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Jaemin recogió sus cosas, despidiéndose de Jisung, mientras el menor le deseaba suerte, diciéndole que lo extrañaría, Jaemin simplemente sonrió débilmente, abrazando a su amigo, para después salir de la cafetería.

Soltó un ruidoso suspiró, pensando en su pequeña ChaeWon, ¿Qué haría ahora?, tenía mucho miedo, incluso las ganas de llorar se hicieron presentes, mientras caminaba hacia la escuela para recoger a su hija.

Después de que Lami se fuera satisfecha, Jeno con cara culpable se acerco hacia él, diciéndole que le daría un cheque con el dinero suficiente por los cinco años que trabajo para el, sumándole sus horas extras y días que no debió de haber trabajado pero que Jaemin hizo.

Ciertamente, Jaemin estaba enojado con Jeno por dejarse manipular por una chica como lo era Lamí, por que Jaemin sabía perfectamente como era Lami, una chica egoísta y que solamente piensa en sí misma, en nadie más, no entendía como Jeno pudo fijarse en ella, no lo culpaba eran sus gustos y Jaemin los respetaba.

Por un momento dejo de lado todas sus preocupaciones, cuando una dulce melodía llegó hasta sus oídos, cautivando le por lo hermosa que la voz era, haciendo que su corazón latiera con más intensidad.

El Alfa llegó a la escuela de su hija que, como todos los días, ya se encontraba cerrada, pero que sabia que su hija aún seguía ahí, esperándolo a que la recogiera, no sola, sino que con su maestro, el Omega lindo, que a Jaemin le llamaba la atención y su corazón latía desenfrenada mente cuando lo miraba y le regalaba una de sus lindas sonrisas.

Jaemin miró al Omega sentado, mientras tenía a su pequeña en brazos, durmiendo, se sintió culpable por que sabía que llegaba tarde, como siempre, por su hija, teniendo que hacer que el Omega se quedará más tiempo, cuando él ya debería de estar en su casa, descansado, sin embargo estaba tranquilo sabiendo que su hija no se quedaba sola, esperándolo, sino que el Omega se quedaba con ella, ambos esperando por él.

RenJun dejó de cantar, cuando el padre de ChaeWon se cruzó en su campo de visión, sintiendo como sus mejillas tomaban un ligero rubor. El mayor se levantó, aún en brazos con la pequeña niña que se encontraba plácidamente durmiendo en sus brazos, Jaemin se acerco hasta él, acariciándole el cabello a su hija mientras la miraba decaída mente.

RenJun podía sentir que el Alfa no se encontraba del todo bien, su mirada triste y su sonrisa caída lo decían todo.

El Alfa dejó de acariciar el cabello de su hija para mirarlo, RenJun le sonrió, Jaemin se sorprendió pero le devolvió el gesto al Omega.

— Perdón por llegar tarde a recoger a ChaeWon — dijo — También por hacer que te quedarás más tiempo esperando a que llegará por ella — RenJun negó.

— No te preocupes — respondió — No podía dejar a ChaeWon sola, esperando.

Para Jaemin, el maestro de su hija siempre sería un Ángel, estaba más que agradecido con aquel Omega.

Jaemin sonrió, acercándose hacia el Omega, y tomar a su hija entre sus brazos, cargándola, la menor a penas sintió la calidez de su padre, paso sus brazos por su cuello, mientras enroscaba sus piernas en su cintura y se sujetaba fuertemente de él.

El Omega se despidió del Alfa con un gesto de manos y una ligera reverencia, acercándose hacia la menor que seguía dormida, dejando un casto beso en su cabeza, dándose la media vuelta dispuesto a irse a su casa, pero el agarré fuertemente en su muñeca se lo impidió, deteniendo todo movimiento, giro su cabeza, sorprendido, mirando la mano de Jaemin sujetar su muñeca.

Jaemin al percatarse de aquello, abrió sus ojos sorprendido, soltando la muñeca del Omega, sintiendo como el calor subía hasta sus mejillas.

— Lo siento — dijo — Pero, ¿Puedo acompañarte hasta casa?.

RenJun pestañeo varias veces, mientras Jaemin esperaba impacientemente por una respuesta.

No sabia por que había hecho y dicho eso, pero es que sentía la necesidad de proteger al Omega, sabiendo que llegó sano y salvo hasta su casa, incluso su lobo se desesperó cuando estaba a punto de irse, haciendo que lo tomará de la muñeca, impidiendo que se fuera, era extraño.

— Por supuesto — respondió, sonrojado, causándole ternura a Jaemin.

El Alfa sonrió, mientras RenJun desviaba su mirada sintiéndose avergonzado, pero a la vez, emocionado y nervioso.

El mayor empezó a caminar mientras el Alfa le seguía, colocándose a su lado, de vez en cuando, sintiendo como sus manos se rozaban, causándoles un rubor en las mejillas a ambos.

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Gracias por leer 💖

All With You [RenMin/JaeJun](Omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora