Capítulo 22

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-Greg, Niall, ¿cómo les fue? ¿Se divirtieron?-preguntó su padre sonriente. Niall le apretó el brazo a Greg para que no dijera nada, este lo pensó por unos segundos.

-Pero claro, Niall es un gran pescador-dijo por fin.

[...]

Al día siguiente, Bobby Horan se ofreció a llevar a Niall al instituto. Niall no pudo negarse, el día anterior le había prometido a Greg no preocupar tanto a su padre. De nuevo no volvió a desayunar, su padre no se daba cuenta si su hijo se saltaba comidas o no.

-Y dime, ¿cómo les fue?-preguntó para sacarle plática.

-Bien, de hecho conocí a un chico que va en mi escuela...

-¿Cómo se llama?

-Tommy Wood, me parece, es un año menor que yo pero es muy simpático, a su padre, Leland, le gusta la misma música que a Greg-sonrió como un niñito, con inocencia y sinceridad.

-Me imagino que te ha de haber dejado solo con el chico ese-comentó su padre doblando en una esquina, ya casi llegaban a la escuela.

-Si, pero lo agradezco, Tommy fue muy agradable.

-Bien, ya llegamos-estacionó el auto frente al instituto, Niall se acomodó la mochila sobre el hombro, Bobby le revolvió un poco el cabello y se despidieron con un movimiento de manos. Cuando el rubio bajó del auto y cerró la puerta, el mayor puso en marcha su carro para irse.

En la mañana estuvo hablando y disculpándose con Jazz sobre porqué había faltado dos días, estaba feliz, de cierta forma, ir a pescar con Greg le hizo sentir mejor. Era obvio, le había confesado varias cosas que no le diría nunca a su padre y se tomó la molestia de apoyarlo y tratar de ayudarlo. Aunque su buen ánimo casi se esfumó en cuento Zayn llegó al salón de clases. En cuanto Malik entró hicieron contacto visual. Niall deseaba nunca haber volteado al momento que entró, siempre que lo miraba le hacía sentir algo. Hace unos días le transmitía una cierta confianza, hace unos años ver a Zayn le daba miedo, esta vez, más que miedo, sentía tristeza e impotencia.

A pesar de verlo por solo segundos, sintió todo lo que Zayn quería decirle. Eres un maldito marica. No tenía que preguntarle si de verdad pensaba eso, desde el sábado y hace años que se lo había dejado en claro. Se sintió idiota por pensar que comenzaban a ser amigos. Zayn era extraño. Zayn era misterio.

-¿Pasa algo?-le preguntó su amiga.

-N-no, estoy bien-mintió una vez más. De nuevo se sentó al fondo de la clase, donde nadie podía verlo, donde podría dormir sin tener miedo de que le hicieran una broma pesada. Jazz fue con Zayn aun sin entender el extraño cambio de humor de Niall

Después de eso, llegó la hora del descanso. Niall tenía hambre, hoy si comería. Tomó una charola y se formó en la larga fila de estudiantes que esperaban por algo de comer. De momento en momento asomaba la cabeza hacia un lado y al frente, a veces poniéndose de puntitas con la esperanza de ver mejor qué es lo que habría de comer ese día, sea lo que sea lo comería. No llevaba ni cinco minutos en la fila y ya se estaba desesperando.

-Hola, Niall-le saludaron con nerviosismo. Era Tommy.

-¡Tú!-por primera vez en el día sonrió con sinceridad-Esperaba verte hoy y parece que se hizo realidad mi deseo.

-Estás jugando-sonrió bajando un poco la cabeza con los ojos cerrados, soltando una risita. Su cabello se miraba tan sedoso.

-Claro que no, me da gusto verte, en serio-le guiñó el ojo. Tommy se sonrojó por ello.

-Ja, ja... Estem, ¿puedo comer contigo? Mis amigos me han abandonado en cuanto me formé en la fila y no sé dónde podrán estar-parecía estar avergonzado por lo sucedido. Para Niall, Tommy Wood era el chico más tierno que haya conocido.

-¡Seguro! Podemos aprovechar y conocernos más a fondo-Wood rió por el doble sentido de la frase, qué sucio.

-Lo siento, fue inevitable-dijo entre risas.

Cuando por fin la fila avanzó pudo ver qué era la comida, lasagna. Se relamió los labios al estar a dos personas de poder coger un plato lleno de toda esa comida italiana. Se veía tan delicioso, y más para su estómago que apenas y había tenido algo de comida en días. Tommy rió bajito al escuchar los ruiditos que hacía su estómago por el hambre. Después de tomar su comida, se dirigieron a una mesa hasta el fondo de la cafetería. Se sentaron frente a frente, Niall comenzó a comer como si le fuese ña vida en ello, Tommy tenía las mejillas sonrosadas y se cubría la boca con la mano para que no viese su sonrisa. Las mejillas de Niall estaban infladas por la comida, para Wood se miraba tan tierno.

-No te rías, tengo hambre-reclamó Horan.

-No es eso, es que te ves tierno, pareces una ardilla, una ardilla irlandesa de ojos azules-también comenzó a comer.

Niall sintió de nuevo las mejillas rojas. Detrás de Tommy vio a Jazz acercarse. Zayn iba detrás de ella. Jazz se acercó con la intención de acompañarlos, Malik le agarró del brazo y susurró algo, Horan lo escuchó a la perfección: ¿Quién quiere estar cerca de esa rubia? La chica del cabello azul lo miró confundida y al igual que él masculló algo que en ese momento no le importaba. Dejó la charola en la mesa, se levantó de su lugar y se fue corriendo al baño, dejando a Tommy solo en la cafetería. Ya lo buscaría después.

Síndrome de Estocolmo [ziall]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora