Azar del Corazón (En Edición)

Corazon-6

♦♣♥ Azar del corazón ♠♥🌷

Capítulo  6

Una semana ha pasado, Darién todos los días se le ve entrando a la casa de lo Tsukino y los chismorreos en torno a sus constantes visitas no se han hecho esperar. Setsuna a actuado sería y distante con su hermana a pesar de comprender que ella no es la culpable de los sentimientos de él joven Chiba.

-Setsuna como me veo- Serena se arreglaba cada vez con más esmeró inconsciente
-Bien como siempre hermana- contesta sin siquiera mirarla
-Setsuna me he puesto el broche que me obsequiaste  en el cabello mira- Serena señalo con el dedo índice rígido exageradamente, era un broche dorado con una pequeña mariposa, desde niña a Serena le gustaba los cuentos infantiles y las mariposas eran las que más les gustaban eran ligeras y de colores pero sobretodo volaban.
-Lo siento no la había notado, te va bien- Setsuna sabía que no tenía motivos para estar molesta con Serena ella jamás tuvo conocimiento de que le había surgido un interés por el hijo de jefe, cuando tuvo la oportunidad de decírselo no lo hizo ahora era tarde.
-Que es lo que te ocurre desde el día en que vino el señor Artemis has estado bastante distante conmigo dime he hecho algo que te disgusto, si es así, dímelo por favor- Serena quería demasiado a Setsuna, le dolía su seriedad y crueldad con que se comportaba. Y notaba que era solo con ella.
-Serena, no has hecho nada, es solo que, recuerdas que te comenté sobre un joven al que le había colocado cierto interés- suspiró tal vez si se lo contaba se sentiría más liberada.
-A la cosa va por ahí- Serena sonrió- cuéntame Setsuna muero de curiosidad por saber quién es él- Setsuna respiro profundo, dudo por un segundo mientras veía la expectativa en los pequeños ojos azules de Serena
-Serena me ha gustado mucho, no puedo evitarlo, pero es un imposible, él se ha fijado en alguien más- desvió la mirada
-Pues que tonto ha sido, al no notar lo bella que eres pero Setsuna dime de una vez quien es él, ¿cómo se llama?- despertó su curiosidad
-Serena me gusta…

-Serena- Kenji entro abruptamente en la sala
-Dígame padre- Serena giro rápidamente
-Es necesario que hable contigo!- la tonalidad de Kenji implicaba ansiedad
-Papá, puede ser en un momento solo es que estoy conversando con Setsuna de algo bastante imperdible- Kenji negó con la cabeza.
-Está bien Serena al final no importa, como te he dicho él se ha fijado en alguien más- dijo Setsuna para evitar hablar, tal vez era una señal que siempre la interrumpieran
-Enserio está bien, te rendirás sin dar pelea
-No puedo ir a la guerra contra personas buenas, que se merecen cosas buenas
-Eres muy considerada, pero muy tonta, si él te gusta y crees que pueda ser tu felicidad, deberías intentar conquistarlo
-Sabes que las cosas no funcionan así, deja de soñar con tus cuentos  y finales felices, pocas veces tenemos la fortuna de casarnos por amor y nosotras ya perdimos esa oportunidad. Las mujeres tenemos que rogar por un hombre estable y respetuoso se fije en nosotras, sin amor, los sentimientos no son indispensable en la mayoría de los casos, eso deberías saberlo ya Serena
-Setsuna!- la miro asombrada.
-Setsuna tiene razón hija y vamos esto es urgente.
-Padre yo me voy, habla con Serena aquí- Setsuna salió sin mirarla, sabía cuál era la urgencia de su padre y no quería escuchar nuevamente la reiteración de intención que tenía Darién por ella, Setsuna se preguntaba cómo era posible que se hubiese enamorado tanto, con tan solo verlo, no le conocía ni siquiera había tenido la posibilidad de intercambiar una palabra, pero su corazón estaba rebosante de un sentimiento implacable que cada vez que lo observaba por la ventana de su habitación o por la de la cocina, quería correr y abalanzarse en su brazos probar esos labios carnosos y perderse en su virilidad, Setsuna no sabía de donde le brotaban esos deseos pero le amaba, le amaba con locura y él, había escogido a Serena, su hermana menor, no podía creer en tan mala fortuna.

