◐Veitinueve

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Erick puede percibir la esperanza que el Alfa tiene en ese segundo.

Tiembla y se siente débil. Quiere decir que sí.

Pero contrario a lo que siente, suelta sus manos y retrocede un paso.

—Entiendelo por favor, ya tengo un Alfa —murmura bajo mirando el piso.

Joel asiente con la cabeza, aguantando sus lágrimas. Ya no tiene fuerzas ni ganas de insistir más. Camina por la orilla del río mirando el agua y ve un diente de león detrás de una pequeña roca.

A Yoandri le encantan los dientes de león, siempre está jugando con ellos.

Ahora se siente imbécil y egoísta, no estaba pensando en Yoandri, el único que debería importarle.

—Joel... —murmura tras él —deberíamos apurarnos, se hace tarde.

—Ni siquiera sé que es lo que estamos haciendo aquí.

—Vamos a subir la montaña —dice Erick señalándola.

Joel abre la boca tratando de decir algo pero las palabras se traban en su garganta. Frunce el ceño y bufa molesto, ¿en qué estúpido momento se le ocurrió venir con Erick?

—Te diría que no deberíamos hacer esto, que está mal porque es prohibido, pero tú lo sabes y al parecer no te importa —suspira ya harto de la situación —que más da.

Joel comienza a subir la montaña y Erick lo sigue conforme, sonríe porque va a poder salvarlo aunque su lobo opina lo contrario.

—Y... ¿como has estado? —pregunta llegando a su lado después de varios minutos que se mantuvieron en silencio.

—Bien —se limita a responder cortante.

Erick juega con sus dedos al no saber que más decir. Jamás se imaginó una situación tan incómoda con Joel.

—¿Ya conoces al Alfa de Yoandri?

—No.

—¿Por qué no podemos tener una conversación normal? —pregunta molesto.

—Porque no quiero hablar contigo.

El lobo de Erick se siente rechazado, baja la mirada y respira hondo para animarse un poco.

—Estas molesto y lo entiendo —habla bajito —No entiendes porqué hago esto —levanta su cabeza para mirar al cielo —Mamá y papá siempre me decían que debía confiar en la luna —sonríe cuando recuerda sus rostros —ellos se amaban mucho y al verlos yo... quería conocerte —suspira —Éramos muy felices... hasta esa maldita noche —el temor se nota en sus ojos.

—No tienes que contármelo si no puedes —dice Joel al notarlo triste.

—Nuestra cabaña se incendio —continua al salir de su trance —mis padres no se salvaron pero pudieron sacarme por una ventana. Habían como cinco Alfas rodeando mi casa y me atraparon... —Erick tiembla mientras sus lágrimas resbalan por sus mejillas. Joel se asusta al no saber que hacer. Parece que el ojiverde está sufriendo un colapso.

El rizado lo atrae hacia su cuerpo y deja que llore en su hombro —Era solo un niño... —suelta en un sollozo —y ellos abusaron de mí —el Alfa se tensa y siente una gran rabia pero se calma al escuchar aún a Erick llorar. Debe calmarlo.

—Shh... —susurra cerca de su oído acariciando su espalda.

—Me aseguraron que mi Alfa no me amaría porque ya estaba utilizado...

—Ellos no sabían nada...

—Me marcaron Joel —murmura con la voz rota, estirando su cuello para que el rizado lo mire. Efectivamente hay una casi invisible cicatriz.

El Alfa comienza a llorar también, por rabia e impotencia —Ellos no sabían nada —repite mirándolo a los ojos —Yo te amo y te amaría después de eso o después de cualquier cosa. Y esa marca...

—No significa nada, lo sé —completa el Omega separándose de su cuerpo —los lazos de la luna son más fuertes y no se pueden romper con una simple marca —añade —pero eso no quitaba que me sintiera rechazado, usado, una basura.

—¿Qué pasó con esos malditos...?

—Johann los mató —habla calmado —Él escuchó mi llanto y quiso ayudarme. Mató a los cinco Alfas, incluido el que me había marcado, por eso su marca se borró con el tiempo.

—¿Se llama... Johann? T-tu... Alfa.

Erick asiente limpiando sus lágrimas —¿Ahora entiendes por qué lo amo? Me cuidó y me amó cuando no tenia a nadie, cuando me sentía una mierda. Él me salvó en todos los sentidos en los que se puede salvar a alguien y yo me prometí que lo amaría como si fuera mi Alfa.

Joel calla sus sollozos para que Erick no los note. Su Omega no sabe cuanto daño le está haciendo.

—Entiendo... —logra pronunciar continuando su camino —decidiste amarlo a él.








Me harían muy feliz si le dan una oportunidad a "1922", una historia Joerick que está en mi perfil.

Lazos Rotos ◑Joerick◐Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon