Sam & Seth

Epílogo

Pasaron 11 meses para que al fin se realizara la boda de Dulce y Manu, en esos diez meses Tessa se encargó de que todos supieran lo mucho que moría de impaciencia y estrés ya que ella se puso la boda al hombro. Suerte que tuvo la ayuda de su escuadrón.

"No pensé que me pagarías el favor tan rápido" – le dijo Dulce a Sam mientras escogían el vestido de novia.

En esos once meses Sam descubrió que Seth se duchaba con electro insoportable a todo volumen, y él descubrió que Sam dejaba marcadores y tazas de café vacías por todos lados. Pero, tranquila(o), aún se aman. Entre todos los descubrimientos que se hicieron en esos once meses hubo solo uno que no fue nada agradable. Sam era muy poco fértil, y por alguna razón en once meses sin cuidarse no había quedado embarazada. Sam lloró por dos días seguidos después de ir al doctor mientras Seth hacía lo posible para que se sienta mejor pero nada parecía calmarla. Poco a poco Sam empezó a aceptarlo, pero cada vez que el tema se tocaba volvía a llorar. Y si, lograron encontrar un apartamento pequeño que solo planeaban cambiar con el crecimiento de la familia. Lo único que Seth tenía en contra del nuevo apartamento era que quedaba cerca de la nueva casa de Tessa y su familia y Tessa se sentía con la obligación de venir a chismosear a menudo.

Llegó el día de la boda de Dulce, y ambos, Anne y Joab, estuvieron ahí. Anne nunca tomó su avión de regreso a Canadá, y nada se dijo de la reconciliación con su ex – esposo, pero Dulce y Seth lo sobreentendieron y hasta tenían cierto miedo de preguntarles así que se conformaron con verlos más felices que nunca.

Más o menos un año después las cosas cambiaron un poco.

Seth ya había terminado de estudiar cuando murió el tío Alfred después de pasar casi tres semanas en el hospital por problemas cardiacos. La tía Clara le pidió que se haga cargo del café y Seth aceptó feliz. Sam se encargó de la remodelación del lugar e incluso amplió la pequeña sección de libros, ella se pasaba la mayoría de tardes en el café escribiendo reseñas para diferentes revistas.

Sam estaba sentada en la cama una noche cuando Seth llegó del café, ella se había ido antes para preparar la cena. Como era verano solo usaba un polo largo, sin pantalones y un moño. Ella observaba en el espejo del armario su estómago casi plano y sintió una punzada de dolor cuando recordó que nunca tomaría la forma ovala de una mujer embarazada. Seth entró a la habitación y ella lo miró con ojos tristes. Él supo de inmediato que ocurría y corrió a abrazarla por la espalda.

"Creo que nunca dejaremos este apartamento" – dijo Sam cabizbaja.

Esas palabras perforaron el corazón de Seth. Sam le había dicho una vez que los elfos solo pueden ser asesinados o morir de pena. Él no podía dejar que su esposa-casi-elfa muriera de pena.

"Creo que vamos a adoptar" – dijo Seth en el oído de ella.

Después de una infinidad de trámites, Sam y Seth adoptaron un niño recién nacido. No había pasado ni una semana desde que el bebé llegó a casa cuando Sam se dio cuenta que su periodo iba muy atrasado. Si, estaba embarazada, pero no quería devolver al bebé, ni pensarlo. Así que se quedaron con ambos. No es fácil cuidar a un bebé estando embarazada, por eso es realmente bueno tener un escuadrón de 4 chicas que puedan ayudar. Siete meses después Sam dio a luz a una bebé prematura, que menos mal se desarrolló bastante bien, pero ese fue el fin de los embarazos para Sam.

Dulce y Manu peleaban un montón, y Tessa casi siempre era el pañuelito de ambos. Puntualmente, después pasar un tiempo en casa de Manu, Tessa iba a casa de Seth a chismosear, desfogarse un poco. Los bebés eran su audiencia favorita. Un día Anne pasó de visita y los encontró a ambos en diferentes extremos de la casa, completamente decididos a no hablarse. Fue de un lado a otro trayendo mensajes hasta que se cansó y llevó casi arrastrando a Dulce a la sala, donde Manu estaba, y la obligó a sentarse junto a él en el sillón mientras ella se cruzaba de brazos.

"Ustedes peleen, lloriqueen y hagan berrinche como mocosos todo lo que quieran" – dijo parándose frente a ellos – "pero eso no les servirá de nada y los problemas seguirán ahí. Sino mírenme a mí. Podrían ahorrarse tanto drama si se pusieran a pensar si todos esos desacuerdos insignificantes en realidad son tan importantes como para dejar que arruinen su relación. Yo, yo me voy y esto es lo último que oirán de mí sobre el tema. La próxima vez que venga quiero ver una pareja de esposos, no un par de mocosos"

Con eso se fue y todo mejoró en ese hogar. Un par de años después Dulce y Manu siguen peleando, pero con menos frecuencia y definitivamente no en frente de su mamá. Anne volvió a Canadá. Pero esta vez solo para dejar sus cosas en orden y traer lo que había dejado, luego regresó pero inmediatamente volvió a partir, esta vez con Joab en unas vacaciones/luna de miel que no pudieron darse hace 24 años.