-Últimamente te comencé a pensar mucho, había progresado de una manera que ya no pensaba en ti antes de dormir, se podía decir que te había olvidado pero aún te tenía presente. Pero me llamaste en la madrugada en parte con la voz cortada y me dolió escucharte así, a decir verdad no sé porque me llamaste, dijiste que estabas feliz con ella pero también dijiste que no era lo mismo con ella... eres tan confuso que me enfermas. Me pediste ser mi amigo y te dije que si al comienzo pero luego dije que no, porque no quiero tener cerca a personas que me lastimaron... estoy tan confundida conmigo misma, siento que mis tormentas regresaron, no tan fuertes como para hacerme caer pero si con suficiente fuerza para dejarme sin ganas de conocer a alguien mas.
