Ya no soy un juguete, lo he sido ya por bastante tiempo, estos últimos meses he sido un juguete que se alimentaba de esperanzas, cada semana salía feliz de la playa con más esperanzas, unas esperanzas falsas y estúpidas sin saber que tras las palabras que salían de su boca dos eran reales mientras que cien eran falsas, si desde el principio hubiese sabido todo lo que hacían, todos esos encuentros donde hasta al mismísimo diablo le daba asco observarlos, pobre chica, no le conozco y me compadezco de esos actos tan asquerosos, desde el principio siempre supe lo que pasaría, yo fui un juguete cierto, pero no lo llevo siendo desde hace tanto y al menos me he dado cuenta, que la robaría cuando quisiera y así sucedió, un juguete cegado, pero bueno quien soy yo para preocuparme si el destino enseñará la verdadera cara del juego. Siento asco, odio y amor a la vez, es el sentimiento más estupido que he sentido y que quizás el que vaya a sentir pues no voy a volver a pasar por nada así, soy olvido y en el olvido acabaré pués, ¿Como ha podido hacer todo eso? ¿Quien es? No le conozco en lo más mínimo ni se que le mueve para haberse convertido en lo que es ahora, me he equivocado tanto pero he acertado tantas veces que a dia de hoy no se por que me siento así de sorprendido, quizá por que no soy capaz de asimilar tantas cosas que en otros tiempos habrían sido impensables, duele, duele tanto que te digan tantas cosas y te den tantas esperanzas mientras la realidad es otra, ser solo un juguete al servicio de alguien que no siente más que pena, jamás llegué a pensar que todo desembocaría en mi destrucción y en tantas mentiras, siempre te quise y nunca quise hacerte daño pero veo que hoy no importa nada y solo sacas a relucir lo malo, el tonto siempre fui yo, que veía luz en la oscuridad, que cuando se acostaba llorando por las cosas que le decia despertaba con una gran sonrisa por querer ver la felicidad de ambos, no soy ese, jamas volveré a caer tanto ni rebajarme a simplemente un sucio juguete, he renacido, de las llamas he vuelto a nacer y lo siento pero lo mucho que me has destruido, lo mucho que me has hecho sufrir cada noche y todas aquellas esperanzas han quedado marcadas en mi piel. No soy quien para decir que el tiempo le dará la razón a aquel que jamás vivió en este mundo, sino en su cabeza, me repugna tanto tu imagen rebajandote a un juguete con el que desahogarse a espaldas de otros, jamás pensaría que tu grandeza caería a eso, duele tanto ver el estado en el que ha acabado, pero bueno espero que yo no sea el unico que renazca de las llamas, pues siempre estará en mi corazón aquella sonrisa y aquellos ojos de los que quedé prendido, y solo espero que el destino me escuche por una vez.