-Serena sabes no he hablado contigo por qué he querido que pasen días de lo que sucedió con... Seiya,
-Papá por favor olvidemos el tema ya estoy bien, estoy saliendo adelante- Serena se enfadaba con tan solo escuchar su nombre incluso con tan solo pensarlo aunque esos no lo podía evitar.
-¿Piensas en buscar algún pretendiente Serena u optaras por olvidar el asunto y ser como tú hermana?- el señor Tsukino suavizaba el terreno.
-Padre no lo he pensado y no quiero hacerlo, quiero que la vida continúe, que siga girando que me haga olvidar que algún día conocí a los Kou, y que la vida misma me sorprenda algún día.
-¿No has visitado a Rei?- Serena se sintió incómoda y pésima, no debería tener nada en contra de Rei pero lo mejor era no ver a nadie que le recordara o preguntara sobre su ex prometido
-No he podido si quiera, salir a la calle padre todos me señalan y me miran con lástima si no con desprecio, como si una mujer en cuanto dejara de ser virgen dejara de ser mujer, comprendo que la virtud de una mujer es un tesoro valioso pero yo aún lo conservo y me ofende que todos se hayan tragado las palabras de Seiya, y creyeran todas sus calumnias, la gente es hipócrita, juzga con facilidad, sin dejar una escasa opción de defensa. Fui acusada y condenada en minutos- Kenji sentía el corazón roto, totalmente hecho pedazos, pero ya no hay marcha atrás lo hecho, hecho estaba así que resopló y tomo la batuta de la conversación
-¿Recuerdas que el señor Artemis vino a conversar conmigo?- Kenji estaba nervioso pero tranquilo a estas alturas su hija estaría en una situación peor.
-Como no recordaría eso padre, no siempre recibimos visitas de tal importancia!
-Bien, ven siéntate un momento junto a mí- Serena camino, tomando la mano que su padre le extendía- he querido que te tomaras el tiempo, esta es una decisión muy importante
-¿Decisión de que padre?- lo miro con intriga.
-Él joven Chiba no te ha contado nada, él ha venido a verte todos los días ha sido muy atento...
-Si padre el señor Chiba me ayuda a olvidar mi desgracia por el breve tiempo que permanece aquí
-¿Te ayuda a olvidar, breve tiempo?, ¿Se te hace corto el tiempo en que estás con él?
-Bueno papá, me hace reír y conversa conmigo como su igual, me explica algunos problemas que tiene entorno al clan, cuestiones que me parece no conversaría con una mujer pero a mí me complace, no profundiza mucho pero me da detalles, eso me hace sentir bien, me ha ayudado a no estar todo el tiempo deprimida, a no quedarme horas enteras en la cama- una sonrisa muy tímida broto en los labios rosados de Serena
-Y tu querida eres feliz así, ¿te da satisfacción el modo en que te trata?- Kenji la estaba desesperado con tantas preguntas y nada claro quería saber que era lo que le era tan urgente.
-Dígalo ya padre, por Dios deje de darle vueltas al asunto dígame de una vez que es lo que ha venido a decirme
-El señor Artemis me ha pedido tu mano en matrimonio para su único heredero- Serena en un impulso involuntario y  catatónico, respingo de su asiento
-¿Que ha dicho padre?- no creía haber escuchado bien.
-Él joven Chiba te ha escogido como esposa querida Serena- esto si era un tremendo problema que ella no quisiera, si se rehusaba tendría que contarle sobre la deuda que Chiba pago y que si no se casa bueno ni pensarlo ya.
-No padre de ninguna manera no quiero- las lágrimas hicieron su trabajo inundando sus ojos y entristeciéndolos. Serena albergaba en su corazón la esperanza de que Seiya regresara le diera una explicación la cual parecía dispuesta a creer fuera cual fuese. A pesar del odio que sentía por él.
-Pero por qué hija que es lo que...- lo interrumpió
-¿Por qué?... Por qué...por qué no,- grito con ansiedad
-¿Crees que va volverá verdad?- pregunto con frialdad Kenji- pues temo decepcionarte él no va volver Serena, te ha engañado, nos ha engañado, eres capaz de perdonarlo de aceptarlo de nuevo en tu vida.
-N-no... No lo sé, no sé qué tan fuerte soy, no sé cuánta dignidad podría perder por amor- camino dándole la espalda a su padre se sentía tan avergonzada por no admitir que lo odiaba pero lo amaba y  lo esperaba aún.
-Amor ¿aún lo amas?- pregunto con temor
-Claro, padre que esperaba que después de descubrir que me había sido infiel y de que me  difamara, lo odiaría, yo también desearía odiarlo, y sé que debería hacerlo pero no puedo, no puedo sentir odio por quién lo amo tanto padre, lo que me pide usted y lo que me exige mi cabeza hacen que me desquicie, mi corazón tiene una fuerza implacable que me gobierna por completo- Serena sollozo
-Serena piénsalo, recuerda que nadie pedirá tu mano una vez más- Kenji vería la manera de convencerla sin llegar a confesarle el por qué tiene que casarse con él.
-Pero, padre yo no lo amo, quiero a Seiya quiero verlo, quiero que me explique qué me asegure que todo es una calumnia, una farsa que me tome en sus brazos y me entibie el corazón padre yo lo amo...amo a Seiya Kou maldita sea- Serena parecía una niña berrinchuda  gritando lo que su corazón decía
-Serena…-su padre trataba de calmarla