Lost Man

008: "Cuando te conocí..."

008: "Cuando te conocí..."

CASSANDRA.

Cerré la puerta de portazo en el apartamento donde nos estábamos alojando los chicos y yo, tenía la cara empapada de lágrimas y doy gracias a dios que ninguno está aquí para verlo. Me dolía tanto el pecho que siento que he traicionado el amor que le tengo a Liam después de todo lo que le dije a Lucas, pero no soportaba tenerlo aquí impregnado alguien tenía que saberlo.

Sí estuviera en la casa de hogar probablemente no tendría que llorar demasiado en el cuarto cuando iba a tener a cada niño molestándome cariñosamente, ellos no sabían que era consolar pero con su intento bastaba. Decidí irme de ahí al momento que Lucas me dijo que era lo mejor alejarme, no tuve que dar demasiadas explicaciones al llegar lo que eso me sacaba un gran peso de encima.

Me encerré en mi habitación y comencé a coger mis cosas, todas comenzaron a volar por la habitación. No quería nada de esto, nada que me recordara a mi antigua vida, quería una vida nueva, que no tenga esto encima que me recuerde cada día el dolor que me causa. Me sentía sucia y engañada.

Saque toda mi ropa de las maletas y la esparcí por mi habitación, los libros de dibujo los rompí uno por uno y hoja por hoja. Cada dibujo que hice de él, cada frase que escribí sobre él estaba en todos mis cuadernos y odiaba eso. Odiaba sentirme así, como si nunca lo fuera arrancar de mi piel.

Liam fue y será el único que amaré por el resto de mi vida, pero debe entender que lo que me hizo no está en la lista de perdones. Estuve sola en ese hospital, perdí sola a ese bebé y él solo huyó porque probablemente estaba más asustado que yo. Pero odio más el hecho de que estamos así por su padre, mis marcas y sus heridas son gracias a Ryan y eso es algo que no podré olvidar fácilmente.

Estaba sola, en un momento cuando más lo necesitaba. Me acostumbré a su compañía siempre, a sus malos ratos o los míos. Y ahora lo único que me quedaba era seguir adelante sin un plan de vida, porque aunque fuera loco, mi plan de vida era él.

Me dejé caer de rodillas encima de un montón de papeles y calcetines, solloce apartándome el pelo de la cara llevándomelo atrás. Apenas y me había crecido, ni siquiera un cambio haría cambiar todo lo que me pasó.

Aferré las palmas a las hojas debajo de mí y cogí el cuaderno con cuidado donde tenía todos mis dibujos, tenía lo único que no me unía mi terrible sufrimiento y lo que encontraba como una salida.

Ojee las pocas hojas que quedaban y le eché un vistazo al primer dibujo que hice de él, una sombra fumando. Sollocé más y las lágrimas caían encima del dibujo, ¿Cuánto más tenía que soportar esto?

Arranqué la hoja y la arrugué entre mis dedos tirándola lejos, y así una por una hasta que estuvo vacía la libreta. Solo así me pude dar cuenta que habían tres páginas escritas, las hojas totalmente llenas con una letra que no era la mía.

Sorbí mi nariz y me arrastré hasta la primera hoja que lancé, letra cursiva y apenas que se entendía se tallaba entre las líneas en un muy largo mensaje. Cogí las otras dos, tenían más.

Era una carta.

Me acomodé en el piso sentada y acomodé las hojas, por orden y para que pudiera leer mejor a pesar de su mala caligrafía y arrugas.

Me lleve la palma a la boca, ¿Qué es esto?

"Comienzo explicándote el por qué estoy haciendo esto, sí esto llega a tus manos es porque probablemente no llegué a explicarme de frente. Por lo principal, sabes que te amo con mi vida y jamás quería que esto pasara..."