SOLO TÚ

CAPITULO 38

27 DE ABRIL 2019

Son las tres de la mañana y aún no he conseguido dormirme. Se me hace imposible y como Ricky dijo que podíamos coger de la cocina lo que quisiéramos con mucho cuidado me levanto sin hacer ruido para no despertar a los demás y me voy a la cocina a prepararme un vaso de leche. Abro todos los armarios que hay hasta encontrar el de los vasos, cojo uno y me lo lleno de leche. Cuando cierro la nevera me encuentro a Luis entrando tan pancho en la cocina y se me cae el vaso de leche. Me agacho a recogerlo y no sé cómo termino haciéndome un corte ancho en la mano, genial Aitana, mira que eres lista. Observo a Luis que se va a no sé dónde pero vuelve enseguida con vendas y se acerca corriendo a mí.
Aitana: no hacía falta
Luis: cómo que no? Si estás sangrando
Aitana: no es nada
Luis: Aitana...
Aitana: enserio, no es nada
Luis: podemos hablar de lo que ha pasado hoy?
Aitana: Luis...
Luis: por favor, no te he puesto los cuernos
Aitana: lo sé
Luis: entonces?
Aitana: no ha sido por lo de Jenny
Luis: y por qué me has hecho creer que era por eso?
Aitana: porque soy una estúpida y no estoy preparada para esto
Luis: qué es esto?
Aitana: esto, lo nuestro, siento que después de todo, no soy suficiente para ti y te vas a cansar de mí
Luis: joder Aitana, nunca me voy a cansar de ti, no lo entiendes? Llevo toda mi vida enamorado de ti. Incluso cuando me decías que me odiabas, eso me enamoraba aún más. No me he cansado de ti hasta ahora y no me voy a cansar de ti nunca, que te quede claro en esa cabecita que tienes. Mira, nos vamos a dar un tiempo, y en ese tiempo te vas a pensar si quieres seguir conmigo o no. Si quieres estar conmigo búscame y si en una semana no he tenido noticias tuyas, me lo tomaré como un no
Aitana: eres demasiado bueno conmigo
Luis: Aitana
Aitana: dime
Luis: no sé si vamos a volver juntos y... bueno da igual
Aitana: dilo
Luis: en caso de que no quieras volver conmigo, puedo besarte por última vez?
Recorro la poca distancia que hay entre nosotros, cojo su cara con mis manos y le beso. No dura mucho el beso, se separa de mí y se apoya en la nevera con la mirada clavada en el suelo.
Luis: no sé cómo te voy a olvidar si no quieres volver. Te intenté olvidar en la academia militar pero no hubo manera.
Bueno, me voy a ir a dormir ya