La nueva llegada || Hazbin Hotel X Oc

17

Zenda

—Entonces... Distraes a los guardias, haces de carnada mientras yo me meto en esa "fortaleza" —dije con sarcasmo— y busco al señor Lucifer, dios del inframundo, demonio de todos y pa-

—Zenda, deja de burlarte.

Paré en seco y me reí nerviosa al ver la cara de Dust serio con las cejas levantadas dandome a entender que ya no me soportaba.

—Bien bien, tu ganas dejaré de burlarme de su endemoniado mundo. ¿Feliz?

—Mmm...Un poco, ¿Sabes que podría hacerme sentir mejor? —levantó sus cejas una y otra vez descaradamente.

Reí.

— Una buena golpiza en tu bello rostro, ¿Eso quieres decir?

Llevó una de sus manos a su pecho agarrandolo con fuerza y la otra a su frente dramatizando dolor.

—Oh, pero que golpe duro fue ese...¡Aunque me dijiste bello! Oh Oh Zenda, me lastimas...

— Sisi, ya —moví mi mano restandole importancia—. Deja de hacer el payaso ahora y continuemos con esto.

— Ah claro...Zenda...

—¿Si? —dije sin dejar de ver el papel en el que dibujamos paso a paso el plan.

—Me olvidé de lo que estabamos hablando.

Lo miré incrédula.

—¡Tú idiota! Ese "polvo de angel" te esta dejando estúpido —suspiré—. Haces de carnada y yo entro. En eso quedamos.

— ah si, bueno ya me acordé. No quiero hacer de carnada.

— ¡¿Qué?! ¡¿Como que no?! ¡Si hace un momento me dijiste que sí!

— Expiró.

— ¡Tú vas a expirar demonio de cuarta!—dije mientras me arremangaba.

—No quiero ser de carnada, hazlo tú.

—¡Pero si yo debo hablar con él!

—¡Ya sé! Escribe las preguntas y yo las haré por ti —dijo sonriente y seguro de si mismo.

¡¿Me está tomando el pelo?!
Grité fastidiada y salté encima de él, tratando de matarlo con mis manos, este trataba de evitarlo.

—¡Te voy a matar! ¡Quedate quieto!

—¡No! ¡Quiero seguir haciendo porno! ¡Ademas tengo muchas cosas que disfrutar y experimentar!

—¡Eres increíble! —dije incrédula. Pero, el idiota se lo tomó como un halago.

—Oh vaya, gracias dulzura.

Esa sonrisa...¡Esa sonrisa fue la gota que derramó el vaso!

— ¡Agh!

Nos revolcamos por todo el salón peleando. Yo tratando de matarlo y arrancarle esa sonrisa idiota y él evitandol riendo.

— Zenda, no creí que tenias estos gustos peculiares...

Paré de pegarle a mi amigo y levanté la vista para mirar al dueño de la voz. Nerviosa, me defendí.

—¡P-Por supuesto que no, Al! Es un malentendido. Yo no tengo estos gustos para el sexo si te refieres a eso. ¡Estoy intentando asesinarlo!

— Ah...Bueno, para gustos no hay nada escrito. Si te gusta lo salvaje, yo puedo ayudarte con eso —me guiñó un ojo sonriendo.

—¡¿Qué?! ¡Pero si te acabo de deci-

Fui interrumpida por la risa del demonio.

—Es broma cariño...Ahora, quitate de encima de Dust. Es una imagen para nada agradable.

Ciertamente entendía a Alastor, estaba encima del demonio sentada en su abdomen bajo y este me tenía las manos impidiendo que terminen en su cara.

Dust me miró y sonrió con diversión, soltandome las manos haciendo que la fuerza que estaba haciendo desaparezca y provocando que caiga encima de él, mi rostro estaba a centímetros del suyo.

—Tú... —dije algo nerviosa y furiosa, lo hizo a propósito.

Fui separada bruscamente por la mano de Alastor quien me posicionó a su lado.

Confundida por la velocidad en que pasaron las cosas tardé en reaccionar.

—¡¿Hah?!

—Oh, lo siento. Es que tenias un insecto en la cara, Zenda —sonrió inocente.

Dust se levantó y se sacudió el polvo. Luego nos dirigió su mirada. Y a Al, lo miró serio.

—¡Miren! —una Charlie animada y muy contenta entró a la sala con un sobre—¡Mi padre hará una fiesta y estamos invitados!

— ¿Una fiesta...?—Pensé unos segundos y sonreí feliz—. ¡Genial!

Si sabia que esto iba a pasar, no gastaba mi tiempo haciendo el plan y peleando con Angel.

— ¿Esta todo bien...? Los noto algo...Tensos

Charlie habló insegura.

—¡Ah, nono! —sonreí— es que les dije como terminaba el final de...Ehm...¡Dulkostrruksu!

— ¿Que es eso?

— Eh...¡Una película turca! ¡No, rusa! ¡Sisi! ¡Una película turca-rusa! Es algo triste...

Charlie algo desconfiada asintió y se fue.

¿Tan mal me volví mintiendo?

•••
¡Hola y adiós!