Narra Goretti:
Llegó al hospital para estar con el. Allí está mi padre y también mi hermanito pequeño y el hombre que me ha estado ayudando.
-Gracias por esto hija-murmura.
Suspiro. Me quedo abrazada a el y hundo mi cabeza en su pecho. Miro a Adexe de reojo que llora desconsoladamente.
-Ve con el hija, te necesita-murmura.
Asiento. Me acerco a él y le abrazo acariciando su rostro suavemente.
Yo:Todo va a estar bien-murmuro-
Adexe:¡No!¡Nada va estar bien!
Sale el médico. Adexe lo mira y el confirma nuestras sospechas, han muerto. Cae de rodillas al suelo. Intento acercarme pero no puedo, el me lo impide.
-Cálmate.
-¡Todo esto es culpa tuya!-llora.
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Despierto. Estoy en el mismo sitio de siempre. Este maldito lugar.
-Toma, tienes que tomarte las pastillas.
-No quiero.
-Tienes que tomartelas si no te dará otro bote sicótico.
Aunque me resisto me mete las pastillas en la boca. Mi mente empieza ha clarearse. Ahora empiezo a verlo todo más claro. Esos chicos los creo mi mente para hacerme sentir mejor y mis deseos de libertad al saber que yo nunca podré salir de aquí porque yo produje el accidente en el que mi madre murió.
~FIN~
