Al diablo cupido(yaoi)

Capítulo II

NOTA SI LO DICE NOAH, NO SIGNIFICA QUE YO PIENSE ESO EL PERSONAJE ES ASÍ!!

La semana acabo, eso significa que pronto me voy de este país, a otro país, si tan solo pudiera salir de este planeta o de este universo... pero eso no es posible.

-Noah empacaste todo, ¿no se te olvida nada?-pregunto mi padre sonando pensativo.

-nada, ya lo revise-dije sentándome en el suelo.- ¿a qué hora tenemos que ir al aeropuerto?

-a las 14:00...-dijo pensativo. IDIOTA SON LAS 13:00.

-padre son las 13:00-dije subiendo una ceja. Su rostro se vuelve un manojo de nervios.

-¡qué haces ahí sentado! rápido al auto lleva todo-dijo corriendo a la puerta.

La verdad es que no me sorprende para nada, mi padre siempre fue así de torpe hasta en lo mas mínimo, recuerdo que nunca llegaba a nada a la hora, mi madre se enojaba y peleaban delante de todo el mundo pero, luego andaban diciéndose cosas cariñosas.

-listo seguro que tienes todo-dijo mientras entraba al auto.

-si segurísimo-dije fríamente.

Me sonríe luego empieza a manejar, miro la ventana y me coloco los audífonos en señal de; no quiero hablar. Gracias al mundo llegamos a tiempo, ahora estamos en el avión, esperando a que despegué para ir a nuestro nuevo hogar, me pregunto si es verdad eso de que todos los japoneses son iguales y muy bajos, yo midiendo 1,76 eso significa que seré como un gigante ahí, ya quiero llegar.

-Noah-siento que alguien toca mi hombro.-Noah

-¡que!-digo molesto.

-ya llegamos, despierta de una vez...-suspira.- tienes el sueño pesado, al igual que tu madre.

-no molestes-dije sin mirarlo.

Luego de un largo viaje de como 14 horas o mas no lo sé, lo único que se es que me duele el trasero y que le di vuelta a las 1000 canciones que tengo en mi celular 2 veces, llegamos a Japón. Me siento como una alienígena al ver a mi alrededor.

-¿son los Bloom?-dijo un hombre bajo de ojos negros.

-si lo somos-dijo mi padre sonriendo.

-yo los guiare a su nuevo hogar por favor sígame-dijo con voz neutral.

Caminamos siguiéndolo, y me percate que todos nos miran sobre todo a mí, incluso vi como una chica me sacaba una foto... que depravada, si no fuese por el hecho de que hablamos diferentes idiomas le habría dicho unas cuantas cosas.

-Noah ¿te encuentras bien?-pregunto mi padre.

-es solo que es incomodo que todos te miren...-dije suspirando irritado.

-es porque somos bichos raros, míralos todos son iguales-dijo riendo. En ello tiene razón, es como copiar y pegar.- y tú no, tú destacas mucho.

-soy normal...

-aquí no, espero que ahora si puedas conseguir una novia-dijo sonriendo. Lo mire molesto, el borro la sonrisa de su cara.

-señor por aquí-dijo el hombre.

Caminamos hasta un auto negro, creo que eso significa que tenemos que estar sentados otra hora más, no estoy seguro si podre soportarlo...

-¿cuál es su nombre?-pregunto mi padre.

-Oshiro Takeshi, quiero decir bienvenidos a Tokyo, es un lugar muy encantador-dijo sonriendo.

Luego mi padre empezó a entablar una conversación blablá...