𝗔𝗡𝗢𝗗𝗜𝗡𝗢 ㅡ Lee Haru, buena como un ángel, formando nuevas amistades, sobreviviendo al infierno que es la vida. Hwang Hyunjin, un lobo solitario con semblante frío ante todos. Compañeros de clase prácticamente desconocidos. Una primera ficha de...
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Soy el diseñador de mi propia catástrofe
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Viernes, 30 de marzo de 2018
Las rutinas acaban aburriendo siempre. Por eso, el grupo de compañeros de clase que en poco tiempo se había formado, decidió ir a una pastelería a merendar. Se autoconvencieron diciendo que iban a celebrar el (casi) primer mes de clases de este nuevo curso sobrevivido. Era una excusa para pasar el rato juntos que no fuera para estudiar, y ninguno puso pegas. Incluso Jeongin y Changbin que, aunque no eran del mismo curso, también se apuntaron, por que también formaban parte de su grupo.
Pidieron infinitud de refrescos, batidos y deliciosos dulces que llenaron en pocos segundos las cinco mesas que tuvieron que juntar para estar todos reunidos. Por motivos desconocidos, estaban un poco tímidos al principio. Hablaban con aquellos que tenían más cerca suyo, creando pequeños grupos de conversa, la cual no podías escuchar si estabas sentado enfrente.
Pero, finalmente, acabaron todos riendo juntos por las tonterías que decía Jisung, o se hacían preguntas para conocerse mejor aquellos que aún eran más distantes. Nami, como cada viernes que se acordaba, intentó avisar a Haru (en vano, pues tenía la atención de todos los presentes) del ensayo que tenían planeado para el día siguiente.
- Yo quiero volver a ir - Felix sugirió, metiéndose en la conversación.
- Esta vez no. Quizá otro día - contestó Haru rápidamente, quién aún no superaba que dos de sus nuevos amigos ya la hubieran visto bailar.
- Es verdad, Felix, mañana busca otro espectáculo al que acudir. Seguro que alguien de aquí también tiene algo que demostrar.
- Yo no me voy a bailar a mí mismo. Aunque admito que lo que vería sería muy sexy - sonrió pícaramente.
- Changbin sabe rapear - intervino, por fin, Hyunjin, que se había mantenido prácticamente toda la tarde callado. Al mayor le inundó el pánico cuando todas las miradas cayeron sobre él.
