«Our Space» [MysticShock]

Capítulo 17

**

Varios meses atrás, justo cuando se lo habían llevado, Stephen junto a las personas los hombres que le tomaron “Prisionero", habían llegado a un lugar bastante peculiar, era como una especie de templo, todo estaba bastante oscuro, las pocas luces que se veían eran de velas que apenas y soltaban pequeños rayos de luz. Esposado y a empujones fue llevado a un amplió salón que no tenía nada en su interior, sólo era un salón con una luz tenue y paredes con variaciones de colores ocre y dorado. Cuando los hombres que le sostenían le soltaron él se batuqueó un poco. Esperó a que alguien apareciera, era obvio que alguien tenía que salir a su encuentro. Cuando apareció frente a él un joven.

—¡Stephen  Strange! El hombre que está de moda. -Habló el hombre frente al él-

—Ah, es interesante.  Sigo siendo alguien reconocido pero… ¿Quién eres tú?

—Oh, eso no importa. Digamos que yo solo soy un mensajero de alguien más grande. -Stephen lanzó una risita- No creo que luego esto te parezca gracioso.

—Es que siempre es la misma historia. Un mensajero que hace el trabajo de alguien más, y cuando llega el momento, este alguien le traiciona.

—Esto será así.  Estoy seguro.

—Bueno, mucha seguridad para algo tan inestable como confiar en “Villanos”, lo digo entre comillas. – Este hombre se acercó  a él Y le golpeó el rostro- ¿Qué? ¿Esto qué es? ¿Simple amedrentamiento? ¿Por qué no vamos al grano? ¿Qué quieres?

—Deshacerme de todos los hechiceros,  que todos desaparezcan de esta dimensión, al igual que lo han hecho en otras dimensiones.  -La cara de Stephen fue de desconcierto-

—Ok, voy a admitir que todo esto me aturde. Y tampoco voy a negar que me parece una total locura, pero en este momento  sólo me importa una cosa y esa es mi futura familia, así que te la voy a poner bastante sencilla, porque todos saben que todo esto no lo quería. Así que sí… ¿Quieres que ya no hayan hechiceros? Pueden quedarse con todo lo que tengo, renuncio a todo lo que significa ser un hechicero.  -Cuando Strange dijo esto el hombre empezó a reírse-

—¿Piensas que es tan sencillo?  No puedes solamente renunciar y ya. -Caminaba alrededor de Strange- Y menos teniendo lo que tienes.

—¿Y qué se supone que es lo que tengo? -Preguntó como quien no quiere la cosa-

—Lo sabes muy bien. Esa energía proveniente de la magia negra… ¿Cómo le llaman? ¿Señor Agonía? -Strange torció la boca y luego negó-

—Wong es un chismoso ¿Es por él  que estoy aquí?

—No, en realidad no. Pero dio ese dato vital para todo esto.

—Vuelvo a decirlo. Esto me da igual, no me importa. Sólo quiero estar con Darcy, estar junto a ella cuando nazca nuestro hijo. Es lo único que me importa.

—Oww, suena tan tierno. Pero lastimosamente eso no va a pasar. El hechicero supremo no puede dejar de serlo así como así.  Pero tampoco conviene que estés por ahí,  y el asesinato, no es una opción. Por lo menos no para mi. Entonces, hay dos opciones, te unes a nosotros en nuestro propósito de liberar a todos de la magia descontrolada,  o te quedas aquí hasta que ya no estés por causas naturales. Es así de sencillo.

**

Regresando al presente,  Stephen estaba  en el santuario caminando de un lado al otro, contando a Wong todo lo que había pasado.

—Entonces estuve ahí todo ese tiempo, estuve encerrado y me torturaban, honestamente no sé para qué.  Quizás para que cediera y me uniera a ellos. Fueron días duros en los que sólo pensaba en Darcy y en el bebé,  en la bebé.  Sólo pensaba en una forma de salir de ahí y estar con ellas. Hasta que se me ocurrió esa idea sin saber que iba a funcionar,  sin saber lo que iba a pasar. Pero la propuse, y aceptaron, aceptaron borrar de mi memoria todo lo que tuviese que ver con la magia. Sé que fue una locura, pero yo solo pensaba en volver. En todo el tiempo que estuve ahí intentaba buscar una respuesta a lo que estaban tramando, pero nunca la encontré.

—Pero ¿Lo viste?

—¿A Imperator? Sí, fue él quien lo hizo, quien quitó mis recuerdos. Es raro, parece que no tiene magia, pero la absorbe o… no lo sé.  Bueno, tu lo conoces.

—Así es, es un tipo peligroso. Te necesitamos Strange, eres el único que puede hacer algo contra él.  Quien puede hacer algo para que todo regrese a lo que era, o al menos una forma de lo que era.

—No puedo hacerlo. He perdido la práctica por decirlo de alguna forma. No puedo conjurar ni un escudo -Hizo el intento- ¿Ves? Apenas unas chispas. Y lo peor de esta situación es que tengo que buscar a Darcy y no tengo idea de dónde está. Me vuelve loco pensar en eso, pensar en que todo esto es mi culpa. -Empezó a dar vueltas, estaba angustiado y no sabía que hacer- Sí tan sólo hubiese sido capaz de ver más allá cuando ella me lo dijo, ahorita, no estaría en esta situación. 

—Creo que puedo ayudarte. Acompáñame -Wong subió las escaleras y entró  a aquella habitación llena de reliquias.- Esto no puede usarlo alguien que no tenga mucha experiencia, pero tu sabes un poco de todo, incluyendo un entrenamiento de artes marciales. Esto te va a ayudar a canalizar tu magia, tus habilidades. Y además es una muy buena arma. -Stephen se quedó viendo con mucha sorpresa aquel instrumento que le hacía entrega Wong- Y hay que agregar que tienes una vieja amiga que puede ayudarte. -Le hizo una seña hacia la esquina en donde estaba la capa. Stephen sonrió y se acercó-

—Tengo que hacerlo, no importa lo que cueste. Voy a hacerlo.