ella quitó mi mano antes de poder llegar a tocar su cara.
- no quiero que estemos así- susurre, no puedo seguir estando aquí parado como idiota sin poder besarla, consentirla o darle el cariño que se merece.
- pues debiste pensarlo antes de actuar como un estúpido- soltó un sollozo- deja de mirarme así, odio que la gente me vea débil, odio que me veas como si estubieras viendo a una pobre persona patética- cubrió su rostro con la otra mano.
- no, Sam, yo nunca te miraría así- ella asintió sin ser capaz de mirarme a los ojos- yo te amo y me doy cuenta un poco tarde pero lo hago-
- ¡NO! ¡Cállate! Deja de decir mentiras, no te fue suficiente con lo de hoy?- gritó colocandose roja de la rabia.
- tranquila cariño, no hablare para que no te alteres- entrelaze nuestros dedos y me quede en silencio escuchando como sus sollozos iban sesando de a poco. Su hermoso rostro estaba con unas cuentas heridas que me hacían el corazón chiquito. La observe cada marca que tenía su cuerpo, era perfecta y no me había dado cuenta. Escuche como su respiración se calmaba y su agarre se hacía más débil... Suspire y me quede consintiendola y mirándola como soltaba pequeños suspiros de vez en cuando, quite la manta que la cubría suavemente para levantar su larga bata y poder observar sus piernas. Pero no piensen mal solo quiero observar las marcas de las agujas. Efectivamente ahí estaban pequeñas marcas rojas se esparcían por su cadera, las toque sin hacerle daño alguno pero ella se estremeció con mi toque así que me aleje cubriéndola de nuevo. Coloque mi cabeza en su pierna y la observe hasta que caí en un profundo sueño.
- Justin- gruñí molesto y apreté más la mano que sostenía- Justin- abrí los ojos pero el cansansio me venció y los volví a cerrar- Justin tienes que despertar los padres de Samantha están aquí- susurro Scooter, abrí los ojos de golpe y me sentí desubicado un poco- tienes que salir, hay un pequeño problema- asenti y me levanté dejando la mano de mi princesa delicadamente. Me acomode la ropa y salí de la habitación para encontrarme con sus padres para nada contentos.
- buenos días señor Cassidy- el tomo mi mano cortésmente pero su madre ni volteo a mirarme.
- Justin nos llevamos a Samantha devuelta a Atlanta- frunci mi ceño un poco confundido.
- por que? ella está bien aquí- me cruce de brazos un poco enojado.
- queremos que ella esté cerca de nosotros. Tenemos los médicos que llevan su caso, es mejor- explico su padre.
- aquí la están tratando muy bien, esta mejorando, tiene que tener reposo- suspiró frustrado y se tomo el puente de la nariz.
- si ella sigue aquí nadie estará al pendiente de ella- que? Es que acaso yo estoy pintado o que?
- para eso estoy yo aquí- su madre se giró a verme bruscamente y yo me sorprendí un poco.
- mira, las cosas están así, tú tienes que continuar con tu gira, sus amigos se van hoy por que tiene que asistir a clases, nosotros no estaremos junto a ella ya que tenemos muchas cosas que hacer. Así qué quieras o no, nos la llevamos- solté un gruñido.
- pues cancelare la gira para estar junto a ella. Igual ella estará sola aquí o allá, ustedes no son lo suficientemente padres como para preocuparse de que su hija, estuvo a punto de morir y a ustedes solo les importa su trabajo- sentí una mano dándome apoyo y voltee a ver que era Christian.
- Justin tiene razón, pero es mejor que este en Atlanta, ahí podremos estar con ella. El tema de la gira ya es problema tuyo si la cancelas o no, así que es mejor trasladarla, no pasara nada- me giro y entro a la habitación de Sam, ella seguía dormida así que me pare junto a ella y simplemente la observe. La puerta se abrió una vez más abriendo pasó a Christian que se hizo al otro lado de Sam.
- esta bien, es mejor llevarla, pero no me quiero separar de ella- el asiente y nos quedamos unos segundos en silencio.
- la quieres mucho no?- lo mire fijamente y suspire.
- la amo...- susurre.
- por que no le dijiste eso?- bufe un poco desconcertado.
- tenía que suceder todo esto para que ustedes dos se llevarán bien?- la ronca voz de mi princesa se hizo presente en la habitación.
- tenemos algo que decirte- ella se acomodó un poco y se dispuso a escuchar- tus apdres están aquí, y quieren que te trasladen a Atlanta- ella suspiro frustrada.
- ya lo veía venir- sonreí y la tomé de la mano...
Después de todo se llevaron a Sam de ese hospital, no me dejaron ir con ella pero igual partí hacia Atlanta tras ella, como el perrito faldero de ella, jamás me imagine estar así por una mujer.
Scooter a pesar de todo se molesto demasiado por que cancele la gira temporalmente, tuve que hablar con las beliebers y explicar todo lo que sucedió, bueno saltando algunos detalles, algunas entendieron como otras no pudieron hacerlo.
Christian y yo nos disculpamos respecto al problema que teníamos, eso pasó hace muchos años y no tiene por que interferirse entre nosotros. Es mejor tener las cosas bien ya que estaremos viéndonos todo el tiempo, Isabel igual se combirtio en una persona especial para mi, estuvo apoyandome en todo momento.

Narra Samantha

Una vez más mi mama me reprendió por todo lo que causé, ni quiera fue capaz de preguntarme si estoy bien que fue lo que sucedió para que ocurriera el accidente, nada, hizo como si no existiera después de gritarme en la nueva habitación del hospital de Atlanta. Sólo me dijo " nos vemos en un par de días tu padre y yo tenemos cosas mas importantes que hacer". Me quede destrozada, después de todo yo quiero mucho a esa fría mujer, la quiero por que recuerdo como me estrechaba entre sus brazos y me decía lo mucho que me quería, ahora si estoy de suerte me saluda con una sonrisa, mi vida se volvió aún mierda desde que me diagnosticaron mi enfermedad, pero uno no escoge la vida que quiere, simplemente te toca. Justin una vez más entro a la habitación y yo me limpie las lágrimas rápidamente.

Narra Justin

- cariño, no estés así, no la escuches, ella no tiene ni la menor idea- tomo su mano.
- como no escucharla? Es mi madre después de todo le tengo cariño- suspire entre cortado.
- ya es hora- entro una enfermera y volvió a salir. Fruncí el ceño y Sam intento pararse.
- hey quieta, que necesitas?- ella suspiro agradecida.
- acercarme eso- tomé la pequeña bolsita negra que señalo y se la pase. Saco una jeringa y la lleno con un liquidado transparente.
- espera que es eso?- señale extrañado, ella soltó una risita.
- insulina, lo que me aplico todos los días- levanto su bata rosada como la había pedido ella y tomo un pedazo de piel entre sus manos y se la inyecto. Me estremeci de tan sólo ver como la pequeña agua desaparecía entre su piel.
- me da miedo ver eso- tape mis ojos con mis manos.
- tranquilo, no pasa nada- quite mis manos y le sonreí.
- cuantos días más estarás aquí?- tome asiento junto a ella.
- no le se tal vez un par, era simplemente establecer de nuevo lo de mi alimentación- cerró los ojos po unos segundo y me volvió a mirar- por que cancelaste la gira?- desvíe la mirada.
- no quiero separarme ni un segundo de ti- buscó mi mirada y la encontró.
- Justin, Scooter hablo conmigo- bufe- la gira igual va a continuar muy bien lo sabes, yo no puedo ir contigo, me tengo que quedar, no es mi salud, son problemas que me están ocurriendo...

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Todo esto tenia que pasar para que Justin se diera cuenta que ama a Sam???

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