10

10.9K 1.2K 263
                                    

Zenda

Respiré hondo pasando mis manos por mi cabello tratando de calmarme.

— Descuida, todo estará bien. Ya aparecerá...—Calmó Charlie.

—¿Y si no? —esta corrió su mirada nerviosa. Yo opté por jugar con mis manos y algo enojada agregué— iré a buscarlo y traeré su estúpido trasero de puta.

— ¡Oh, no! ¡Claro que no! ¿Estas loca? ¡Eres una simple humana! Te devoraran apenas te vean o lo noten...

— ¿Y cuál es el problema de eso?

— Minino, te arrancaré esa botella de tus manos y te la clavaré en el culo.

Este rodo los ojos y siguió bebiendo en su lugar, el mini bar.

— Estaré bien...Tendré cuidado, lo prometo. Denme algo puntiagudo y listo. Además deben quedarse aquí en el hotel cuidando y a Nyx.

Charlie tomó con delicadeza la mano de Vaggie sonriendo dándole confianza.

— De acuerdo. Pero ten cuidado.

¿Y si no...?

Ignoré por completo eso.

Oh, vamos. Si quieres que desaparezca dejame envenenarte...

— Creo que tengo una especie de navaja que obtuve de tu mundo, dejame que la busco.

Asenti y esta se esfumó.

Niffty bajó.

— ¿Alastor sigue en su habitación? —Preguntó Vaggie.

— Sip. Dice que no le molesten si no quieren desangrarse.

Sonreí de costado.

—Estupido demonio de la radio.

— Moriría por ver que es lo que pasaría si el te escuchara decir eso, seria tan entretenido.

— Cierra la puta boca, gato mugroso.

— Cierrala tú, lesbiana inmunda.

Esta lo miró con odio y decidía se fue en su direccion pero la detuve.

— Nonono, ¡Hazbin Hotel! -dije recordándole. Esta se calmó y asintió.

— Putas.

Me acerqué a este y apoyé mis brazos en el mostrador, aumentando mi busto.

—¿Que miras gatito?

— ¿De ti?, nada. Ni lo intentes, no me interesas de esa forma —respondió seco.

Reí arrogante. Tomé de su ropa y lo atraje hacia mi.

— Escuchame bien sucio gato de la calle, o bajas tu humor o te voy a meter un palo en el culo, ¿De acuerdo? Ya he estado con idiotas como tú, con el simple detalle que no tenían pelo. Ustedes no son muy distintos de los de allá arriba.

Este sonrío, bebió de la botella un gran sorbo y dirigió su mirada a mi, juntando su frente con la mía.

— Escuchame tú, perra. Eres una tonta humana y yo un demonio, recuerda que eres inferior y además...¿Eres asi de ruda en la cama? Porque me interesa.

Sonrío con superioridad.

Hice un gesto de asco y lo solté brusca.

— Yo gano.

Rode los ojos.

— Si no fueras tan...Estúpido me caerías bien.

— Sisi, a quien le importa.

— ¡ugh! ¡Me sacas de quicio!

Este río corto.

— ¡Acá está! Es una nava...-¿Que ocurrió aquí? Esta medio tenso el ambiente...

—Nada de que preocuparse. Dame la navaja —me la extendió— y adiós.

Niffty

Me senté en el mostrador de un salto mirando a la humana como se iba vestida de demonio con su pequeña navaja. Reí.

—¿De qué te ríes? —dio un sorbo a la botella.

— De lo divertido que es este hotel...Alastor nos dio diversión, ¿Eh? —frunció el ceño— Me pregunto cuánto durará esta humana aquí...

— Es una estúpida.

— Se acostumbra rápido, bastante. Puede que sea su lugar aquí abajo.

— Es una humana, Niff.

Asentí.

— Pero, cuando muera...En fin. Parece que te agrada.

— Ni lo sueñes.

— Oh vamos, no puedes engañarme. Te agrada Zenda, lo sé y lo noté. Te conozco.

— Ugh —bebió de la botella y se apoyó en su brazo mirando a otro lado—. Es solo que me recuerda a alguien de mi anterior vida...

— ¡Lo sabia!

— Cierra la puta boca, Niffty.

Ella río divertida y se fue bajando del mostrador.

Yo por mi parte suspiré y me dediqué a tomarme una pequeña siesta en el mostrador.

•••
¡hola y adiós!

La nueva llegada || Hazbin Hotel X OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora