Capítulo 40

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-Voy a matarla...- murmuró Janet por lo bajo, siendo oída únicamente por Carol y Natasha.

-Parece feliz de poder tocar a alguien ahora que está utilizando el invento de Peter y mi hija- nadando hasta ellas, Sue dijo.

-La hija de ustedes dos querrás decir, no? – burlonamente se expresó la mini infante con piel jade.

-Cállate, Jen- roja de solo pensarlo, ordenó Invisible Woman.

-Dejando eso de lado, yo digo que tenemos que hacer algo con ella- frunciendo el ceño al ver como la mutante parecía disfrutar de tocar los músculos de su araña, habló Black Widow.

No obstante, ajeno a toda la disputa que estaban llevando la comunidad de heroínas y villanas afectadas por Kang el Conquistador, Peter se contagiaba de la alegría que su compañera de juegos tenía. Rogue gritaba y movía sus brazos descubiertos contra Kitty, sintiendo por primera vez en años el cálido roce humano sin provocar daño alguno, agachándose por breves segundos para mirar las enormes lentes blancas del cabeza de red con una enorme sonrisa.

-Veo que te gustó el regalo- comento divertido el arácnido del grupo.

-Es maravilloso! Nunca pensé que algo como esto existiría algún día! – la fémina chilló, mirando el brazalete mientras se bajaba de los hombros del vigilante.

-Cómo le dije a Psylocke, esos dos inhibidores fueron creados actualmente para ustedes específicamente. Logan me ha dicho lo mucho que lamentaban no poder disfrutar de cosas simples como ver el sol o tocar a alguien, por lo que ver que funcionan me pone de buen ánim...MPPP!!! – estaba diciendo Peter a Anna Marie tras girarse para verle cara, solo para ser interrumpido cuando esta le tomó las mejillas y volvió a besarle delante de todos.

Las pequeñas y adolescentes que habían acompañado al científico hasta el Instituto Xavier rechinaban sus dientes al punto de generar un perturbador ruido que espantaba los Bamfs. Incluso Erik se percató que debía bajar a su hija para permitirle nadar peligrosamente hasta el hombre que había estado cuidándola todos estos días atrás, empezando a pensar en una excusa para darle a Storm cuando descubra que le faltaba una colega mutante al regresar de su "viaje recreativo" que pidió.

-Te has ganado eso y mucho más, cariño- coquetamente se explayó la sureña, guiñando un ojo y picoteando de nuevo los labios entreabiertos por la sorpresa del Parker, para posteriormente retirarse a jugar con los demás habitantes de la Mansión X.

Despabilándose, la araña recordó que aún había una persona que restaba para jugar como lo venía haciendo. Cuando estaba a punto de buscar a Elizabeth, divisó a un rubio que miraba embobado a una lejana Rachel que continuaba castigada en el interior del establecimiento, haciéndole reír por lo bajo mientras se acercaba a este.

-Por qué no le invitas a nadar contigo? – sacudiéndole los húmedos mechones dorados, cuestionó la araña.

-Eh!? Qué!? Invitar a quién, tío Peter? – sorprendido hasta la médula al escuchar la voz del tótem, trató de hacerse el desentendido el hijo de Sue Storm.

-Vamos, Franklin. No me vengas con ese acto. Se nota a la legua que te gusta esa muchacha- bromeó el adulto.

-No...No digas cosas! – poniéndose rojo al punto de llamar la atención de su hermana, exclamó el joven.

-Qué le pasa a mi hermano? – quiso saber la joven genio.

-Le gusta Rachel- declaró Peter mientras alejaba con una sola mano al avergonzado primogénito de Invisible Woman.

-La chica que es mala contigo? – curiosa, volvió a preguntar Valeria.

-Ella misma. Yo digo que se acerque y la invite a la piscina. Tú que piensas? – con una mueca que buscaba complicidad, interrogó el Parker.

Niñeros por obligación!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora