Once

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Camina sigilosamente por el pasillo casi oscuro. Mira a su alrededor antes de acercarse a la puerta de su antiguo departamento y siente escalosfrios al introducir la llave en la cerradura.

—¡Alto ahí! —grita alguien detrás de él y Joel voltea para verlo. Es Erick apuntandolo con una pistola.

—Erick... —a penas pronuncia antes de ser interrumpido.

—Él es el secuestrador, ¡arrestenlo! —ordena el ojiverde e inmediatamente varios policías aparecen y corren hasta Joel.

El rizado no sabe que sucede pero siente un inmenso miedo. Gira un poco para ver a Erick mientras uno de los policías esposa sus muñecas.

Erick sonríe con satisfacción —Vas a pasar mucho tiempo en la cárcel, voy a encargarme de ello —es lo último que le escucha decir antes que lo empujen fuertemente hacia la pared.

Ese irritante sonido suena una vez más forzandolo a abrir sus ojos. Solo fue una pesadilla.

Estira su brazo con flojera para agarrar su celular y apagar la alarma de notificación.

"Trece días para que expire el plazo para desalojar el departamento"

Bosteza al leer la notificación y la cierra.

Trece días.

Jack aún duerme así que aprovecha ese momento para alistarse. Es casi medio día.

Después de varios minutos ya está camino al minimarket.

Una hamburguesa y un jugo de frutas es todo lo que compra.

—Espero que tus pañales duren otra semana más —le habla al bebé —el dinero ya se me está acabando —se queja —pasar las noches en el hotel son muy caras y no he podido ir a mi trabajo por más de una semana. Tengo que encontrar una niñera para ti, no puedo seguir sin trabajar. ¡Ahhh...! —casi grita —creo que voy a morir.

Los días son siempre iguales. Comida chatarra y duchas frías.

Ya ni siquiera puede hospedarse en un hotel porque los moteles son más baratos.

Jack casi no molesta, parece compartir la preocupación de Joel. Sin embargo existen los días terribles y las noches interminables.

Es en esas noches cuando su corazón se estruja al recordar cómo Erick calmaba al bebé.

¿Es por qué extraña su ayuda o por qué extraña su persona? No se toma mucho tiempo para pensarlo porque sabe que no lo volverá a ver.

Y otra vez los problemas invaden su mente.

Necesita dinero para vivir en ese lugar o a millones de kilómetros lejos.

Debe volver a su trabajo, alimentar bien a Jack, contratar una buena niñera y volver a su departamento por sus muebles. Esa es la idea que más lo atemoriza.

Es muy arriesgado, podría encontrarse con Erick. Pero también necesita esos muebles, podría venderlos y vivir un tiempo con ese dinero.

La alarma de la notificación suena fuertemente devolviéndolo a la realidad.

"Un día para que expire el plazo para desalojar el departamento"

Suspira fuertemente. Quiera o no debe volver.

Camina sigilosamente por el pasillo que apenas es alumbrado por una luz tenue.

Es más allá de media noche.

Tiembla un poco en el momento de introducir su llave en la cerradura y en el instante escucha unos pasos detrás de él.

—¡Alto ahí!

Voltea y ve al sujeto parado frente a él apuntandolo con una pistola.

—Erick... soy yo —susurra intentando dar un paso pero sus palabras lo detienen.

—¡Alto ahí, maldito idiota!








Este capítulo está dedicado a AsherAdeleGrandeBond Gracias por participar en la dinámica y por el apoyo. ❤️

Baby || JoerickWhere stories live. Discover now