Mi Preciado Humano [YM]

Capítulo 6: Cita.

—¿De qué hablas? —Susurro, pensando que había sido alguna clase de broma o incluso que había escuchado mal.

—Sé que suena totalmente horroroso, probablemente algo que siquiera tú entenderías pero me he enamorado de un demonio. —Dice viendo la puerta del Paraíso a solo unos escalones de distancia. —Estos días bajando a la Tierra lo conocí, salimos y bueno una cosa lleva a la otra. Probablemente lo conozcas y verás que no es una mala persona, te lo aseguro.

Sus palabras me habían dejado un poco atontado y es que no lo juzgaría pero me era difícil entender cómo Tae, Kim TaeHyung, terminó por enamorarse de un Ser de el rango más bajo que pudiera existir.

—B-Bien, yo...

—No es necesario que respondas, sé que no te lo esperabas asique no te presionaré para que me des tu incondicional apoyo hasta que lo conozcas. —Finalmente, ingresamos al cielo siendo escurridizos y cuidadosos con ambos guardias celestiales que aguardaban en la puerta metros más adelante que nosotros.

Llegamos a mi casa abriendo y cerrando la puerta en cuanto los dos estuvimos dentro. Tae estaba bastante callado y yo aún no asimilaba las palabras de mi amigo. Me sentía mal porque cuando le conté sobre YoonGi él me apoyó sin importar que sea un humano y no estaba haciendo lo mismo, más allá de que sea un demonio, era mi amigo.

—Tae... —susurré captando su atención en el momento, —nunca dudes en que te apoyaré en todo, no importa lo que sea, yo estoy aquí ¿si? Cuenta conmigo.

—Gracias, Jimin. —Me regaló una sonrisa y correspondo haciendo lo mismo en lo que aligeramos el ambiente.

—Y dime ¿quién es el afortunado de robar tu precioso corazón, TaeTae? —Hablo con picardía y el rubio reacciona ruborizandose. Me imaginé en su situación.

—Se llama HoSeok, Jung HoSeok. —Se detiene unos segundos, —es un demonio y hemos hablado por semanas, me contó sobre el infierno, sobre la Tierra. Él me enseñó todo lo que sé y es el dueño del departamento en el que nos hospedamos. —Yo hago una "o" con mi boca mostrandome sorprendido, su amigo. —Es muy generoso y me siento bastante estúpido, los demonios son malvados y probablemente sólo jugará conmigo al final. Tengo miedo de esto, Minnie...pero a la vez quiero confiar en él. —Susurra lo último y veo como su mirada decae, sus ojos convirtiéndose en un color azul que se cristaliza.