22.- Y tú...¿A qué le temes?

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Existen momentos en la vida en que todo es decisivo e importante, en que sientes que cada paso que das va a repercutir en el futuro de todo tu entorno.

Así se sentía Cas.

Dejar todo en orden en la editorial no tomó más de cinco días; su hermana era totalmente capaz de guiarlo todo en Inglaterra, mientras él lo supervisaba a la distancia.

Mucho más difícil fue arreglar todo en casa. Sentarse a hablar con la señora Riggs y Fergus acerca de su ausencia. Por supuesto ambos se alegraban de la felicidad de su patrón, pero les angustiaba el inminente desempleo. Cas los sorprendió gratamente con propuestas de trabajo, que de ser aceptadas, se harían efectivas apenas el saliera de Londres. Anna tomaría a Fergus como su chofer personal, manteniendo su paga y condiciones laborales, a lo que este aceptó de manera inmediata.

El caso de la señora Riggs era diferente ya que Cas recibió dos ofertas de trabajo, ama de llaves para uno de sus socios o cocinera en un restaurante perteneciente a Balthazar, por lo que debía ser ella la que decidiera cuál tomar. Optó por trabajar con Balthazar, a quien conocía hace muchos años, debido a su amistad con Castiel; el hombre siempre había alabado las habilidades culinarias de la mujer y ella a su vez lo tenía bien considerado por ser un buen amigo de su jefe.

- Lo vamos a extrañar señor- Dijo Fergus, siempre con su solemne voz.

- Lo vamos a extrañar señor- Dijo Fergus, siempre con su solemne voz

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- Yo solo quiero desearle mucha felicidad en América, señor. Dean es un buen hombre y se ve que le tiene mucho aprecio- La señora Riggs hablaba aguantando las lágrimas, cosa extraña ya que la mujer siempre era contenida en sus emociones -Me alegra mucho volver a verlo feliz- Dicho esto último, guardó silencio, limpiando un par de lágrimas con disimulo.

 Dean es un buen hombre y se ve que le tiene mucho aprecio- La señora Riggs hablaba aguantando las lágrimas, cosa extraña ya que la mujer siempre era contenida en sus emociones -Me alegra mucho volver a verlo feliz- Dicho esto último, guardó silen...

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- Se los agradezco mucho, a ambos. Por su lealtad y confianza. Lo que necesiten, no duden en llamarme; ustedes son parte de mi familia, y siempre quiero que estén bien- Cas le dió un fuerte apretón de manos a Fergus y un gran abrazo a la señora Riggs, prometiendoles a ambos que volvería pronto, aunque eso, ni siquiera él lo sabía.

Luego se dirigió al estacionamiento, donde Jack estaba guardando sus últimas cosas en el Jeep. Cas insistió en que lo llevara y dejara su auto estacionado en la mansión, Jack siempre lo había amado por lo que aceptó el ofrecimiento de su padre, sin chistar. Jack terminó de cargar el vehículo y cerró la cajuela con un ruido sordo que le traspasó el corazón. Cuando se giró hacia donde estaba su padre, no pudo evitar que un nudo de angustia se formara en su garganta. Su padre había viajado muchas veces fuera de Inglaterra, pero era la primera vez que no tenía fecha de retorno.

A través de las nubesTempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang