V: Zona horaria.

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Mi siguiente clase comenzaba en tres minutos, y debía cruzar el campus entero para poder llegar; a este paso tardaría años luces.

Tardé al menos diez minutos en ir a mi casillero para poder hacer un cambio rápido de libros y luego llegar a matemáticas. Golpeé con mis nudillos la enorme puerta y me mordí el labio, nerviosa.

–Clarissa, llegas tarde. ¿Cuál es el motivo?

–La directora me pidió hablar con ella y salí tres minutos antes de que –una pequeña mentira de tiempo no le viene mal a nadie– tuviera que entrar a clases, fui a buscar mi libro que estaba en mi casillero y cruzar el campus desde el 212 hasta acá en diez minutos fue un tiempo record.

–Bueno... si es en ese caso que hablaste con la directora, no hay problema.

–Gracias. –sonreí tímida.

–Y Clarissa, lo siento mucho.

Aquí vamos de nuevo... Esos ojos de lastima simplemente no van conmigo, no. No soporto que me observen así. ¡Se suponía que nadie lo sabría!

Está bien, sí, padezco de leucemia crónica pero... ¿Y qué? Ni si quiera estoy en un estado crítico, mal no me siento... ¡Estoy de pie, caminando! Y aún así sonrío. Dios.

Busqué un asiento vacío y me encontré con el adorable rostro en forma de corazón de Lucas. Lucas es de cabello corto y rubio, ojos claros y de tez blanca, es tan suave como un bebé.

–Yo traté de decirle que estabas con la directora pero me ignoró. –susurró el rostro de bebé.

–No pasa nada, todo solucionado. –sonreí.

Mi móvil no estaba en silencio así que cuando me llegó un mensaje vibró y sonó en mi bolsillo trasero.

–Chicos, ¿Qué les he dicho de los móviles en clase?

Rápidamente lo puse en silencio y miré la pantalla. "Nuevo mensaje @TheVampsBrad" lo leí y este decía: "El mejor niñero, no dudes en avisarme si tienes alguna mascota que cuidar jaja ;)"

Respiré hondo y quise gritarle a todo el mundo que Brad había vuelto a responder mi mensaje privado, pero conservé la calma y solo sonreí nerviosa, respirando fuerte.

–¿Todo bien? –preguntó Lucas riendo, seguramente por mi reacción.

–Sí, es solo la boba de Brend diciendo idioteces desde el campus. –reí pensando en Brad.

"Créeme que serás al primero que llame, lol. ¿Aún en Londres?" Bien, tal vez mi mensaje fue un poco psicópata-maniatica-fangirl-loca-que-quiere-saber-todo pero... Sólo quiero entablar una conversación con él. Esa es mi meta, si todo esto está sucediendo, ¿Por qué no puedo hablar con él como si fuéramos dos personas normales?

Porque él no es una persona normal, Clary.

Maldita conciencia, tenía razón. Brad es famoso, y yo bien lo sé. Pero que más da si... "Sí, tomaremos un avión a Manchester en unas horas. ¿Aún en Texas?" Fue su siguiente mensaje.

No lo pensé dos veces y le respondí, no me importa que él se demore cinco o diez minutos en responderme, yo lo haré apenas pueda: "Muy gracioso... Desgraciadamente sí, y lo que es peor... clases de matemáticas x_x"

Vale... me arrepentí luego de haberlo mandado. Yo estoy en el instituto, tengo diecisiete años y Brad que tiene dieciocho (y que pronto cumplirá los diecinueve), está esperando tomar un vuelo que lo llevará a Manchester para reunirse con un millón de admiradoras que son exactamente como yo. Tal vez debería haberle dicho algo más interesante. "Wow... me apiado de ti, ¿Que año cursas?" fue su siguiente mensaje.

kiss me hard before i go // Brad SimpsonWhere stories live. Discover now