El asesino de ojos azules

31. DIARIO ROJO

Luego del beso, ambos pusieron las botanas a un lado y comezaron a comer otra cosa. Josh abrazaba y acarciaba a Adrien mientras este empezaba a quitarle la camiseta. Todo fluia con naturalidad en una danza erótica prohibida, cada uno se movia al ritmo del otro y el latir de sus corazones estaba sincronizado. Los labios de Josh besaban el blanco cuello de Adrien quien no contenia lo que sentia y con suaves suspiros denotaba su excitación a la vez que sus cuerpos se hacian uno a medida aumentaba la pasión.

Adrien tomó iniciativa, y comenzó a desvetir a Josh mientras este seguia besando su torzo desnudo. Cuando ambos estaban sin camisas, sus manos acariciaban su piel mutuamente mientras el calor hacia que sus poros comenzaran a transpirar.  En una breve pausa, ambos se vieron directo a los ojos para así darse cuenta del deleite del otro. Adrien acariciò suavemente el rostro de Josh quien respondió de la misma manera y a su vez besó nuevamente a Adrien quien correspondió.

Adrien se recostó y Josh se posó sobre el sobre él para luego comenzar a besar lentamente su cuerpo desde el cuello a la cintura. Los labios húmedos de Josh encendían a Adrien quien excitado se aferraba a la sabanas. Josh siguió besándolo hasta llegar a las caderas para después quitarle sus pantalones con delicadeza, mientras,  Adrien coopero quitándose los zapatos y los calcetines.

Antes de volver a la acción, y después de dejar a Adrien casi desnudo, él procedió a desvestirse quedando solamente en ropa interior. Casi como Dios los  trajo al mundo, ambos se besaban y acariciaban disfrutando de cada centímetro de piel del otro. Las manos de Adrien acariciaban los firmes muslos de Josh mientras sus rostros se juntaban en profundos besos. Josh se detuvo un momento y bajó nuevamente a la cintura de Adrien para frotar con su rostro el ya "encendido" miembro viril de su compañero quien se aferraba a la cama mientras suaves suspiros esbozaban de su boca.

Adrien hizo que Josh se detuviera un momento y le pidió que se quitara la única prenda de ropa que le quedaba para así poder admirar por completo su  belleza. Sin vacilar, este se puso de pie frente a la cama y lentamente se terminó de desvestir ante la mirada de fascinación de su compañero.

Sin quedarse atrás, el también se quitó su prenda interior, se puso de pie, se acercó a Josh y comenzó a besarlo mientras lo abrazaba. Sus manos se movían sobre el cuerpo de su opuesto, y el sudor que empezaba a brotar de sus cuerpos era el fruto del intenso placer entre ambos. Sus sentimientos eran correspondidos, y se notaba en la pasión con la que hacían el amor.  Un poco de felación terminó de hacer de la velada algo perfecto y sin haber penetración lograron llegar al clímax final.

Tras culminar su coito, Adrien yacía recostado sobre el pecho de Josh quien suavemente acariaba su alborotado cabello mientras pensaba en lo que haría con él después.

Del otro lado de la ciudad, Adam estaba en casa de "JM" quien lo había citado para revelarle un inesperada confesión.

—quiero que leas esto —ordenó JM a Adam

—¿que se supone que es? —preguntó viendo el extraño libro rojo

—leelo, espero que con eso no queden dudas sobre a quien conseguiste de amigo —. inquirió —Cuando lo leas vuelve y dime que te pareció

Luego de darle el libro rojo, Adam se marchó a casa para leer comodamente lo que contenia el intrigante cuaderno. Al llegar, cerró todo con llave, se fue a su habitación y comenzó su lectura.

Querido diario

Cada día que pasa una parte de mi va muriendo, estoy dejando atrás lo que me hacia débil y es momento de hacer que los demás se sientan como yo.  Aun trato de imaginar como replicar el dolor del alma pero eso es prácticamente imposible, solo la tortura se puede asemejar a lo que sentí pero nunca lo igualará. 

Los cuchillos nunca serán tan afilados como las palabras y el veneno nunca será más toxico que sus comentarios. El sufrimiento ajeno no hará que cambien las cosas y tampoco me devolverá la felicidad, pero si yo no pude ser feliz, nadie más lo será.

Derramarán las mismas lagrimas que derramé, sangraran tal cual lo hice, gritaran y querrán escapar pero no tendrán salvación. Vivirán el infierno en carne propia antes de terminar allí. Nadie podrá escucharlos, nadie podrá ayudarlos, nadie estará con ellos y nada podrá evitarlo. Es momento que sientan lo que es el verdadero dolor, tal como yo lo sufrí.

Querido diario

Al fin supe lo que era tener el poder. La adrenalina fluía por mis venas y la sangre goteaba de mis manos. Por primera vez supe lo que se sentía acabar con la vida de alguien más, pude ver el dolor, la angustia y el sufrimiento en alguien que no era yo, y pude saber que se siente estar vivo de nuevo.

Suplicaban que me detuviera pero no lo hice, nadie me escucho y nadie los escucho a ellos. Fue divertido sentir como el cuchillo perforaba su piel y hacia que la sangre emergiera como el elixir que sanaria mis heridas. Sus miradas agonizantes imploraban ayuda, tal como alguna vez lo hizo la mia pero a nadie le importó y ahora a mi tampoco me importa. Su llanto era la satisfaccion de saber que en esta vida todos pagan por sus actos, pero apenas eran los primeros, es momento de empezar la caceria.

Querido diario

La unica persona en la que al fin confiaba ahora está muerta pero me ha dejado un gran legado por seguir, un legado que me ayudará a cobrar venganza por cada una de mis lagrimas derramadas.

Querido diario

La primera presa ha caido y no se imagina lo que le haré, destruiré su interior y hare que sienta el arder de la venganza y tamaño del odio que siento. No podrá escapar. La sangre empezó a correr y seguirá asi hasta que la copa rebalse y mi sed haya sido saciada. 

Luego de leer ese ultimo parrafo, Adam cerró el libro de golpe ya que alguien estaba tocando su puerta. Algo nervioso se acercó a esta, y al abrirla, se encontró con alguien que aunque no lo conocia a él, conocia a su amigo JM, y de hecho, lo estaba buscando.