Azar del Corazón (En Edición)

Azar_23

♦♣♥ Azar del corazón ♠♥🌷

Capítulo 23

Darién tomaba lentamente de su vaso, la dulce bebida que hoy en específico parecía saber a encanto, al fin sentía que podía disfrutar de los placeres de la vida, su vida ahora tenía sentido, una razón de ser. No había nada que le pudiese pedir a la vida, ni recriminarle. Eras un hombre pleno.
Pensaba únicamente en ese pedacito de cielo que crecía en el vientre de su mujer, y en las ganas que tenía de ir a dormir con ella. Pero su padre quería hablar con él y tal vez le despejaría las duda del porque el apuro de casarse.
-¿Y ya has pensado Darién?- pregunto Artemis sacando a Darién de sus pensamientos
-Dime padre, ¿sobre qué?- no entendía a que se refería.
-Ya has pensado en el nombre- replico Artemis
-¿El nombre?
-Si Darién que nombre llevara tu hijo- Artemis tomo asiento junto a él en el cómodo sofá acojinado
-No aun no, quiero discutirlo con ella, quiero que Serena sienta esa misma alegría que este acuerdo, que disfrutemos juntos cada etapa de este embarazo… bueno y si en un futuro podemos concebir más estaré encantado de disfrutarlos también
-Un paso a la vez Darién, es una mujer una yegua, debes tenerle consideración a ella
-No solo la considerare, le cumpliré sus caprichos y cada una de sus necesidades padre. Seré su sirviente estaré  a sus pies, ella me dará lo más valioso que podre tener en la vida padre- la sensibilidad se había apoderado también de Darién, y solo podía imaginar la felicidad que es pequeño ser le daría a su vida. No concebía ya otro futuro ninguno donde no estuviera su bebe.
-Me alegro, veo que has madurado, no sabes lo orgulloso que estoy de ti- se notaba el orgullo
-Te imaginas padre, una pequeña personita corriendo por todo el castillo- sonrió con ilusión
-Si me imagino un diablillo. Así como tú eras todo un travieso
-No, tendrá la prudencia de su madre, la bondad y la mirada vibrante, será un niño bien criado
-Insinúas que yo no te he criado bien Darién
-Hicieron lo que pudieron
-Hicimos más de lo que pudimos, Darién te mimo como no tienes una idea, nunca te lo hemos dicho, pero nosotros quisimos más hijos Darién, pero cuando tu naciste algo pareció salir mal fuiste un parto complicado. El caso es que tu madre jamás pudo embarazarse de nuevo, ella quería un damita con quien compartir los gustos por la ropa, mostrarle los modales y como conquistar a un caballero con tan solo una mirada.
-¿Lo internaron?- cuestiono Darién
-Claro que lo intentamos, y lo logramos, pero a la semana de que nos enteramos, ella perdió al bebe, fueron días de mucha tristeza- sus ojos vago una sombra de tristeza
-Algo recuerdo, ver a mi madre llorando, muy desconsolada
-Y fuiste tú quien me saco, de mi triste Darién- intervino Luna no pudo evitar curiosear
-Madre- le sorprendió su llegada.
-Tú me miraste Darién y me hiciste ver que te tenía a ti, y por ti tenía que salir adelante, eres mi más grande bendición, y estuve a punto de desperdiciarte hijo. Perdí un bebe, pero todo ese amor que pude haberle dado a ese niño lo recargue en ti, me dedique en cuerpo y alma para que siempre sonrieras pero también para que aprendieras a ser noble, humilde, me siento orgullosa de en quien te has convertido, y quiero felicitarte porque me tendrás la más grandes bendiciones- lo miro con amor de madre.
-Te amo mamá- le dio un beso en la frente 
-Yo a ti Darién- lo rodeo con sus brazos
-Ya se han puesto muy sentimentales, esto es una celebración, estamos brindando por que habrá un pequeño Chiba en esta casa- replico Artemis con alegría
-Y si fuera una pequeña Tsukino- objeto Luna
-De maravilla, no importa si es un caballerito o una damita será mi hijo mamá, mi hijo- grito con alegría Darién.
-Iré a la cocina ahora vuelvo, tengo un poco de sed- Luna salió con una sonrisa

Seiya atravesó el pequeño lago en una balsa, con Serena en total inconciencia, llegó al otro lado entrando en el bosque cargo a Serena en sus brazos y volvió a cargarla echándola en su hombro. Pensó que sería más fácil perder la pista a pie, sus huellas serian menos rastreable. E incluso era menos bullicio si andaba ligero. Ahora solo tenía que esconderse esa noche, por esa noche, que todo se viera tranquilo, esperaría un par de días y entonces la subiría a un carruaje y saldría dl pueblo, con ella. Todo estaba planeado pero todo por Rei el solo tenía que ejecutar el plan y por suerte ya tenía lo pecinal a Serena
Seiya estaba seguro que nadie lo seguía y seguro de que llevaba mucho de ventaja, anduvo a toda prisa y el mayor silencio. Se introdujo entre los arboles perdiéndose completamente en la penumbra.
Pero un plebeyo un muy joven hijo de uno de los peones vio y escucho la voz de la señora Serena viendo que no tenía la posibilidad de ir a avisar y que si no actuaba como debía perdería toda pista de la esposa de su patrón, con apenas doce años de edad, era un chiquillo vivas y valiente, tal vez se entrometía en algún peligro y sus padres le reprenderían por pegarles el susto que esa noche no dormiría en su habitación pero debía seguir al raptor, era su deber como sirviente del señor chiba.