Namikaze

Extra 1.5: Atadura vs destino

Gaara agachó la cabeza sumiso y entregado, pero más que por respeto hacía un género superior, era por costumbre y para evitarse problemas por su supuesta rebeldía, después de todo él era un simple y débil omega, algo peor que un esclavo dentro de la absurda jerarquía de su familia, conocida por solo engendrar alfas. Ser beta era mejor, se dijo al reconocer que le debía obediencia absoluta al alfa frente a él, un alfa cuyo nombre era desconocido, un alfa imponente y hasta donde recordaba, quince años más grande que él.

—Es un buen trato —aquel desconocido sonrió siniestro y con brusquedad tomó del mentón a Gaara, obligándolo a levantar la vista—. Él es un omega exótico —sonrió centrando su atención en Rasa—. ¿Dónde firmo?

—Joven Ichibi —Rasa sonrió señalando unas hojas sobre su escritorio—. Justo aquí y Gaara será completamente suyo, es una excelente garantía y le puedo asegurar que este negocio es el primero de muchos que firmaremos.

—Téngalo por seguro, y para hacerlo completamente legal, dentro de unos minutos llegara mi abogado —soltó a Gaara y comenzó a firmar las hojas, viendo su reloj de pulsera en cuanto terminó—. Él traerá el contrato de matrimonio, aunque el que me interesaba era este.

Su cuerpo tembló de rabia, pero en lugar de levantar el rostro y enfrentarlos para exigir sus derechos y pelear por su libertad, se mordió el interior de la mejilla hasta saborear su propia sangre, consciente de que si se atrevía a oponerse, el resultado sería peor porque de igual forma lo obligarían a casarse con un maldito alfa que comenzaba a odiar, un alfa cuya mirada siniestra y actitud osca le advertían que lo mejor era comportarse porque no podría escapar, no podía huir de él ni negarse a sus caprichos porque ahora era parte de su propiedad.

💋🍡💋

—No —Kankuro negó, mirando a Temari, quien suspiró rendida—. ¡Dije que no!

—Tsk tú dirás no, pero sabes que yo no le puedo negar nada cuando pone esa cara —deslizó una de sus manos por su largo cabello rubio—. Aunque sigo creyendo que lo mejor es que obedezcas.

—Temari —gruñó, sabiendo que frente a sus hermanos podía darse el lujo de ser él mismo y no un simple juguete de un alfa violento y alcohólico—. Tengo diecinueve años, he vivido toda mi vida encerrado bajo el yugo de un alfa, primero fue nuestro padre y ahora es Shukaku —llevó una mano hacía su cuello acariciando la marca que tanto repudiaba—. Si pudiera irme lo haría, pero estoy encadenado a él… solo quiero salir de esta casa y ser algo más que un simple juguete sexual. No me pasara nada.

Temari suspiró y se recargó completamente en el respaldo del sofá, ya estaba acostumbrada a las palabras bruscas y llenas de cruda realidad que utilizaba Gaara para describir su matrimonio, y es que, si Kankuro o ella hubiesen estado aquel día en casa, su hermano no se hubiese tenido que casar con un alfa bastardo que solo lo utilizaba como saco de boxeo o para satisfacerse sexualmente. Ichibi No Shukaku era un maldito que desgraciadamente tenía a su hermano bajo su poder.

Pero en medio de todo aquel suplicio, Gaara encontró un rayo de luz que dependía enteramente de ellos. Y es que su lindo hermanito estaba loco al pedirles que le consiguieran un trabajo en la empresa donde estaban desde hace varios años, alegando que su esposo no se iba a enterar porque estaba todo el día metido en sus malditos negocios, por lo que le daría tiempo a Gaara de trabajar un par de horas, distraerse, conocer gente nueva, llegar a casa y esperar a su bastardo esposo mientras fingía que paso su día encerrado.

—Hablare con un amigo, pero no prometo nada.

—Temari —con voz sería, Kankuro se tomó el puente de la nariz con fuerza—. ¿Eres consciente de que, si Shukaku se entera de esto, tomara represalias contra Gaara?  

—Yes por eso que no permitiremos que se entere —sonrió cómplice, abrazando fuertemente a Gaara, culpándose de que eso fuera lo único que podía hacer por él.

💋🍡💋

—Lo sabe…. él lo sabe —jadeó con fuerza mientras sentía los protectores brazos de Temari atrayéndolo contra su cuerpo, como si intentara protegerlo del mundo entero—. Shukaku va a matarme. Él lo hará…

—No lo hará… te juro que no lo hará…

—No estés tan segura —Kankuro apretó el volante de su auto con fuerza—. No solo se va a enterar de que su esposo lo desobedeció, sino que conoció a su maldito destinado y que, por obra de un jodido milagro, no lo marcó en medio de su maldito celo. ¡Dios! Te juro que no me sorprendió haber visto a alfas salir asustados, si de por sí ese par ya son intimidantes cuando están de buen humor, ni siquiera me quiero imaginar la masacre en la que se hubiese convertido todo esto si Naruto no lo hubiese detenido.

—¿Cómo sabes que Naruto lo detuvo?

 —Es evidente, por el aroma sabemos que quien perdió el control fue Itachi, nadie más aparte de su hermano pudo haberlo detenido, o de lo contrario Gaara no estuviera aquí con nosotros.

Asintió mientras observaba el cuerpo tembloroso de su hermano, comenzando a liberar sus feromonas para relajarlo y que su estado no alterara más a Shukaku, quien para ese momento estaría enterado de lo que paso gracias al lazo, o haciéndose suposiciones estúpidas sobre su hermano como era costumbre. Y es por eso que maldecía la marca de Gaara, gracias a ella, Shukaku lo tenía contralado como un puto radar, y si no fuera porque su hermano era bastante inexpresivo, hace mucho los hubieran descubierto.

—No todo está perdido.

—Si claro —Kankuro ironizo, mientras rodaba los ojos y bajaba la velocidad.

—Podemos decirle que nosotros llevamos a Gaara porque queríamos invitarlo a cenar, así no preguntara que hacía ahí, y lo del destinado fue una coincidencia.

—Una terrible…

—No estés tan seguro… —apretó los labios, dándose cuenta que Gaara estaba dormido, aferrándose a su cintura—. Por alguna razón, preferiría verlo con el mujeriego de Itachi que con el bastardo de Shukaku.

—Ninguno es bueno para Gaara.

—¿Y qué quieres hacer? —bajo la voz—. Por más que queramos protegerlo de todo es imposible…. Gaara no se merece nada de esto.

—¿Te recuerdo que ya tiene una marca y no podemos hacer nada?

—Nosotros no, pero su destinado si…

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Continuará