No happy endings for me? (Tom Hiddleston/ Benedict Cumberbatch Fan Fic)

Capitulo 20.

Cerré los ojos ante la noticia, la doctora me acaba de decir que las últimas sesiones de quimioterapia no habían funcionado y ahora mi pobre bebé necesitaba otro transplante. No podía lidiar con ello, era demasiado. Todo estaba mal para mi ahora, sólo quería tirarme al suelo y llorar.

¿Qué había hecho para merecer esto?

Me aparté de la doctora y de Benedict, que tenía los ojos llenos de preocupación y la boca un poco torcida. Ahora sólo quería que se fuera, que se largara todo el mundo me dejaran sola con mi bebé.

-¿Puedes avisarle a Thomas?- le avisé a Mel y me sorprendí por la calma en mi voz, por dentro me estaba destrozando de miedo. Ella me lanzó una mirada exasperada pero asintió de cualquier manera y se alejó para llamar por teléfono.

Le pedí a la doctora que me dejara ver a Ariana y me llevó hasta la habitación. Mi niña, mi pobre bebé estaba dormida, tenia tubos y mangeritas saliéndole por todo el cuerpo.

Mi corazón se apachurró y se me hizo un nudo en el estómago.

-Bebé.- logré decir mientras le acariciaba su cabecita. Sentía un horrible dolor en todo el cuerpo pero lo ignoré, no podía derrumbarme ahora que mi hija me necesitaba tanto.

Una enfermera entró a la habitación para verificar que el suero y los medicamentos estuvieran fluyendo bien. Se me acercó preocupada.

-¿Se encuentra bien?- me tomó de un hombro. Yo me limité a asentir sin apartar la vista de Ari.-No, no. Señora usted esta... bañada en sangre.

Asustada, Dirigí la mirada a donde me señalaba, tenía un pequeño charco de sangre a los pies. No tenía idea de qué sucedía. Tuve un mareo y la enfermera me sostuvo, mientras pedía una camilla para mi.

Lo siguiente que supe fue que estaba en el cuarto de examinacion.

Después de un rato, el doctor que me había examinado entró a la habitación y soltó un suspiro.

-Lo lamento tanto...

-¿Es lo que yo creo que es?- pregunté con voz monótona.-¿un aborto?

El doctor asintió lentamente. Yo asentí también y le pedí que me dejara sola. Me encogí en la cama y me rompí. Lloré hasta quedarme seca. Me empezaba a odiar.

-Alex- escuché que me llamaban, abrí los ojos cuando sentí que me tomaban de la mano. Era Ben

-Benedict.- le respondí sentándome en la camilla.- Lo lamento tanto. En serio...

-Tranquila, tranquila.- me abrazó fuertemente, su voz sonaba triste.

-Perdóname, por favor.

-No es tu culpa cariño.- empezó a llorar también y nos abrazamos más fuerte.-No es tu culpa.- repitió.

-Si lo es, porque... No puedo hacer las cosas bien.- dije limpiándome las mejillas.- Primero Ariana, después nosotros y luego esto. ¿Es que acaso estoy pagando mis pecados?

En ese momento Benedict empezó a reírse descontroladamente.

-¿Qué? ¿De qué te ríes? Acabo de perder un hijo tuyo, maldito estúpido.- dije fulminándolo con la mirada.

-¡Dios! Eres tan dramática.- Se separó de mi.- ¿Cómo puedes culparte de no hacer bien las cosas? Nada fue tu culpa, son sólo... Eventos desafortunados.- seguía riendo.

-Benedict, esto es serio. Acabo de perder un bebé tuyo.

-Y me duele en el alma como no tienes una idea.-dijo acercándose nuevamente y tomándome por los hombros y clavó sus ojos multicolor en los míos.-Pero no hay nada que podamos hacer para traerlo de vuelta. Me hubiera encantado tener un hijo.- supe que decía la verdad al sumergirme en su mirada.