Capítulo 26

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¿Nunca se sintieron con una nueva sensación en el pecho?, yo me sentía justo así ahora mismo.

Quedaba un día para navidad y todavía no lograba saber que cosas le gustaban a Taehyung y eso me preocupaba, quería darle un regalo especial.

Taehyung se encontraba en la cocina ahora, le enseñé a hacer waffles y creo que les salen mejor que los míos. Es un buen chef ahora que lo pienso, ya está; se dijo.

De la conversación de ayer a la noche nadie habló cuándo nos levantamos a hacer el desayuno, pero yo sentía un calor en el pecho que nadie ni nada me lo podía sacar. Después de que me dijo eso, que yo era su luz sentí elefantes tratando de hacer una maratón en mi estómago y la típica punzada en el pecho.

Decir que me estaba empezando a gustar Taehyung es algo nuevo para mí, por qué desde que terminé con Baekhyun nunca más sentí nada por nadie. Es como si hubiese hecho una coraza que Tae logró romper.

«Ve y la luz de quién tu ames en un futuro»

Recuerdo las palabras de Baekhyun, tenía razón y le agradezco por habermelo dicho.

Sin embargo, no amaba a Tae por qué es una gran palabra y también había algo que me desanimaba un poco. Qué Taehyung se enterara y nuestra amistad se fuera a la mierda.

Pero acá estaba yo, esperando a que Taehyung me trajera el waffle para desayunar, él se quedaría en casa averiguando recetas para navidad y yo le mentí diciéndole que tenía una prenda en la tintorería que olvidé para poder recorrer otros lugares para conseguir un regalo.

Desayunamos en silencio cada uno por lo suyo y yo me puse un abrigo junto con mi bufanda para poder salir a buscar un regalo para Taehyung.

—Espera— Tae toma de mi brazo antes de que pueda girar el picaporte para salir— Tengo que tirar la basura...

Tae se pone su abrigo azul y salimos juntos bajando las escaleras. Salimos del edificio y vemos cómo un señor lleva varias correas de perros.

Miro a Tae y a éste le brillan los ojos de la emoción, corre hacía los perros y los abraza, y les da besos en la frente.

—¿Te gustan muchos los perros?— Pregunto y Tae asiente parándose y dejando al señor seguir su camino.

—Tuve un perro llamado Blue cuándo era niño pero murió de depresión por todo lo que pasó en mi vida — Tae suspira y hace un puchero— Los animales deberían ser eternos, ¿No crees?

—Lo creo profundamente...

Tae subió y suspire haciendo que saliera humo de mi boca por el frío que hacia, las calles estaban repletas de nieve y los coches apenas podías ver el parabrisas.

Caminé por toda la ciudad buscando tiendas de ropa, de joyas pero nada bonito conseguí. Hasta que una idea se me cruzó por mi cabeza.

¿Y si le regalo un perro a Taehyung? ¿Y si lo alimenta con medialunas?

Me pareció una gran idea, conocía un lugar dónde podía adoptar mascotas, era cuestión de ver cuál era la más bonita o bonito. Caminé hasta llegar a la estación de autobús para tomar uno y que se me haga más fácil llegar a mi destino.

Una vez que llego a mi destino, bajo y la avenida esta repleta de personas y me es imposible casi empujar para poder aunque sea dar algún paso. Logro divisar el lugar dónde adoptan mascotas y entro saludando a la recepcionista.

—¿Viene por una mascotita?— Pregunta y yo asiento.— Sigame, por aquí.

Entramos a un cuarto inmenso, habían mascotas hermosas por cualquier lado que mires. Gatos chiquitos y adorables, habían hámsteres gorditos y me daban ganas de apachurrarlos todos.

𝗠𝗜 𝗟𝗨𝗭 ᵗᵃᵉᵏᵒᵒᵏWhere stories live. Discover now